"No te miro porque si lo hago, podrás hacer de mí lo que quieras. Cualquier cosa que me pidas, la haré. Porque estoy loco por ti, Gabriel. Enamorado como jamás creí que lo estaría."
A lo largo de los años todos tenemos personas importantes que nos...
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¿Qué hacer cuando sin querer revelas un secreto a la persona que menos debería oírlo?
*
Markku contemplaba el rostro horrorizado de su hermano, que le miraba buscando una explicación y él no sabía que decir. Estaba congelado en el sitio, de pie, delante del sofá, mirando a su hermano y con una mano sobre la boca. ¿Acababa de desvelar el secreto de Adán?
Mat llevaba en su mano las correas de Goliath y Chocolate. Goliath dio un tirón y Mat los soltó. Los dos perros se dirigieron por el pasillo hasta la habitación del fondo arrastrando sus respectivas correas. No había dicho una palabra después de la sorpresa inicial, y cuando vio que ni su hermano ni Gabriel iban a decir nada se acercó hasta estar frente a Markku para poder mirarle a los ojos.
—¿Qué acabas de decir?
Markku miró a Gabriel en busca de algo que ni él mismo sabía qué era; ¿una idea?, ¿ayuda para mentir? O, ¿para decir la verdad? De cualquier manera, pensó que era mejor estar sentados para lo que iban a hablar.
—Mat, siéntate, por favor.
El rubio menor hizo caso a su hermano y con el gesto compungido se sentó sobre la mesa-baúl para a continuación lanzar una bomba que nadie en aquella habitación se esperaba.
—Markku, ¿de verdad papá te hizo eso?
—¡¿Qué?! —Markku, que acababa de sentarse de nuevo en el sofá se levantó de golpe al oír lo que su hermano había preguntado. Gabriel se había quedado mudo.
—¿Papá te-?
—¡No! —interrumpió Markku antes de que Mat volviera a hacer la misma loca pregunta. Se dio cuenta de que había gritado y respiró hondo—. Mat, ¿qué es lo que has oído?
—Algo así como; "Es difícil decirle a la persona que amas que tu padre te violaba de pequeño." Lo estabas diciendo tú y Gabriel es la persona que amas, así que... —Mat hizo un gesto con las manos señalando a Markku y Gabriel al mismo tiempo.
Markku se pasó una mano por el pelo y volvió a mirar a Gabriel. Pensó que no tenía más remedio que explicarle a su hermano la verdad. No podía dejarle creer que era a él a quién le había ocurrido aquello. Suspiró, preparándose para contarle a su hermano la terrible verdad de Adán.
—Mat, lo que te voy a contar es-
—Una tontería —dijo Gabriel interrumpiendo a Markku, el cuál le miró con el ceño fruncido por la confusión—. Verás, lo que has escuchado es la sinopsis del libro que estoy leyendo ahora...
—... ¿Qué? —preguntaron Markku y Mat a la vez.
Gabriel miró a su pareja con una ceja levantada intentando decirle; "Sígueme el rollo", y después miró a su cuñado.
