Capitulo 31

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Había llegado a California hace 3 semanas, y luego de tomarse dos semanas de descanso había vuelto al trabajo, posando tras un fondo celeste, usando un vestido fucsia y un tapado de rayas a colores, la música sonaba bajo mientras posaba para la portada del cd. Su peluca naranja lucia sobre sus hombros. 

Posando frente a la cámara, un mojito en su mano mientras entraba en personaje para el cd, olvidando que Louis no estaba ahí porque al parecer nada de lo que paso entre ellos era importante una vez que llegaran a Estados Unidos, y los seis mensajes que le había mandando no habían sido contestados. Y tenía tantas canciones de amor y sexo dedicadas a él, y ahora no había nada. 

Había desaparecido como si nunca hubiera existido, y si creía que eso iba a ponerlo mal... no iba a demostrarlo incluso si era real. No podía ponerse mal ahora,  no cuando todo estaba funcionando tan bien y parecía que tenía a la suerte de su lado.

Y estaba tan orgulloso de ese maldito disco, había trabajado en el, soltando sus sentimientos en cada canción, recolectando memorias que quería duraran por siempre.  Y se sentía como un loco manejando por las calles que le habían contado, aún con el vestido y la peluca sobre su cabeza, el maquillaje perfectamente puesto antes de parar frente al cartel que decía Familia Tomlinson, bajando y caminando hasta la puerta. Tomando aire profundamente antes de tocar el timbre.


-Will ¿Puedes abrir la puerta?

Su corazón comenzó a latir rápidamente, dándose la vuelta para caminar lejos cuando escucho la puerta abrirse y se giro a ver al niño, era una versión de Louis en niño, realmente parecidos, aún que el tenia ojos marrones y pelo negro.

-¿Hola?-el niño lo miro confundido- papá, hay una mujer afuera, creo que esta perdida.

-¿Perdida, estas seguro Will?- y antes de que pueda decir algo Louis ya estaba a un lado de la puerta, pudo ver su rostro caer, sus ceño fruncirse y pararse recto- ve a tu cuarto Will, tengo que hablar con alguien.

-Pero papá...

-Ahora.

Louis ni siquiera se giro a ver a su hijo, ni se movió cuando lo vio hacer un berrinche ni tampoco dijo nada cuando estuvieron solos, cerrando la puerta atrás suyo y apoyar sus brazos en su pecho. La distancia lastimandolo.

-¿Qué haces acá Harry? ¿acaso no sabes que tengo un hijo?

-Lo siento, no creí que el vaya a abrir la puerta.

-Tienes suerte de que mi hijo este acá, no quiero crear un problema.

-¿Suerte? no me has llamado en tres semanas.

-Harry...

-¿Qué? ¿Qué vas a decirme ahora? dijiste que eramos una pareja ahora-Harry podía sentir como a cada segundo se enojaba aun más, dando un paso mas cerca.

-Ya no estoy seguro de eso.

-Oh, ¿No estas seguro? y no pensaste... no se, ¿Hablarlo conmigo, en vez de dejarme como un completo estúpido esperando que me hables?

-Cuando llegue y volví a mi vida, todo eso que hicimos no era posible. Nuestras vidas no se pueden unir.

-Dijiste que no iba a molestar mi trabajo. Fue lo primero que te pregunte.

-No pienso igual- Harry asintió, sintiendo el conocido dolor en su pecho.

-Eres una mierda Louis-lo empujo suavemente- me hiciste enamorarme ¿para que? ¿sexo? ¿cómo puedes hacerme eso?

-Nuestras vidas son muy diferentes.

-¿Lo son? porque lo que recuerdo es hablar de nosotros todo el tiempo, no estando en yates y... malditas cenas caras. Pero debiste decírmelo mucho antes, no tenerme rogando en tu puerta para ver si estabas bien y luego escucharte decir toda esa mierda.

-Hazz.

-No, no soy Hazz cuando quieres y luego me dejas solo. Tengo sentimientos, te conté mi vida, creí que me querías, creí que eras mi novio por Dios. Y tu dijiste primero que eramos una pareja, así que realmente no entiendo que esta pasando-soltó un sollozo.

-¿Podemos hablarlo luego? cuando ambos estemos mas calmados.

-No, dijiste suficiente. Obviamente no estamos en la misma pagina aquí. Eres igual al resto-suspiro- ¿sabes que es lo peor? realmente creí que eras el indicado pero obviamente no lo eres.

-Lo siento.

Harry lo miro, sus ojos rojos bañados en lagrimas antes de darse la vuelta y caminar hasta su auto, conduciendo unas pocas cuadras antes de parar a un lado de la calle y comenzar a llorar, la presión en su pecho mientras intentaba procesar todo lo que estaba pasando. Y habría sido bueno saberlo antes, antes de tener tantas canciones de amor para Louis en su Cd, canciones que iba a tener que cantar todo el año, toda su vida. 



My Name Is Golden P./Larry Stylinson/Where stories live. Discover now