BE US (against the world) - zerrie

|22. Placer insulso|

Ya era tarde cuando salía de la universidad y yo estaba sumamente cansada. En lo único que podía pensar era en que en unas horas ya tenía que estar en Jerry's trabajando con mi mejor cara, y no estaba muy segura de ir a lograrlo. Era de esos días en los que lo único que anhelaba era poder tirarme en mi cama y dormir, olvidándome de todo.

-¡Perrie!-

Logré divisar a Martin, que estaba siguiéndome fuera del edificio, y lucía agitado, dando la impresión de que venía intentando alcanzarme desde una distancia considerable.

-Hey.- sonreí -¿Cómo estás?-

-Bien.- exhaló -¿Vos? Las ojeras te delatan.-

-Tuve un día largo, estoy cansada.- me encogí de hombros -Y todavía tengo que ir a cubrir mi turno de hoy en la noche.-

Él asintió, con una sonrisa torcida.

-La otra noche fui a Jerry's, ¿sabes? El día que te había invitado a salir.. Quería sorprenderte y quizá acompañarte a tu apartamento cuando terminara tu turno, si vos querías.- mencionó, con una mueca en el rostro, apenado.
En cuanto el había hecho alusión a esa noche, me había sentido empalidecer; él sabía que yo le había mentido. Y definitivamente no había esperado que él fuera a Jerry's, menos aún mencionármelo.
-No estabas.- añadió.

-Martin..-

-Está bien. No sabías cómo decirme que no.-

-Realmente lo siento.- quise disculparme -No es que no me agrade salir con vos, pero me gusta hacerlo como amigos.-

Él movió la cabeza de arriba hacia abajo varias veces, indicando que entendía lo que yo decía, pero la decepción en sus ojos era tan notoria..

-Podrías haber dicho que no querías, yo no me habría enojado.-

-Lo siento.- repetí, porque en verdad detestaba haber herido sus sentimientos, y porque no sabía exactamente qué decir cuando lo correcto era dar una explicación sincera.

No podía decirle que mi razón principal para no querer salir con él, era que estaba demasiado cómoda con otro hombre. Confesar que a penas acabábamos de terminar de tener sexo, yo no había podido evitar pensar en otra persona, era horrible.

Atiné a irme, ambos nos habíamos quedado callados y el ambiente se había vuelto irremediablemente incómodo.

-Perrie, esperá.- pidió -Fue algo que hice ¿verdad? Yo realmente intenté ser bueno y lamento si..-

Sabía que se refería a aquella noche que habíamos pasado juntos.
Maldición si había estado esperando que él no lo trajera a colación.

-No hiciste nada malo.- negué -Realmente no es eso. El problema es mío.-

-Creí que la habías pasado bien.- murmuró con la expresión de su rostro reflejando su confusión.

-Lo hice. Yo sólo..-

-Sé sincera.- clamó tranquilo, y quizá algo desilusionado. -Aunque vaya a doler.-

-Fuiste muy dulce, y eso fue lindo.-

-Pero..- él estaba ansioso por obtener una respuesta, y yo no sabía qué ni cómo decirle.

-Sentí que me tratabas como si fuera alguien especial, y yo sólo soy una chica más.- expresé, quizá demasiado cruda -Son muy pocos los chicos así de considerados y tiernos; y sos estupendo. Sólo que creo que no soy la chica correcta para eso, no es lo que busco y es más de lo que merezco.-