My Name Is Golden P./Larry Stylinson/

Capitulo 13

Apoyo sus manos con fuerza en su rostro, soltando un alto suspiro mientras recapacitaba lo que acababa de pasar. Había dejado que su jefe le hiciera una mamada, ¿Lo había disfrutado? completamente. Su cálida y húmeda boca chupaba su pene como si lo deseara también.

Podía oír el agua llenando la tina a pocos metros suyo, y había algo corriendo por sus venas y cegando su mente que le decía que debía ir hasta el baño y abrir la puerta, estaba jodido.

En todos los años que tenía trabajando, nunca había dejado que sus instintos lo cegaran, había tenido miles de propuestas que había negado para luego renunciar. ¿Acaso Harry lo había acosado sexualmente? no estaba seguro de la respuesta, no cuando el también quería tenerlo de rodillas frente a él, y cuando había empujado su rostro más cerca.

Las preguntas llenaban su cabeza y los nervios consumían su cuerpo.

Cerro los ojos un momento, intentando pensar en otra cosa. Pero su mente volvía al mismo punto, cuando se aparto con sus rojos e hincados labios, mejillas carmín y ojos húmedos que lo miraban con completa paciencia. Y la forma en que se había sentido luego de eso, luego de que Harry digiera que no quería que le devuelva el favor; se había sentido... enojado. Quería devolver el favor, maldita sea que quería. 

Podía imaginarlo ahora mismo, abierto de piernas mientras lo deja lamer su apretado agujero, y sus piernas tiemblan de placer, apenas sosteniéndolo mientras aquellos gemidos que soltaba al rededor de su hombría se hacía real, y más altos. Probablemente lo tome del cabello y lo tire más cerca, rogando por más, para terminar corriéndose sin tocarse y solo con su lengua.

Comenzó a bajar su mano hasta su pelvis cuando la puerta fue golpeada y abierta, Harry estaba parado frente a él, con un ridículo pijama de nubes, le regalo una sonrisa mostrando sus dientes para hablar.

-¿Puedo?-apunto la cama, en un suspiro, Louis asintió, viéndolo entrar a la habitación para sentar en la cama, entrelazando sus piernas mientras lo miraba atentamente- entonces... ¿Estas bien?

-¿Por qué iba a estar mal?

-Bueno, no me has respondido ninguna de las cosas que te dije-soltó una pequeña risa- mira, lo que sucedió en el auto no debería tener mucho importancia ¿bien?-empujo sus largos rizos lejos de su rostro para seguir hablando- yo lo quería, tu lo querías. Fin.

-Eso no lo hace correcto...

-Oh vamos, fue solo una mamada ¿bien? no volverá a ocurrir si no lo quieres. Piénsalo como sexo sin sentido.

Louis mantuvo sus ojos azules quietos un momento, antes de comenzar a mirar atentamente su rostro, sus labios rojos se curvaban en una sonrisa que dejaba ver un hoyuelo, su largo cuello lo guiaba hasta su pecho y estaba seguro que había visto algo de músculos ahí, sus largas piernas se entrelazaban con la otra.

-¿Louis?- los ojos verdes de Harry lo miraban atentamente, bajando por su pecho hasta caer sobre la entrepierna del mayor, tragando saliva para relamer sus labios rojos y alzar la mirada- ¿Tienes una erección?

-No- sí, sí tengo una maldita erección que no entiendo que hace ahí. Pensó, sentía impotencia consigo mismo, soltó un suspiro pasando su mano por su rostro- la tengo.

-¿Quieres ayuda?- cada vez que el rizado usaba esa voz ronca y calmada que había notado, solo usaba cuando coqueteaba o hablaba de sexo. Sus ojos se calmaban y lo miraba por abajo de sus largas y curvadas pestañas negras.