~° One Shots e Imaginas de Marvel (Libro Terminado)

°Stephen Strange° (2/2)

Nota: escrito antes de saber lo que pasaba en End Game. O sea que le mandé fruta en su momento xdxd.

~•~

*varios años pasaron hasta que Stark y el resto de los Vengadores lograron conseguir la forma de traer nuevamente a los desvanecidos. Los vengadores que habían sobrevivido al chasquido se reunieron nuevamente en Wakanda, mientras que Tony y tú volvieron a Titan a esperar a sus compañeros. Bruce activaría un portal en algunos minutos*

—¿tú crees que funcionará?—pregunté nerviosa mientras caminaba de un lado a otro.

—Bruce y yo trabajamos en esto junto al hombre termita, estoy seguro de que funcionará.—respondió Tony mientras revisaba su portátil.

—Espero que ningún robot genocida salga de ese portal.—

—¡Eso fue un golpe bajo!—rodeé los ojos—. Hey... ¿quieres hacer algo divertido?—

—¿de qué hablas?—

—Una bromita.—sonrió con maldad.

—Tal vez... ¿qué se te ocurre?—

—¿y si le decimos a los chicos que pasaron 10 años o más? Se quedarán pasmados.—

—No lo sé... pasaron mucho tiempo lejos, creo que lo último que querrían es una broma de mal gusto.—

—Vamos, si lo haces, prometo pagar el alquiler de tu departamento durante... un año ¡no! ¡3 años!—

—Bueno... eso pone las cosas más interesantes.—sonreí.

—Pero no sólo eso, deberás decirle a Stephen que pasaron 10 años y que ya no lo amas.—

—¿También quieres que lo apuñale o algo así? Púdrete, Stark. No voy a hacer eso.—

—¿y si son 10 años de alquiler... y uno de mis autos?—

—Bueno... no nos vendría mal un auto...— miré a Tony—. Esta bien, lo haré. Pero en cuanto note que Stephen se empiece a poner mal o algo así, le diré que todo fue una broma tuya.—

—¿"sí se siente mal"? por favor. Estamos hablando de un hechicero superpoderoso y machote, que por cierto me copió el look.—rodé los ojos—. Probablemente ni se creerá tu broma, pero no perdemos nada con intentar ¿no?—

—Sí, tú perderás millones de dólares y un auto.—reí.

Pasaron unos minutos hasta que un pequeño portal verde comenzó a formarse frente a nosotros. Me puse de pie rápidamente y me acerqué, viendo como Peter comenzaba a atravesarlo.
El chico no tardó abrazarme con los ojos llenos de lágrimas.

—Tranquilo, Pet. Todo está bien, ya estás en casa.—me dedicó una sonrisa y en cuanto vio a Tony se lanzó a abrazarlo.

Uno a uno fueron saliendo todos los guardianes y finalmente Stephen salió. No había cambiado ni un poco, seguía igual que cuando desapareció.
Al verme sonrío y me saludó inocentemente con la mano. Quise lanzarme a abrazarlo pero recordé la apuesta de Tony así que me mantuve seria.

—Hola, Stephen.—solté sin inmutarme a lo que el hombre me miró confundido.

—¿qué pasa? ¿cuánto tiempo ha pasado?—

—Fueron 10 años.—me miró sorprendido.

—¿Qué? No, imposible. No debían ser más de un par de semanas.—

—Pero así fue, fueron 10 largos años. Yo... tuve que superarte, Stephen.—

—¿a qué te refieres?—

—Stephen, yo... lo siento, pero ya no te amo.—el rostro del hombre se puso en blanco.

—No no no, esto no... puede estar pasando.—me tomó de las manos—. Yo te amo, ____.—Los ojos de Stephen comenzaban a enrojecer.

¿iba a llorar?

Sin poder soportar más la mentira, me lancé a abrazarlo.

—Por supuesto que te amo...—me aferré a su cuello—. Sólo era una broma... fue culpa de Tony.—Me separé levemente de él, notando que aún se veía algo preocupado—. Perdón...—

—¿Stark... te hizo mentirme?—tomó mis mejillas.

—Prometió pagar el alquiler del departamento y regalarnos un auto si lo hacía.—cubría sus manos con las mías—. Perdón, sabía que era una mala idea pero... no puedes negar que la oferta fue tentadora.—

—____... casi me MUERO cuando dijiste eso. Todo este tiempo... vagando en la nada... Sólo podía pensar en ti. Y que me hayas recibido con esa cara y esas palabras... no fue agradable.—

—Lo siento, lo siento, lo siento...—

La culpa comenzaba a matarme, cuando escuché la leve risa de Stephen en mi oídos.

—¿qué...?—

—Tenía que cobrarme la broma ¿no?—reí al borde de las lágrimas—. Veo el futuro, mujer. No puedes engañarme.—

—Idiota...—golpeé su pecho suavemente.

—Te amo, ____.—besó fugazmente mis labios.

—Y yo a ti, Stephen.—sonreí.

—Diablos... creo que les regalaré el Audi.—soltó Tony aún abrazando a Peter, quien lloraba desconsoladamente.

—Tú...—Stephen miró molesto a Tony—. Voy a enviarte al Himalaya, Stark.—

—No toques a mi papá... ¡al señor Stark!—corrigió Peter de inmediato mientras se ponía frente al hombre.

—¿podemos largarnos de aquí?—Quill finalmente habló.

Miré a Stephen nuevamente, recibiendo una sonrisa de su parte.

—Hey, Stark.—solté sin despegar la mirada del hombre frente a mi—. ¿qué te parece si cambio mi alquiler y el auto por una casita?—Stephen sonrió.

—Y que sea blanca, Stark. Blanca con un pequeño estanque.—reí mientras lo abrazaba.

Al fin, podíamos continuar con nuestras vidas y nada volvería a separarnos.