Capitulo 38

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Louis estiro su mano, tomando la cintura del rizado para traerlo a su cuerpo y pegar sus pechos, ojos verdes mirándolo atentamente, labios rosados formando una pequeña sonrisa mientras uno de los rizos de su cabello caía dulcemente sobre su rostro. Louis tomo el pequeño rizo entre sus dedos para apartarlo suavemente.

-Gracias por venir hoy.

-Gracias por invitarme, la pase muy bien.

-Me alegro amor. Will la paso bien también, realmente le caíste bien.

-¿Lo hice cierto?-el rizado tenía una mirada brillante y una sonrisa en sus labios.

-Te ganaste su corazón cuando mostraste el pastel que hiciste.

-Quedo bien, lastima que no lo dejaste comer otra porción.

-Si le doy otra porción luego se va a comer todo el pastel antes de que podamos darnos cuenta.

-Pero ese es el punto-Louis sonrió cuando escucho la torpe risita que el rizado dejo salir- bueno... ¿vas a mostrarme tu cuarto?

-¿Disculpa?

-Tu conoces mi cuarto, vamos, quiero ver donde duermes.

-Eres increíble-negó suavemente- la próxima vez que vengas te prometo mostrarte mi cuarto.

-Lo prometiste, confió en ti.

-¿Por qué no vas a sentarte con Will mientras nos hago una taza de té?

-¿Puedes darme un beso?-susurro apenado- solo uno ¿si? realmente quiero un beso.

-¿Quieres besos?-el rizado asintió, el corazón del mayor exploto mientras lo veía ser malditamente tierno, lo tomo del mentón suavemente para unir sus labios en un beso lento y calmado, sintiendo el cuerpo del rizado derretirse sobre su tacto mientras sus labios se movían suavemente sobre los suyos.

Se alejo suavemente, mirando como el rizado seguía manteniendo sus ojos cerrados, era tan malditamente hermoso que le quitaba el aire, realmente no creía que existiera alguien así, no era  justo para el resto de personas, su perfume de vainilla lleno sus pulmones cuando dejo un corto beso en el cuello del menor, escuchándolo suspirar para abrir sus ojos verdes claros. Volvió a unir sus labios tres veces más, casi imposible alejar sus labios de los del rizado, de los pequeños suspiros que soltaba, como sonreía cuando sus labios se unían y la forma en que sus labios se movían juntos.

-Muy bien mi amor, vamos con Will, ya debió haber elegido una película. Le pedí que por favor no sea de superheroes, si crees que no habla mucho de ellos deberías vivir con él-Harry soltó una risa.

-Creo que es tierno-sus rostros seguían completamente cerca, sus narices rozándose levemente- ¿siempre quisiste hijos?

-Sí, aún que esperaba ser más grande para tenerlos... Will es todo lo que puedo pedir para vivir, no puedo estar más feliz de saber que es mi hijo, lo amo demasiado- Harry sonrió- ¿tu?

-¿Yo qué?

-¿Quieres hijos Harry?

-¿Estas pensando en dármelos?-supuso que su rostro se puso pálido porque Harry soltó una risa- estoy bromeando, por supuesto que quiero hijos, tres o cinco.

-¿Cinco?

-¿Por qué no?-alzo sus hombros como si no fuera la gran cosa.

Louis sentía que el aire no entraba a sus pulmones, cinco hijos... eso era mucho, demonios que era mucho.  Serían ocho personas viviendo en una casa, no. Era demasiado, y sus ojos verdes lo miraba sin entender que sucedía, Louis sabía que si le pedía cinco hijos dándole esa mirada una vez más se los iba a dar. Harry lo tenía comiendo de su mano.

My Name Is Golden P./Larry Stylinson/Where stories live. Discover now