"El comandante"

"En peligro"

Dereck pasando semanas de estar al servicio de la familia real, aún no se acostumbraba a varios de los modales que debería tener, paseando por los jardines en su pequeño rato que le daban para descansar salió para poder liberarse de la corbata que ataba su cuello todo el tiempo, la princesa no estaba lejos de el, más aún no se percataba de ello, en los jardines había laberintos hechos de frondosos arbustos y en estos, flores que sobresalían en los bordes, el chico de ojos claros tomo asiento en una de las bancas de dicho jardín, más un pequeño ruido llamó su atención, levantándose sigiloso fue al extraño ruido, para su sorpresa era la princesa sentada en medio del laberinto donde había una fuente y una banca de piedra, Dereck quien era alto podía verla perfecto desde ahí, la doncella le había informado que la princesa dormía, sólo pudo dudar porque mintió, ¿Oh acaso estaba imaginando esa escena? No dijo nada, se quedó ahí viendo a esa mujer, esa joven mujer que cada que la veía podía ver lo hermosa que era, su piel sus gestos suaves y tan femeninos, su pelo lacio y negro que caía en su espalda, y esa sonrisa coqueta y a la vez serena, sus labios pronunciaban algo en su lengua natal, mientras en su mano portaba un relicario al cual, parecía hablarle.

Dereck no quiso interrumpir la, ya que se notaba serena y feliz estando ahí, más de pronto un ruido volvió a llamar su atención, está vez venía detrás de la princesa, entre los matorrales frondosos, salió un hombre calvo de negro para atacar a la princesa, el chico de ojos claros se apresuró afortunadamente para llegar justo antes del tipo, quien tenía un taser (pistola eléctrica) Dereck tomó la mano del sujeto antes de que pudiese tocar a la joven atravesando se entre ellos, giró para que la princesa quedase fuera de peligro, cuando paso eso sus mirada se encontraron por un segundo, la joven y Dereck quedaron a centímetros de distancia entre sus rostros, mientras no permitía que el tipo la tocará, sólo fue una fracción de segundo para continuar a tomar el brazo del sujeto, torciendo este, para exclamar.

-Hola...-

Le sonrió como era costumbre en el, al tipo quien no se percató a que hora se había atravesado, después giró, de nuevo sin soltar al sujeto a la princesa para instruirle.

-¡Vaya a dentro! De prisa -

Dijo el chico de ojos claros a la joven, quien estaba asustada por lo acontecido, hizo caso de inmediato metiéndose a la mansión, Dereck volteó al sujeto para desarmarlo, poniéndolo contra la banca de piedra, viendo a los lados para saber si estaba sólo.

-¿Hay más? ¿Oh sólo tu?-

Tomándolo de ambas manos poniendo estás, detrás le interrogó al sujeto, el cual sólo miro recio sin decir palabra.

-¡Oh! no vas ha hablar ¿He?-

Exclamó  Dereck al tipo, tomando el arma le sonrió.

-Bien..-

Tocó al sujeto en el cuello con dicha arma dándole una descarga que lo dejo inconciente.

-Entonces duermente-

Prosiguió a informarle a Steven lo ocurrido, y dando inca pie ah averiguar ¿Como ese tipo había llegado hasta ahí? Y más ¿Que es lo que pensaba hacer, acaso llevarse a la joven princesa?

La seguridad aumento, aún más con la joven, que desde ahora Dereck no se le separaría para nada, ya que el Rey así lo había dicho, se le asignó una habitación a la par de la princesa, para estar cerca de noche, igual debía acompañarla en todo lo que hacía más los días pasaron tranquilos oh eso parecían.

Una de las tardes, la Sastre de la princesa fue llamada para hacerle su vestimenta, ya que tenían un banquete próximo, una reunión con un senador, estaban ahí la Sastre, la princesa, la doncella y Dereck, quien permanecía parado en un rincón sólo observado, la chica de ojos negros y rasgados salió detrás de un vestidor, para lucir un kimono elegante de color blanco que resaltaba su piel color perla, Dereck al verla sonrió levemente, viendo con calma todo en ella, mientras ella modelaba para su Sastre, el chico de ojos claros no pudo evitar contemplar esa escena, sólo pensando.