—Esto es malo... MUY MALO.—exclamé mientras intentaba inútilmente volver a unir los pedazos de la nueva arma que Rocket estaba diseñando—. ¡Esto es tu culpa!—Miré molesta a Peter.
—¿¡mi culpa!? Fuiste tú quien se lanzó a besarme y me empujó. Si aplasté esa cosa con mi trasero es culpa tuya.—suspiré.
—Al menos no explotó...—
—Sí, pero probablemente Rocket nos haga volar por los aires cuando se entere de que rompimos eso...—
—¿qué hacemos?—
—¡No lo sé!—
—¡tú eres mayor que yo!—
—¡No mentalmente!—suspiré rendida.
—¿qué te parece si la escondemos debajo del sillón?—
—No es una solución muy madura...—enarqué una ceja—. Peeero funcionará.—
Recogimos los pedazos y los metimos debajo del sofá.
—¿y ahora?—pregunté mientras miraba nerviosa la "escena del crimen"
—Podríamos retomar el beso ¿No crees?—
—... Pero intenta no volver a romper otra poderosa arma con tu trasero ¿ok?—Peter sonrió.
—Lo intentaré, linda.—
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