DESTINY; Hyuuga Neji. ✓

34.

Cuando finalmente creíamos que teníamos una ligera esperanza de que esta guerra terminase cuando derrotamos a Obito; todo se fue por los suelos en el momento en que Uchiha Madara había revivido.

Con Naruto y Sasuke habíamos intentado detenerlo, pero su fuerza era superior a la nuestra y todo se complicó cuando él invocó a la estatua demoníaca para así absorber a los Biju que anteriormente le habíamos quitado a Obito.

—¡Naruto! —exclamé de manera paranoica al ver como unas cadenas se aproximaban a él y para que no le dieran lo empujé causando que las cadenas me envolvieran a mí; más bien envolvieran a Kurama. —Maldición...

—¡Hermana! ¡Resiste!

—¡Ni se te ocurra venir! —exclamé intentando quitar las cadenas del cuello de Kurama para que dejara de arrastrarnos. —¡Si vienes te pondrás en peligro y si nos atrapa a ambos será el fin!

—¡Pero serás absorbida! ¡No pienso perderte! —me gritó desesperado a lo cual he mordido mi labio con frustración al verlo de esa forma. Detestaba con todo mi ser hacerlo preocupar. —¡Por favor, resiste!

—Eres fuerte. —mencionó Kurama causándome una sorpresa. —Sé que podrás resistir esto.

—¿Kurama?

—Es imposible escapar en este momento. —me ha dicho dejándome perpleja. —Seremos absorbidos y si vienes conmigo morirás.

—No te rindas ahora, Kurama. —dije presionando mis puños mientras miraba como estábamos siendo arrastrados. —Yo no pienso morir.

—Eres una cabeza hueca. Nunca sabes cuándo rendirte, ¿verdad?

—Rendirme no está en mi vocabulario.

—Tu mirada ha cambiado. —me ha dicho mientras soltaba una pequeña risa. —Lamento que debamos terminar de esta forma.

—No hables como si fuéramos a desaparecer.

Kurama en ese momento sonrió y me miró de manera sincera.

—Eres fuerte. Los genes de tu madre están en ti por lo que podrás soportar esto. —mencionó dejándome confundida al ver como extendía una de sus manos. —Agradezco que intentarás protegerme.

—Yo te protegeré, Kurama. —dije algo desconcertada. —Yo no romperé mi promesa...no te dejaré solo.

—Gracias, ____.

Kurama volvió a sonreír y entonces de un movimiento rápido me lanzó lejos de él causando que ambos nos separáramos. Sentí un gran dolor en mi pecho debido a la extracción de Kurama, pero eso no era lo que más me dolía, sino el hecho de que Kurama prefirió apartarme para dejarme con vida y que él fuera condenado.

—¡Kurama! —exclamé con todas mis fuerzas mientras extendía mi mano como un intento de volver a alcanzarlo, pero cada vez me iba alejando más de él y entonces Kurama fue completamente absorbido. —¡Kurama! ¡No!

Antes de que tocara el suelo he sido atrapada por la arena del Kazekage, en ese momento he sentido un gran dolor en mi pecho y me costaba respirar. Dolía bastante y sentía que en cualquier momento perdería la vida, pero no pensaba darme por vencida; Kurama me ha dicho que soy fuerte, él confía en que yo pueda vivir y no pensaba defraudarlo.

❀❀❀

A mi lado se encontraba Sakura intentando por todos los medios que mi corazón no se detuviera.

—¿Cómo está? —preguntó mi padre en el momento en que llegó a nuestro lado a lo cual Sakura le respondió que haría lo que fuera para mantenerme con vida y eso mi padre se lo agradeció bastante. —Te pondrás bien. Eres fuerte como tu madre.

—Cuarto Hokage... —murmuré débilmente notando claramente como él colocaba una expresión de sorpresa al oír como lo había llamado. Yo todavía no me sentía tan segura si debía llamarlo padre después de cómo lo traté cuando nos conocimos; tenía miedo de llamarlo padre en voz alta. —Tengo sueño...

—Ni se te ocurra dormirte en este momento. —exigió Sakura con seriedad a lo cual solté una pequeña risa, pero al momento de reírme sentí un dolor en mi pecho. —Mantente quieta y no hables.

No dije nada o hice algo, me quedé quieta y sin decir nada tal como me lo había pedido; más bien como me lo había exigido.

—¡____! —el oír como Neji me llamaba desesperado y preocupado llamó mi atención. Él se había acercado hasta donde nos encontrábamos y al verme me mostró una expresión dolida junto con un poco de frustración. —Te he dicho que tuvieras cuidado, pero como siempre haces lo que quieres.

—Lo siento...

—¿Se pondrá bien? —le preguntó a Sakura, la cual simplemente realizó una mueca y eso hizo preocupar más a mi novio. —Debe de haber alguna manera de salvarla.

Miré la mano de Neji e intenté sostenerla, pero mis fuerzas eran tan débiles que solamente pude hacer un pequeño movimiento y eso lo había notado él. Neji acercó su mano a la mía y la sostuvo con fuerza haciéndome sonreír débilmente.

—Soy fuerte...Kurama lo ha dicho. —mencioné mientras recordaba las palabras de mi amigo antes de que nos separaran. —Yo no moriré...viviré por él y por todos ustedes.

—Te entregaré mi chakra, hermana. —habló la voz de Naruto dejándonos a todos sorprendidos ante sus palabras. —Te entregaré la otra mitad de Kurama para que puedas vivir.

—Espera un momento, hijo. —le detuvo nuestro padre. —No actúes de manera precipitada. El hacer eso solamente te estarías poniendo en peligro.

—No me importa. No me importa morir si es por mi hermana.

—No digas tonterías, hermano. —mencioné mientras lo miraba con una pequeña sonrisa a lo cual él me miró dolido. —No me sentiría para nada bien si murieras por mí.

—Pero...si no lo hago tú...

—Ella no morirá. —mencionó de manera determinada Sakura mientras alejaba sus manos de mí y se colocaba de pie ante las miradas expectante de todos. —Ya no corre peligro. Hice todo lo que pude y se pondrá bien.

Ante las palabras de Sakura los demás se han alegrado e incluso Naruto se dignó a abrazarla, pero al hacer eso ha recibido un golpe de parte de la Haruno. Yo he mirado a Neji, el cual me veía con una pequeña sonrisa y de manera aliviado, aliviado de que yo no corría peligro y me quedaría a su lado por más tiempo.

—Te pediré un favor. —habló mi padre con seriedad. —Cuida de mi hija mientras nosotros nos ocupamos de Madara.

Las palabras de mi padre iban dirigidas hacía Neji, el cual se sintió un tanto intimidado ante su mirada seria, pero en cuestión de segundos le aseguró que me cuidaría con su vida y no permitiría que nadie ni nada me hiciera daño.

—Te agradezco que cuides de mí. —le dije a Neji mientras veía como mi padre se alejaba junto a mi hermano y Sakura. —Cuando todo termine te lo agradeceré con Ramen.

—Como siempre me harás pagar, ¿verdad? —decía viéndome con una ceja arqueada a lo cual solté una pequeña risa y al reírme sentí un ligero dolor. —Aún no estás del todo recuperada por lo que no hagas nada precipitado.

—Lo que tú digas, Neji.

—Y hablo muy en serio.

Neji me cargó en sus brazos para así alejarme de todo el desastre que estaba provocando Madara, desde donde me encontraba podía ver claramente como mi padre y hermano se enfrentaban al Uchiha.