peligro | Harry Styles #2

treinta y nueve · final ·

Me lo estaba pasando muy bien con los chicos, pero entonces recibí la llamada de Louis.

—Se está yendo Harry. — dijo en un susurro mientras lloraba — Nos está abandonando. Ven.

Me quedé un rato con el teléfono presionado contra mi oído y apretándolo con fuerza.

Entonces reaccioné, dejé caerlo al suelo y corrí hacia el interior del hospital, por el camino me puse una mascarilla que había guardado al salir. Oí las voces y los pasos de los chicos detrás mía, pero los ignoraba, no podía perder el tiempo.

Corrí escaleras arriba, me iba chocando con la gente y les gritaba para que se apartaran y me dejaran paso. Me tropecé y estuve a punto de caerme.

Llegué a la planta y sentí mi corazón dejar de latir por unos segundos. A lo lejos vi en la puerta de la habitación de Amber a Louis andando en círculos y a Cristina apoyada en la pared y mirando al techo.

Fui a donde estaba Louis.

—¿¡Qué pasa?! ¿¡Por qué estás aquí fuera!?

—No nos dejan pasar. — dijo entre sollozos — Hay dos médicos dentro con sus padres, ellos son los únicos que pueden estar ahí.

—¿¡Sabes lo que te digo!? — me revolví el pelo nervioso — ¡¡Esa chica me ha dado los mejores momentos de mi vida!! ¡¡Y le prometí que estaría con ella cuando se fuera!! ¡¡Y yo siempre cumplo mis promesas!!

Le pegué un empujón y abrí la puerta de golpe. La voz de Niall me decía que me parase, pero ya estaba dentro. Y con Louis a mi lado.

Uno de los médicos intentó echarnos pero conseguí quitármelo de encima. Los padres de Amber no nos impidieron el paso.

Me acerqué a la camilla y la vi recostada ahí, respirando con dificultad y llorando. Entrelacé nuestras manos dándole consuelo y acaricié su mejilla.

—Harry, — dijo con las pocas fuerzas que le quedaban en aquel momento. Apreté su mano aún más — no estés triste, estarás bien, yo estaré bien. — una lágrima se deslizó por su rostro y la limpié — Te estaré esperando. Cuida de todos.

Aparté mi flequillo de mis ojos y la miré, los suyos estaban rojos y cristalizados, dejaban escapar lágrimas sin control.

—No me dejes. — le pedí — No puedes irte Amber.

Cerró los ojos con fuerza, estaba sufriendo, le dolía.

—Cuídate... Harry.

—No Amber, no puedes. Estamos todos aquí. Tienes que luchar.

—Tengo mucho miedo Harry. — respiró profundamente — De lo que venga ahora. ¿Y si todo es solo una completa oscuridad?

—No, Amber no. Te espera algo bueno, algo genial. Ahora podrás descansar para siempre y no tendrás preocupaciones.

—Louis, — estiró su mano y agarró la de mi amigo, que estaba a mi lado llorando, como todos — siempre has sido la persona más importante en mi vida. Y te voy a echar mucho de menos.

—Yo también te voy a echar de menos muñeca.

Sonrió y parpadeó varias veces para aclarar su mirada.

—Te quiero.

Dejó escapar su último aliento y aquellas fueron sus últimas palabras.

Una de las máquinas que había conectada a ella comenzó a emitir un pitido agudo constante.

Entonces los médicos nos echaron a Louis y a mí de la habitación.

Estaba en shock. No podía creerme lo que acababa de suceder. Zayn me abrazó, pero yo no pude devolverle el abrazo.

Tenía la mirada perdida y estaba llorando descontroladamente. Amber ya no estaba, ya no estaba con nosotros. Parecía tan irreal.

Empecé a pegar puñetazos y patadas a la puerta mientras gritaba su nombre. Los chicos intentaban pararme. Salí corriendo del hospital, me monté en mi moto y fui a mi casa. Empecé a tirar todas las fotos que tenía en el salón, menos la que ella rompió. Esa era única y perfecta para mí.

Subí a mi habitación y tiré su bandera de Canadá a la basura.

Me quité toda la ropa quedándome completamente desnudo y me metí en la ducha. Dejé caer el agua caliente sobre mí provocándome algunas quemaduras.

Me senté en la ducha y lloré.

Amber, mi Amber ya no estaba.

¿Cómo sería todo sin ella? Aún no podía creérmelo.

Ya la estaba echando de menos.

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Este es último capítulo, pero tengo pensado hacer un epílogo.

Muchísimas gracias de verdad a todos mis lectores, me ha encantado escribir esta novela. Y vuestro apoyo por comentarios, mensajes y votos me ha ayudado un mogollón a seguir adelante. Así que muchas gracias.

Y estar atentos, pronto subiré el epílogo, y ese será el final de Peligro para siempre.

© Biall xx (belenaragon) 2015