Princesas de las estaciones (Jelsa) [Terminada ✓]

DIECIOCHO

Elsa

Corrí hacia el lado contrario a los arbustos adentrándome al bosque al mismo tiempo, podía escuchar los pasos de alguien corriendo a mis espaldas que, para mi suerte, está lejos de alcanzarme.

Bueno, que de algo sirvan los entrenamientos de Aster.

Llevaba 5 minutos corriendo hasta que vi un grupo de rocas junto a una gran cueva, perfecto escondite, especialmente porque ahora está nevando un poco y yo traigo unos jeans blancos y un chaleco crema. 

El mundo está a mi favor.

Corro atrás de aquellas rocas y me agacho para que así quien sea que me viene siguiendo no pueda verme pero yo si a él.

Luego de unos segundos escucho pisadas cada vez más lentas en la nieve, me asomo para ver quién está ahí y veo la blanca cabellera del idiota mayor dando vueltas y buscándome con la mirada frente a la cueva junto a mí, poco a poco se acercaba al lugar donde yo estaba escondida dándome un perfecto ángulo para asustarlo, la espalda.

Lentamente salí de mi escondite sin hacer ningún ruido y cuando estoy lo suficientemente cerca de Jack rodeo su cuello con mi brazo derecho y siento como da un salto.

Jack trata de liberarse de mi pero por la posición en la que estamos yo tengo la ventaja, especialmente porque él no sabe quién soy.

- Seas quién seas no te recomiendo atacarme - Me dijo levantando sus manos.

Me reí levemente y le di un golpe en la parte de atrás de su rodilla haciéndolo caer , doblé un poco mi cuerpo y antes de que pudiera hacerme algo lo golpee con mi rodilla en su estómago, luego de eso lo derribé dejándolo recostado sobre su estómago en la nieve, tomé su brazo izquierdo y lo doblé dejándolo inmóvil y sometiéndolo.

- Okey! me rindo, sólo, déjame ir.

- Eso te pasa por seguirme y espiarme, idiota.

- Elsa?! - Salgo de su espalda y me paro junto a él - Cómo me hiciste eso?!

- Pues para tu información, idiota, se pelear, de hecho yo era parte de la Guardia de mi Reino, al igual que las chicas sólo que del Reino de cada una.

- Solo me derribaste porque iba desprevenido, si fuera una verdadera batalla, ganaría yo. - Dijo adoptando una pose más arrogante de lo normal.

- Me estás retando, Frost? - Dije acercándome amenazadoramente hacia él. - Porque si es así, con gusto lo tomaré.

- Hecho. - Dice Jack antes de proporcionarme un puñetazo el cual, fácilmente, esquivo.

Al volver a mi posición inicial le doy una patada a Jack en el estómago lo cual hace que este se agarre su estómago. Cuando hace eso yo golpeo con mi codo su cintura y luego paso una pierna por debajo de él logrando que caiga.

- JA! Te he dicho que puedo, ay! - Mientras estaba alardeando, Jack pasó una de sus piernas por abajo de mí logrando que yo termine tumbada en la nieve y sobre mí, en pocas palabras, terminamos en una posición muy comprometedoras por lo que por más que me gustaría que todos vean como parto el trasero de Jack, agradezco mucho que nadie nos ve así, especialmente porque Jack acercó su cara demasiado a la mía.

¿Qué jamás escuchó sobre el espacio personal?

- ¿Qué decías, Elsita? - ríe maliciosamente - deberías ser más modesta.

- Mira quién habla - aprovechando que está algo distraído, me impulso hacia atrás dando una voltereta hacia atrás logrando que Jack quedé tumbado y yo sobre él.

Puta madre, sigue siendo una posición demasiado comprometedora.

- Decías algo, Jacki? - Él sólo me mira enojado y trata de darme un puñetazo el cual esquivo nuevamente y esta vez rápidamente agarró su brazo y me pongo de pie haciendo que Jack quedé acostado en la nieve sobre su estómago, doblo el brazo de Jack en una llave dejándolo inmóvil.

- Bien! me rindo, me rindo, suelta mi brazo!

- Di que soy mejor que tú.

- Jamás diré eso - Tiré más fuerte del brazo de Jack - AH! Bien, tu eres mejor que yo, ahora déjame ir...por favor.

- Cobarde - Dije mientras me ponía de pie y salía de su espalda.

- Si sabes pelear - Dijo mientras estiraba y movía sus brazos - y muy bien.

- Deberías verme con las armas - Le dije sonriendo arrogantemente.

Jack estaba apunto de decir algo hasta que un rugido resuena dentro de la cueva junto a la que estábamos. Jack mira en su dirección con los ojos casi saliendo de órbita y yo miraba atentamente tratando de ver en su interior.

- Creo que será mejor irnos - Dijo Jack dando media vuelta y volviendo por donde ambos vinimos pero antes de que pueda alejarse un poco lo tomo de su gorra y lo detengo.

- No, ese rugido, yo se que lo he escuchado antes pero, dónde?...

- No lo sé, Elsa, pero definitivamente, no quiero averiguarlo - Jack trata de irse otra vez pero yo todavía lo tengo agarrado de su campera.

De pronto de la cueva la cabeza de un animal se asoma, enfoco mi visión y veo a un tigre blanco pero hay cosas inusuales en él. No tiene líneas negras, su nariz es blanca y no rosada y sus ojos son negros cuando deberían ser azules.

- Por qué hay un tigre de bengala en la salida de la cueva con un rugido que parece de dragón y no nos ataca? - Dice Jack susurrando.

- Porque no es un tigre, idiota - Una sonrisa aparece en mi cara - Es un changist, clase 1 de invierno.

- Un qué? - Dijo Jack levantando una ceja

- Es un animal de mi tierra y este es de mi reino, por eso es alvino. No te preocupes, Jack, son inofensivos.

- Ah, si?, pues no lo parece.

- Quiere que lo sigamos. - Le dije a Jack - Es lo que los changist hacen, te ayudan a encontrar cosas que necesitas, pero sólo si tu corazón es puro, si no lo eres sueles toparte con los de nivel 2, ellos te llevan a tu perdición.

- Y cómo sabes cuál es cuál?

- Los de nivel 1, cambian a formas a las cuales no te acercarías, pues ellos son incapaces de matar, en cambio, los de nivel 2 aparecen en momento en los cuales no deberías alejarte de dónde estás, pero ellos cambian a formas tiernas para que tu los sigas y puedan comerte.

- Creo que no me gustaría vivir en tu reino.

- Y aún no sabes todo. - Dije medio riendo - Vamos.

Caminamos en dirección a la cueva donde rápidamente aquel tigre entró con nosotros siguiéndolo a sus espaldas.