II. Campeones Del Mundo

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-Bien -Nos dice Sam entrando en el vestuario del equipo- Os voy a confirmar la alineación del equipo, no os apures, porqué después os explicare porqué saldremos en esas posiciones. Saldremos con un único delantero, que será Carina. Detrás de ella colocaremos a Edgar, Ezan, Chadd y Paolo, dispuestos en fina horizontal con este orden empezando por la izquierda. Detrás de esta fila se dispondrá Carlos, y detrás de este volveremos a colocar una fila horizontal de izquierda a derecha con este orden, Nathan, Agus, Ares y Jacob, como siempre de portero Otto.

-Pero si dejamos un solo jugador entre lineas horizontales dejamos mucho espacio para que ataquen -recuerda Jacob terminando de colocarse su camiseta, mientras me relamo los labios y pienso un poco en lo que ha dicho el entrenador.

-¿Eso crees? Carina -Me llama, para que se lo explique a los demás, y al fin lo entiendo.

-No, porque así seremos capaces de pasar de la defensa al ataque en un abrir y cerrar de ojos, yo y Carlos somos los que mas resistencia tenemos a la hora de correr rápido largas distancias sin descansar por eso nos ha colocado en filas individuales, porqué no necesitaremos hacer pausas y eso nos permite deducir muy bien donde debemos colocarnos en cada situación, y si vemos que no podemos defendernos, yo bajaré a la defensa y haré llegarle al balón a algún delantero. Todo saldrá bien.

Todos asienten ante mi razonamiento, passar tanto tiempo juntos nos ha echo confiar ciegamente los unos con los otros, por eso cuando alguno está seguro de que algo va a funcionar nos apoyamos sin importar el qué, esta es una de las muchas razones que me permiten decir que les quiero. Al instante Sam me pasa la banda de capitana, y me la coloco en el brazo derecho.

-¡Vamos a ganar! -Les chillo a todos levantando my mano, y a los instantes todos juntos gritan un Si que retumba por todo el vestidor.

Seguidamente Sam abre las puertas para dirigirnos al campo, a lo que noto como Paolo y Carlos vienen pos detrás y pasan sus brazos por mis hombros, a lo que yo hago lo mismo, y los tres sonreimos, mientras seguimos andando entre risas y tonterías junto a los demás, y llegamos al campo, donde mi vista se torna un poco borrosa por todas las luces que hay, y mis oidor pitan por los muchos gritos que se escuchan, me pongo nerviosa al pensar que todo esos ojos nos miran a nosotros, a mi.

-¿Corres con migo? -Edgar se posiciona delante de nosotros tres, mientras asiento con la cabeza, y me deshago del agarre de Carlos y Paolo, empezando a correr para calentar.

-Hoy hay mucha gente, demasiada -Corremos despacio, y el empieza la conversación, a la cal cosa asiento otra vez con la cabeza y le sigo el ritmo.

-Pero ya me lo esperaba, después de todo es la final del mundial juvenil. No puedo decir que me guste que tantos ojos nos estén observando y criticando por cada cosa que hacemos, pero me gusta el futbol, demasiado y creo que a todos nos pasa igual, por eso seguimos aquí aguantando y para conmemorar la memoria de David, le debemos mucho -Seguimos corriendo y nuestro cuerpo empieza a entrar en calor, buena señal.

-Conmemorar la memoria de David, sin duda se lo merece, por eso te hiciste el tatuaje De la Rosa ¿no? -Asiento con la cabeza, y como no le contesto damos por finalizada nuestra conversación, y me centro en intentar reconocer algún rostro en el público

Me encantaría que mi padre viniera a verme alguna vez, pero como es uno de los que se encargan de organizar los torneos oficiales de fútbol no tiene mucho tiempo libre, pero después se cree que seguiremos con una relación cercana por regalos caros. Pues no, entiendo bien que no pueda venir es su trabajo y lo respeto, pero lo que no me gusta nada es que intente comprarme con sus regalos. Nunca me han gustado las personas superficiales y para mi desgracia mi madre es una de ellas, y creo que mi padre se está convirtiendo en una. Mierda.

Distancia [Victor Blade]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora