"No te miro porque si lo hago, podrás hacer de mí lo que quieras. Cualquier cosa que me pidas, la haré. Porque estoy loco por ti, Gabriel. Enamorado como jamás creí que lo estaría."
A lo largo de los años todos tenemos personas importantes que nos...
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Una de las bases de una relación es la sinceridad, la confianza de una pareja depende de ello pero, ¿es bueno pensar las cosas antes de decirlas o es mejor soltarlo todo tal y como se te pasa por la cabeza? ¿Es un error decirle a alguien exactamente lo que piensas, lo que deseas, aunque el hacerlo puede llevarte a perder a esa persona?
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¿Que había hecho? No podía creer que le hubiera pedido matrimonio a Markku. En cuanto soltó la frase se dio cuenta del error que había cometido y quiso que la tierra se lo tragase. ¿Cómo iba Markku a pensar en casarse con todos los problemas que tenía?: Lo ocurrido con su hermano, la tóxica relación con su padre, una madre que no se preocupaba por él... Y no se le ocurre otra cosa que ponerle en la situación de tener que responder a esa pregunta, una pregunta que había soltado sin pensar. Nada más decir esas palabras, prácticamente salió corriendo de la habitación.
Markku, aún sorprendido, fue tras él a los pocos segundos clamando su nombre.
—¡Gael!
—No, no, no. Olvida lo que he dicho, ¿Vale? Lo siento —decía Gabriel mientras bajaba las escaleras rápidamente hasta la puerta de salida, con Markku siguiéndole.
—Pero, ¿cómo quieres que olvide que me has pedido que me case contigo?
—Pues, olvidándolo, cómo si nada hubiera pasado, sólo... ignora los últimos minutos.
—¿Crees que puedo hacerlo, así sin más?
—Si me quieres, lo harás —y nada más decirlo, salió del dúplex y subió al ascensor.
Markku se quedó bloqueado mirando la puerta metálica del elevador por dónde Gabriel había desaparecido. "Si me quieres, lo harás.", le había dicho. ¿Era una amenaza? ¿Eso quería decir que para demostrar que le quería tenía que olvidarlo todo? ¿Y si hablaba de ello? ¿Gael se enfadaría tanto como para romper?
—¿Qué ha pasado? —preguntó Mat a su hermano saliendo de su habitación y sentándose en el sofá.
Markku se sobresaltó ligeramente al escucharle.
—...Nada —acercándose, se sentó junto a su hermano.
Mat parecía sentirse bastante incómodo, suspirando, ajustó su postura en el sofá y cruzó las piernas.
—¿Tampoco me vas a decir por qué habéis discutido esta vez? ¿Igual que el agosto pasado?
—Mat, no te voy a contar lo que pasó entonces y ahora no hemos discutido.
—Entonces, ¿por qué ha salido corriendo?
Markku miró hacia la puerta pensando en que le podía decir a su hermano. Quizá podía pedirle consejo pero con la aversión de Mat hacia Gael sabía que no sería parcial.
—Es privado —contestó sin saber que más podía decir.
—Markku, he escuchado como decías: "¿Cómo quieres que olvide que me has pedido que me case contigo?"
