capítulo 46

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LA DUDA
capítulo 46

Los nervios se apoderaron de mi, la adrenalina me hizo mirar cada rincón del lugar para idear como salir de ahí, abri la ventana que estaba en la pared opuesta a la puerta, salte con cuidado y algunas dificultades, cerré la ventana con suavidad, y me escondí entre unos matorrales, los vi asomarse a la ventana, después vi pasar a Neflyte que cuando los vio en la ventana corrió, tal vez pensando que me habian descubierto.
Pasaron algunos minutos intercambiaron palabras y ellos se fueron, Neflyte se asomo por la ventana buscándome, yo dudaba en regresar, pero tenia que saber que habia pasado con Serena, la noche estába por caer y mi padre ha de estar preocupado, sali se los arbustos cuando Neflyte me vio hizo señas para que me acercara rapido, entre por la ventana y me dijo- joven la señora ya llego, dice que se le complica verlo pero que mañana...-
-ya estoy arto de escusas! tienes lapiz y papel?... No puedo quedarme más y me urge hablar con ella - el joven me dio lo que pedi, le escribí a Serena la cituacion de Michiru, y le dije que ya no queria estar lejos de ella; que tenia que tomar una decicion, definitiva. Le di el papel a Neflyte, me ayudo a llegar al río sin ser descubiero, le di las gracias y camine hacia el granero, tome el caballo y regrese a la casa.
-Darien?! Pero que haces aqui?- pregunto Andrew
-estaba en la hacienda de los Kou, quiero que tu y Lita se vayan con Rini lo antes posible!- dije algo fastidiado,
-si la próxima semana...- contesto
-no! tiene que ser mañana o a mas tardar antes del fin de semana- lo interrumpi
-pero porque?!- volvió a replicar
-la bomba va a estallar, hoy le deje un ultimátum a Serena, ya estoy arto de todo esto! Y quiero terminar de una vez por todas- conteste mas con mi estomago que con mi cabeza.
-Darien estas actuando mal, estas volviendo hacer como en tu juventud; recuerda que tus impulsos no te han dado buenos resultados últimamente- replicó
-lo sé, pero... Entiende no es justo lo que nos esta pasando- contesté
-Darien tienes que ser paciente, calmarte, apresurare el viaje, para que estes más tranquilo, pero espera a Serena, recuerda que cuando más oscuro se ve es que esta por amanecer- dijo
-Andrew, no veo el por que estar lejos! por que tenemos que esconder que ya sabemos la verdad? será tardado pero la ley esta de nuestro lado; basta con un simple análisis de ADN, para recuperarlas, y mi matrimonio con Michiru quede sin validez!- dije
-Darien tranquilizate!.. Estas molesto y la ira no es buena consejera, piensa dos veces lo que vas hacer- las frustración en mi llegó al punto mas alto, me quebré y comense a llorar.
-amigo...puedo tener VIH! Al igual Serena!!- dije mientras me deje caer en uno de los sillones.
Andrew permaneció en silencio por algunos segundos.
-Darien no se que decirte; pero antes de preocuparte por eso; es mejor que estés seguro además la ciencia ha avanzado y esa enfermedad es controlable...amigo ve al hospital y cerciorate de los resultados y después toma las decisiones que tu creas que son mejores para ti y tu  familia- sus palabras me hicieron volver a mi madurez, limpié las lagrimas de mi rostro, fui a mi cuarto Rini y Lita se encontraban haciendo tarea.
-hola papi!!- dijo y corrió a mis brazos
-como esta mi pequeña dama?!!- contesté al cargarla
-bien! Tengo mucha tarea y mi tia Lita me esta ayudando- dijo señalado la mesa y su libreta
-hola Darien! Como sigue Michiru- dijo Lita
-hola Lita, igual...pero solo vine a bañarme y regresaré al hospital-
-bueno en ese caso; Rini y yo vamos a merendar para que puedas hacer tus cosas...vamos Rini despidete de papá-
-adiós papi! - dijo Rini y beso mi mejilla.
Las dos salieron y me di un baño, mientras el agua recorría mi cuerpo las lagrimas volvieron a aparece, la tristeza invadía mi corazón y sentía una opresión en mi pecho que me impedía respirar con normalidad, cada vez que cerraba mis ojos la imagen de Serena llenaba mi mente.
Termine de bañarme, y me despedí de  Rini, para volver al hospital.
-papá?...- murmuro
-que pasa princesa?- dije y me senté a su lado
-es que .... Mi tia dice que nos iremos se viaje...- dijo mientras chocaba sus dedos
-si, así es...-dije mirándola con ternura
-pero... por que no vendrás tu?- dijo con sus ojos llenos de lagrimas a punto de caer.
Se me hizo un nudo en la garganta, nunca nos habíamos separado, y ahora lo haríamos por tiempo indefinido.
-Rini... Hija...sólo será por un tiempo...prometo que cuando regreses nunca más nos vamos a separar, pero ahora no es seguro para ti estar aqui, yo tengo algunos asuntos que resolver antes de unirnos-dije mientras limpiaba una de sus lagrimas que ya no pudo contener.
Ella aspiro su nariz, se talló los ojos y me abrazo muy fuerte, yo hice lo mismo y bese su cabello.
-papi! Te voy a extrañar... Dime que pronto estaremos juntos! Prometelo!!- dijo apretando mis brazos con su pequeñas mano, y mojando mi camisa, respire su aroma, era tan dulce igual al de Serena.
-si, mi niña lo prometo!!- limpie mis lágrimas, alce su rostro seque sus mejillas y le di un beso, en la frente, suspire y dije:- bueno tengo que irme, Lita te la encargó mucho...ella es muy importante para mí!- tome la mano de Lita
-lo se Darien! No tienes que pedirlo, sabes que yo quiero mucho a Rini, puedes estar tranquilo- dijo y me sonrio
Sali rumbo al hospital, no pensé que alejarme se mi hija me costaría tanto. Aún en el auto, mis lágrimas salían sin parar, tuve que detenerme antes de llegar para calmarme.
Llegué al hospital, mi padre se encontraba en la sala de espera.
-hola papá! Hay alguna novedad?-
-no hijo, Michiru creé que fuiste a ver a Rini, pero dime que te dijo Serena?-
-no la vi, pero me entere de todo, cada detalle de como Seiya y su padre suplantaron el cuerpo se Serena!- le conté como fue que me entere.
-Darien y que piensas hacer?- cuestiono
-primero tengo que saber los resultados, y después decido- conteste
-señor Chiba, que bueno que ya regreso, ya tengo sus resultado por favor acompañeme, a mi consultorio.
Le pedi a mi padre que me acompañara, por fin la duda sería  disipada. El doctor se sentó, nosotros tambien, sacó un sobre blanco y lo abrio.
Su mirada se fijo en la hoja, mis manos comenzaron a  sudar, sentía cada latido de mi corazón, respire lento pidiendo no estar contagiado.
-señor Chiba... Lo lamento pero la prueba salio positiva-
Mientras escuchaba esas palabras, apreté mis puños, mis ojos se comenzaron a llenar se lágrimas y mi corazón estaba apunto se salirse, no tenía mas que cuestionamientos y reproches para la vida.

LA DUDA (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora