BE US (against the world) - zerrie

|3. Cliente asiduo|

Caleb estaba ahí, de pie. Con la chaqueta del equipo y el cabello pelirrojo mojado estirado hacia atrás. Detrás de él había unos cuantos jugadores más.
Lucía molesto.
Y para mi fortuna, estaba mirándome a mí de aquella forma que siempre me había hecho sentir tan vulnerable..

-¿Vas a defenderla?-

-Dejala en paz.-

-Váyanse de mi bar. ¡Ahora!- John gritó a mis espaldas, molesto. Probablemente más que por mí, por los clientes; a nadie le gusta presenciar en medio de la cena una pelea entre chicos llena de comentarios burdos y misóginos. -¡Lárgense!-

Los muchachos - de muy mala gana - juntaron sus cosas y se fueron, bufando y mirándome con los ojos en rojo.

Mientras que yo, intenté no inmutarme ante la mirada penetrante de Caleb.

-Gracias John.- murmuré, agradecida.

-¿A mí no vas a agradecerme?-

Apreté los ojos al sentirlo a mis espaldas. En serio, no necesitaba pasar por esto esta noche.

-Estoy trabajando.-

-Lo sé. Pero necesitamos hablar, lo que dijo el idiota de Logan..- estaba siguiéndome, mientras yo repartía los platos que cargaba.

-Lo que dijo el idiota de Logan, es cierto. Dormiste con Sadie, fin de la historia, Caleb. Ya no me sigas.-

-No es como vos crees.-

-Por supuesto que no. Seguro accidentalmente sucedió, ¿verdad? Con ustedes siempre es así.-

-¿Ustedes?-

-Los de la Uni. Son todos iguales, así que no estoy decepcionada si eso es lo que te aflige.-

-Quiero que arreglemos las cosas.-

-Lástima, yo no.- dejé unos platos sucios sobre el mostrador. Y decidí enfrentarme a Caleb cara a cara.

-Pezz.. Yo lamento haberme comportado como un idiota.-

-El problema no fue que durmieras con Sadie. ¿Sí? Va más allá de eso, y estoy demasiado ocupada para hablarlo.-

-Pero..-

-Estoy trabajando. Ya basta. Podes sentarte en una mesa con tus amigos y ordenar, o podes irte y dejarme en paz.-

Él me miró por unos segundos demasiado largos, parecía genuinamente arrepentido, o dolido quizá.
Eso no era suficiente para intentar arreglar las cosas. Menos aún en ese momento.

-¿Todo bien, Pezza?-

-Sí. Lamentó que sucediera todo esto, acá.-

-No te preocupes, linda.- John me sonrió, Caleb se había ido a sentar junto a sus amigos, pero podía sentir aún su mirada en mi espalda -Eva, ¿podes atender la mesa de los jugadores?-

La morena, que acaba de llegar en busca de sus órdenes, asintió. Y me sentí agradecida.
Le murmuré un "gracias" al que ella respondió con una sonrisa.

-Vamos linda. Ánimo. ¿Qué te parece llevarle este filete con batatas a la mesa siete?-

Aprecié un poco la actitud de John, así que le sonreí y asentí, tomando lo que me ofrecía empujando con un dedo.
Tomé el platillo y caminé recta, intentando hacer como que no había pasado nada. No es que Caleb significara tanto para mí en ese momento, pero toda la situación era molesta, estaba enojada con él y con todos los otros idiotas.