Estaban todos en clase de Física, algunos jugando y otros sentados en las escaleras charlando. Todos estaban en su mundo, los profesores se habían ido, tal vez por algún asunto de la directora, pero pronto han de volver. Es un día oscuro, está lloviendo pero no lo suficiente. Las luces estan encendidas, ayuda el haber claridad. El gimnasio es grande, pero no enorme. Hay espacios que se encuentran vacíos, el eco es apenas perceptible. Hay una chica, está lejos de todos, observa todo con cautela, sin que nadie se de cuenta, mira a todos lados, tal parece que le gusta observar aunque ya sean lugares vistos. La chica mira hacia su lado izquierdo, se queda su vista ahí por un momento, hay algo ahí, hay algo en la puerta de salida. Una sombra, ¿qué será? ¿Quién será? La silueta se encuentra quieta, no se mueve para nada. La chica se queda extraña, pero no le toma importancia.
De repente, una por una las luces se apagan. Al menos no es de noche. La chica se queda extrañada, y los demás siguen sin darle importancia a su alrededor. Pero, ella ya no está normal, sabe que algo va a pasar, pero simplemente no se quiere alarmar, pues si lo dice, loca le creerán. Hace un poco más de frío ahora, la chica frota sus palmas en sus brazos intentado crear calor. Luego, así de la nada, la única puerta abierta se cierra, ahora todos prestan atención, pero ya es muy tarde, todo esto ya avanzó. Aún sigue estando claro adentro, pero no tanto. Un grito se oye, desgarrador, algo estremecedor. Ahí está de nuevo, esa figura. El rostro no puede verse, pues un abrigo con capucha tiene. Todos se asustan, se alejan, pero algo me dice que escapatoria no queda.
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Short Stories
Teen FictionTe invito cordialmente a leer mi libro, adelante, se es permitido curiosear como un lido gato. Vamos, probablemente descubras historias desde diferentes puntos de vista y percepción de éstas y de sus personajes. Descubre lo que viven, piensan y sien...