My Name Is Golden P./Larry Stylinson/

Capitulo 22

Especial San Valentin :D

La boca de Louis sabia a menta, sus manos ásperas lo tomaban del rostro con suavidad, y todo era lento y calmado para ser verdad. Habían llegado al hotel hacia treinta minutos y lo primero que Harry había hecho era bañarse, creyendo que para cuando salga el mayor ya se había marchado pero no fue así. 

Se dejo caer a la cama, siendo presionado por el cuerpo del guardaespaldas, entrelazando sus piernas al rededor de su cadera para chocar sus pelvis juntas, los labios del ojiazul bajando por su cuello abierto de la camisa antes de separarse y volver a unirlos a sus labios. Las manos de Louis bajaron hasta sus pantalones, tirándolos al suelo antes de dejar marcas al rededor de su tatuaje en el muslo. 

-Déjame sacarme la camisa- Harry tuvo que carraspear antes de hablar, sus piernas temblaban   temblaban a sabiendas de lo que iba a pasar ahora y su corazón chocaba contra sus costillas.

-No, te queda bien-las manos de Louis tomaron sus piernas para apoyarlas en su pecho piernas, dejando su entrada al descubierto total, las mejillas del rizado se bañaron de rojo apoyando sus manos en su rostro para tirar de su recién lavado cabello lejos, escucho como el ojiazul lamia sus propios dedos antes de acercarlos a su entrada, adentrandolos con cuidado sin apartar su mirada de su fruncida entrada.

Pequeños suspiros escapaban de los labios del rizado mientras era dilatado con tres dedos, una sensación de calma y confianza que lo rodeaba mientras estaba al completo descubierto, aparto sus piernas de su pecho para rodearlas contra Louis y tirarlo más cerca de su cuerpo.

Usando sus propias manos para sacar la ropa de Louis, sus labios uniéndose mientras tiraba de su camisa lejos de sus hombros y desabrochaba sus pantalones de vestir, en algún momento había decidido sacar su propia ropa a pesar de la mirada del ojiazul, tirando la camisa de flores lejos antes de atraer el cuerpo del mayor más cerca.

El frío del invierno los cubría haciendo un contraste con el calor de sus pieles al tocarse.

Y cuando Louis separo sus piernas con las manos para adentrarse dentro de el, sus ojos azules recorriendo las curvas de su cuerpo, las puntas de sus dedos trazando el tatuaje sobre su pecho en forma de golondrinas antes de soltar una embestida dentro suyo.

-Hijo de puta-desde donde estaba, Harry podía ver como apretaba la mandíbula bajo la barba de pocas semanas y los músculos de sus brazos se tensaban, Harry no pudo evitar sonreir con soberbia al ver como su apretada entrada lo llevaba al placer sin hacer ningún movimiento, se apretó a su alrededor para verlo apretar sus ojos y perder el aliento.

Espero hasta que el rizado se acostumbrara antes de embestir lentamente, el calor de sus cuerpos y el placer que los rodeaba los hizo apartarse, dando vuelta al menor para apretar sus piernas entre sus muslos dejándolo sin posibilidades de moverse, las manos del mayor subieron por sus muslos hasta su trasero, apretando antes de apartarlas con fuerza, escupiendo sobre su entrada haciendo al rizado gimotear antes de volver a adentrar su miembro.

La posición solo lo hacia más apretado, la lengua del mayor acariciando la curva de su espalda, sus manos subiendo por sus caderas hasta tomarlo de la cintura dejando una marca en la curva de su mandíbula antes de volver a embestir, y por más que lo intentara, los gemidos escapaban de sus labios rojos, encorvando su espalda en un intento de obtener mas. 

-Por favor- sus labios apretados por sus dientes estiro su mano para tomar la del ojiazul entre la suya y apretar sus manos juntas, sintiéndolo embestir tan lento que podía perder la cabeza. Empujando sus manos unidas contra su rostro, sollozo luego de la quinta vez que su próstata fue golpeada, y cuando por fin Louis dejo sus piernas libres las aparto lo más que pudo antes de levantarse sobre sus rodillas y manos sintiendo su respiración agitarse cada vez más mientras las embestidas arremataban contra su cuerpo rápidamente, lagrimas pesadas cayendo de sus ojos y su boca abierta mientras sentía su cabello se tirado hacia atrás con fuerza y una de las manos del ojiazul golpear su trasero al compás de las embestidas.