Princesas de las estaciones (Jelsa) [Terminada ✓]

VEINTISIETE

Elsa

- Qué sucede hoy? - Dije mientras entrabamos todos juntos al taller de Norte ya vestidos y preparados para la misión.

Así es, tenemos trajes; el mío consiste en unos jeans elásticos negros el cual trae equipamiento para bastantes tipos de armamentos, junto a un top negro sin mangas, una chaqueta de cuero azul oscuro y ajustada más unos botines militares negros. En cuanto a armas, yo uso dos pistolas revolver rhino, una espada y algunas dagas en caso de acercamiento del enemigo.

El traje de Jack es similar al mío solo que él usa una camiseta azul y una chaqueta negra, sus armas además de su cayado, son una espada y una pistola de bolsillo en caso de emergencia, cabe destacar que las balas de todos nosotros están hechas a base de nuestros poderes para así poder destruir a las sombras y no atravesarlas.

Todo el resto de los trajes eran iguales de chicas como el mío y chico como el de Jack (a excepción de Hipo quien usa una linda armadura que combina con la cola de chimuelo) pero cada uno tenía algo de color diferente, Mer guantes de cuero rojos para que tanto tirar del arco no le dañe, Anna tenía un pantalón verde militar en el cual guardaba sus pistolas, Punzie usaba una chaqueta morado oscuro arremangada ya que sus armas eran un brazalete de flores que se convierte en un látigo cuando ella quiere y una sartén la cual lleva en un equipamiento sobre su espalda, Flynn usa una espada grande y dos pequeñas todas equipadas en su vestimenta negra y Kris ocupa dos hachas y una pistola de repuesto.

- Hay mucha actividad de sombras en el centro de un bosque en Nueva York.

Al prestar más atención a cuando la imagen se acercó mostró un pequeño claro en aquel bosque donde supuestamente había actividad de sombras pero no se veía nada aunque al ver alrededor del bosque se me hacía extremadamente familiar, seguro porque es el primer lugar que vi al llegar a este lugar.

- Que extraño, no hay nada ahí. - Dice Norte observando el lugar reflejado en su globo terráqueo.

- Porque las sombras no están ahí. - Dice Punzie seguramente deduciendo lo mismo que yo.

- A qué te refieres? - Dice Aster.

- A qué están en el bosque encantado. - Digo soltando un suspiro pesado. - Y tratan de venir aquí.

[...]

Sentía rabia, enojo, preocupación por mis padres y tíos, por mi pueblo, frustración por no poder salvarlos y mucha decepción de mí misma por estar aquí de lo más tranquila y a salvo mientras que toda mi familia y gente está luchando por su vida y mantener la luz con toda esa oscuridad.

- Maldita sea! -Estrellé mi mano sobre el montón de nieve junto a mí lastimando un poco mis nudillos pero en este momento nada me importa.

Esta es la clase de momentos que odio más que a nada, ese momento en el que no sabes si llorar o gritar o golpear algo por lo que simplemente suspiras y callas y te guardas todo para destruirte por dentro porque al parecer es lo único que sabemos hacer sin importar nuestro estado de ánimo.

- Hey, tranquila. - Al escuchar la voz de Rapunzel lo único que hago es suspirar tratando de relajarme para no gritarle por algo en lo que ella no tiene nada que ver en torno a la culpa.

- Lo lamento, es solo que, no se que debería sentir ahora mismo.

- Nadie te dice que deberías sentir, por ejemplo yo tengo tantos sentimientos encontrados que no sé ni que cara poner.

Cuando Punzie dice eso yo no respondo nada por lo que el ambiente se quedó en un total silencio.

- Te das cuenta de que si quieren atravesar a este mundo significa que ya dominaron el nuestro?

- Lo sé, pero Elsie, no hay absolutamente nada que podamos hacer, yo también estoy preocupada por todos pero, estamos aquí y ellos allá.

- Excepto que sí hay algo, Punzie, entrenamos por mucho tiempo, ya hemos derrotado a sombras incluso sin el resto del equipo, ya estamos listas, sabemos luchar en cambio nuestra gente está indefensa, probablemente muchos hayan muerto o están por morir. Nos necesitan más que nunca. Además tengo un muy mal presentimiento.

- Crees que es lo mejor?

- Lo sé.

- Bien, se lo comentaré a las chicas y lo discutiremos, pero, por qué no vas a caminar? Necesitas relajarte.

- Supongo que sí - En eso me vino a la cabeza lo de esta mañana y que tal vez podría hablar con Jack y quitarme la duda respecto a su pregunta - Dónde están los chicos?

- Los chicos o Jack? - Dijo Punzie sonriendo.

- Cállate.

- Cada uno fue a registrar distintos lugares de la ciudad, nosotras tuvimos que quedarnos para analizar esto tranquilamente, no podemos ir a desquitarnos con cada sobra que se cruce en nuestro camino. - Ante eso, Punzie se fue caminando a donde yo supongo están Mer y Anna.

- Supongo que iré sola.

Comencé a caminar por el bosque en el que estuve con Jack hace mucho tiempo atrás hasta llegar al claro donde jugamos lugar donde decidí quedarme sentada.

Yo tenía razón y Punzie lo sabía, somos l única esperanza de los cuatro reinos y no debemos quedarnos aquí sentadas esperando a que se destruya por las sombras.

Debíamos irnos, teníamos que, aunque admito extrañaré a los chicos, fueron los mejores siete meses de mi vida a pesar de las primeras peleas, encontré una familia cuando creí que iba a perderla, sólo gracias a ellos, y es por eso y más que los extrañaré más que a nadie.

Siempre vivirán en mi memoria e incluso me atrevo a decir que Jack vivirá por siempre en mi corazón; no suelo decir cosas cursi así que imaginen como me tiene.

Porque tal vez no pueda decir que lo amo, pero si que lo quiero y mucho, pero no podía, no quería admitirlo porque sabía que algún día me iría y no volvería a verlo, pero cada vez que lo niego me gusta más que antes y no entiendo porqué.

Además de que nunca antes en mi vida quise a alguien como lo quiero a él y ahora que al fin soy capaz de aceptarlo es el momento en el que debo marcharme.

Malditos sentimientos.