peligro | Harry Styles #2

veintiuno

Me alejé de Louis y le sonreí.

¿Cómo había sido capaz de hacer llorar a mi mejor amigo?

Miré a los demás.

Liam me sonreía, Zayn daba golpes con su pie en el suelo, Niall mordía sus uñas y Harry simplemente me miraba.

Fui hasta él y le abracé.

Hacía tanto tiempo que no le veía.

Rodeó mi cara dulcemente con sus manos y me inspeccionó el rostro.

—¿Te ha hecho daño? — preguntó.

—Creo que deberías preocuparte más por ella, casi le abro la cabeza.

—Le has dado una buena paliza.

Rió levemente.

—Creo que he aprendido del mejor.

Le acaricié la mejilla.

Harry besó mi cabeza y volvió a rodearme con sus brazos.

—No quiero que te vuelvas a pelear. Me gusta que sepas defenderte, pero no quiero que te hagan daño.

-No te preocupes por eso.

Me quedé con él un rato más hasta que fui junto a Zayn.

—¿Podemos hablar? — le pregunté.

Asintió y nos alejamos de los chicos para poder hablar a solas, no sin antes decirles que los veríamos más tarde.

Nos dirigimos a unos bancos que habían frente al instituto y nos sentamos en uno de ellos.

—¿Qué tal estás? — habló por primera vez desde que nos habíamos visto.

—Bien, ¿y tú?

Se encongió de hombros y le vi sacar un cigarro y encenderlo.

—No me quejo. — respondió.

Lo posicionó entre sus labios e inspiró el humo.

—Fumar es malo. Pero peor es la razón.

—Me ayuda a liberarme.

—Igual que a mí ignorarte.

—Entonces dejémoslo. — dijo tirando el cigarrillo al suelo.

—¿Por qué lo haces? — le pregunté.

—Me gusta.

—Prométeme que no volverás a hacerlo.

Alzó la vista al cielo.

—Lo prometo.

Era confuzo, no quería creerle, pero se me hacía inevitable no hacerlo.

—¿Qué hay de tu vida Zayn?

—Nada importante, ¿y de la tuya? Hacía mucho tiempo que no nos veíamos, ¿por qué?

—Dije que necesitaba tiempo.

—¿Sabes qué? — me miró — Que no te creo.

Y hacía muy bien al no creerme.

—Tira el paquete de tabaco, ahora.

—Lo haré después.

—Te está matando desde dentro.

Zayn suspiró y me lo entregó.

—Hazlo tú.

—Suena como si fueses un drogadicto. — me miró con el ceño ligeramente fruncido — No eres capaz de tirarlo tú mismo. — le expliqué.

Me arrebató la cajetilla de las manos y se acercó a una papelera que fue donde la tiró.

Volvió a mi lado y se sentó bruscamente.

—¿Contenta?

Más de lo que crees.

Pasamos cerca de media hora en silencio. Simplemente contemplando la vista que había frente a nosotros. Observábamos a todas las personas que pasaban por ahí.

—Vámonos ya. Los chicos están en la antigua casa de Niall.

—Vamos.

Fuimos hasta la casa.

Desde fuera podíamos oírles gritar.
Llamé a la puerta y a los pocos segundos apareció Niall con una sonrisa que se le borró por completo al verme.

—Hola. — dijo.

—¿Podemos pasar? — preguntó Zayn.

Se hizo a un lado y nos dejó paso.

Entre incómoda bajo su mirada.
Tomó mi brazo y me giró hacia él.

—¿Por qué me haces esto?

—¿El qué?

No le entendía.

—Me haces daño, ¿sales con Harry sólo por eso?

Se empezaba a acercar a mí.

—Me gusta Harry.

—Yo también te gusto, no lo niegues.

Cogió mi mano y me guió por un pasillo que se encontraba en dirección contraria a donde estaban los demás.

Nos metió a ambos en un cuarto y cerró la puerta tras nosotros.

Pegó mi espalda contra la pared y presionó su cuerpo contra el mío.

Besó mi clavícula y apretó ligeramente mi culo.

Le separé de mí en el momento que me di cuenta de lo que estábamos haciendo.

-Estoy intentando olvidarte.

Volvió a acercarse a mí pero puse a tiempo mi mano sobre su boca.
Le oí bufar.

—No quiero que me olvides.

—Tú deberías hacer lo mismo. Tienes una relación con Amanda.

—¡No quiero a Amanda! ¡Ni siquiera me atrae!

Posicionó sus manos en la pared a ambos lados de mi cabeza, impidiéndome ir.

—Entonces no juegues con sus sentimientos.

—¿Cómo tu has hecho con los míos durante todo este tiempo?

—No digas eso. Yo sentía lo mismo que tú.

—Los sentimientos no se olvidan tan rápido como se supone que te ha pasado a ti.

—Nunca he dicho que haya dejado de quererte.

En ese momento Harry entró violentamente en la habitación.

—¿¡Qué estáis haciendo!? — gritó.

—Absolutamente nada, sólo hablábamos. — dije.

Me liberé del agarre de Niall y me acerqué a Harry.

Abracé su cintura y él mi espalda.

Niall rió irónicamente.

Se iba a marchar, pero antes me susurró en el oído.

—Duele saber que jamás me mirarás de la manera en la que le mirás a él.

Sentí como sus palabras se clavaron en mi corazón.

Estaba haciendo daño a mucha gente.

Se fue dejándonos a Harry y a mí completamente solos.

—¿No habéis hecho nada verdad?

Comprendía que Harry dudara que hubiera sucedido algo o no considerando mi historial con Niall.

—No ha pasado nada. Lo nuestro acabó hace tiempo. Ahora sólo tú ocupas mi pensamiento.