Cuando regresamos a casa, vimos a los reporteros fuera de mi hogar. Suspire resignada y me baje del vehículo. Vi por el espejo retrovisor y vi a Harry viéndome. Le sonreí y le guiñe un ojo. Cuando ya iba a bajarme, Shawn me sujeto de brazo y me detuvo. -Vas a estar bien ______? -Ufff - suspire y vi a la multitud fotografiándome. -Espero y si. Quite su mano de mi brazo y cerré la puerta del vehículo. Comencé a caminar y cada vez que me acercaba más a la puerta de mi hogar me acorralaban. Llegó un momento en el que ya no podía salirme de ahí y me quede impactada sin saber que hacer. A los segundos sentí que me agarraban de la cintura. Brinque y voltee a ver, era Harry. Me sonrió y me comenzó a empujar. Cuando llegamos al fin a la puerta de mi casa el me dijo que fuera abriendo la puerta. Obedecí y abrí la puerta. Harry volteo a ver a la multitud y alzó los brazos, todos lo miraron atónitos, que hacia una estrella como el con una chica recién salida del hospital? -Disculpen, la chica acaba de salir del hospital, acaba de salir del coma y me parece una falta de respeto que la estén asfixiando con sus preguntas. Mejor en vez de preguntarle a ella lo qué pasó, vayan casa por casa y pregunten lo que saben. Por lo mientras, dejen a la chica descansar. Gracias. -Harry bajo los brazos y entró a mi casa. Suspiro y se recargó en la puerta. -No creo que te quieran dejar salir ahora. -No, yo tampoco creo. -Va a soñar raro, pero por mi culpa ahora estás encerrado aquí. Quédate a dormir hoy y ya mañana te vas, te parece? - Harry sonrió y me dijo que si. -Si quieres en lo que yo me cambio de ropa y me ducho te puedes sentar en la sala para ver la tele o como gustes. -Seria un gusto _____. Corre, ve y arréglate. Subí a mi habitación y me entró el miedo al ver como estaba. Estaba completamente limpia y llena de energía positiva. Lo más escalofriante fue ver mi cama, estaba perfectamente tendida, justo como en mi sueño. Sentí como me iba a desmayar pero me recargue en la pared. Pase de largo la cama y me fui al baño. Cuando entre, un olor a coco y fresa me aturdió. La tina del baño estaba limpia y a los costados tenía canastitas con bombas de baño y gel de ducha de diferentes olores. Mi lavabo tenía jabones con figuritas y unas toallas dobladas. Mis cepillos acomodados y limpios y a un costado una bata de baño. Abrí el agua de la tina y el vapor del agua comenzó a salir. Cuando la tina estaba casi llena me comencé a desvestir y me metí. Puse una bomba de baño en el agua y se comenzó a disolver. El agua se comenzó a tornar rosa, había pétalos y brillos en el agua y un increíble olor a rosas. Me comencé a lavar el pelo y el cuerpo. Después de estar limpia me relaje unos minutos en el agua. Después de relajarme, me salí del agua, agarre la bata de baño y me la puse. Abrí el caño para que el agua se fuera y el bello color rosa junto con los pétalos y brillos se fueron de ahí. Agarre mi ropa sucia y la metí al cesto de ropa sucia. Salí y fui a mi closet. Abrí las puertas y toda mi ropa estaba doblada perfectamente, agarre un cambio de ropa interior y me la puse. Después miré entre mis blusas y pantalones y vestidos y decidí usar un vestido. Un cosquilleo paso por mi espalda al recordar la última vez que usé este vestido.
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El vestido era precioso, pero puesto en mi se veía horrible. Comencé a sollozar al recordar la vez que use este vestido. Mi madre estaba viva y ese día me hizo sentir que yo era la más hermosa del mundo entero. Fui por mi cepillo y comencé a desenredar el pelo y a secarlo. Cuando ya estaba peinado me lo hice en un moño desenfadado y me puse los zapatos negros de tacón que use ese mismo día. Vi el perfume en mi repisa, me acerque y lo oli, era el dulce olor de mi madre en una botella. Me puse un poco y me miré al espejo. Había regresado a la vez más triste de mi vida. Se que había dicho que mi madre me había dicho que me veía preciosa en este vestido, pero yo nunca supe que eso iba a ser lo último que me diría antes de que mi padre llegara y la matara a sangre fría. Sollocé y me miré sin decir nada. Después de unos minutos quite mis lágrimas y me acerque a mi escritorio. Abrí El Cajon y saqué un cigarrillo y lo encendí. Abrí la ventana de mi habitación y comencé a fumar, comencé a ver a los reporteros en casas ajenas preguntando a la gente lo que había pasado. Me puse otra vez enfrente del espejo y seguí fumando, ya no me veía preciosa como antes, ahora me veía acabada y sin futuro. El sonido de mi puerta llamo mi atención y voltee a ver, vi a Shawn, Niall, Cameron, Liam, Zayn, Louis y Harry entrar a mi habitación. Yo puse el cigarrillo en mis labios y los miré sin decir nada. Los chicos me miraron en el vestido negro que traía puesto. Shawn no me había visto aún ya que estaba viendo su celular. Cuando guardo su celular me volteo a ver y abrió los ojos como platos. -Wow ______, te ves... -No digas nada Shawn, no lo digas -Pero por qué no _____- Louis dijo, era raro oír a Louis hablar. Yo sé que el no me conoce al igual que Cameron, Liam y Zayn y que no me iban a hablar así de tranquilamente como Shawn, pero su comentario me sorprendió. -La ultima vez que escuché a alguien decirme que me veía preciosa fue hace 5 miserables años, y la última vez que lo oí fue de los labios de mi madre antes de morir. -El cigarrillo se había acabado, así que fui y lo puse en el cenicero que había en el escritorio. -Nada hubiera pasado si mi madre siguiera aquí, no hubiera comenzado a fumar, no hubiera comenzado a tomar y a cortarme, no hubiera comenzado a hacer que mi vida se jodiera aun más y no... -Y no los hubieras conocido -Shawn me interrumpió para decir eso. Fui a la repisa de donde saqué mi perfume y baje una botella de whiskey y un vaso. Serví un poco y me lo tome. Suspire y voltee a ver a Shawn y a los chicos -Exactamente, no los hubiera conocido y no estuvieran en mi habitación justo ahora. -Servi otro vaso de whiskey y me lo tome aun más rápido. -Los reporteros están en las casas de los vecinos preguntando lo qué pasó, así que voy a aprovechar para ir a hacer algo. -Deje el vaso en el escritorio y agarre mi bolsa. -Que vas a hacer ______? -Pregunto Liam- Vaya que si es raro oírlos preguntarme cosas. -Liam y los demás se miraron y yo sonreí. Abrí otro cajón del mismo escritorio y saqué unas llaves de carro de ahí. Salí de mi habitación y comencé a escuchar a los chicos hablar entre ellos. Bajamos a la primera planta y salimos de la casa. Cerré la puerta y comencé a caminar hacia el garaje. Abrí las puertas blancas del garaje y pude ver la camioneta de mi madre. Una camioneta negra encerada que brillaba. Comencé a caminar y abrí la puerta el piloto. Enseguida oi la voz de Shawn hablarme. -_____, a donde vas? -Mire a Shawn a los ojos y suspire -A visitar a mi padre
