IX. Tu, Yo, Nosotros

894 57 3
                                    

-Victor, bájame, puedo andar -Le replico, apoyando mi cabeza en su hombro, mientras sube las escaleras de madera y entra en la pequeña casa, dejándome en la entrada.

Besa castamente mis labios -Lo se- Vuelve a besar mis labios -Voy a por las cosas ¿Mh? Tu coloca la comida en la cocina -Asiento con la cabeza, antes de besarle otra vez, succionando un poco su belfo inferior, y cuando nos separamos este sale en dirección al coche donde le espera su abuelo, para terminar de traer nuestras cosas.

Sigo flipando en como un chico puede influir en mi estado de animo. Digo hace a penas dos horas mi cerebro era un maldito hermoso caos, y ahora en lo único que pienso es que voy a estar todo el fin de semana con Victor, en su casa de campo a unos treinta minutos de la ciudad. Y sobre todo me shockea que su abuelo nos haya dado permiso teniendo en cuenta lo que vio el ultimo día que me quedé con ellos.

Siento unas manos traviesas colarse por debajo mi camiseta ancha, y empezar a acariciar mi abdomen. Mientras unos labios dejan besos húmedos por mi cuello, mientras intento colocar un sobre de espagueti en el armario -Mia, toda mía.

Me giro apoyando mis manos en su pecho -¿Con que posesivo?

-Mucho- Asiente con la cabeza, abrazándome muy fuerte, intentando desaparecer cualquier distancia inexistente entre nosotros. Me toma de los glúteos levantándome del suelo, y haciendo que enrosque mis piernas en su cintura, mientras los dos sonreímos como locos.

Me lleva a la sala de estar y nos sienta en el sofá, yo encima de el -Victor, tenemos que terminar de colocar la comida, y nuestra ropa -El niega con la cabeza, volviendo a besarme con desespero, y le correspondo gustosamente el beso, incluso creo haber jadeado encima de sus labios.

-Que más da, dentro de dos dias será Lunes y vamos a volver -Besa otra vez mis labios, empiezo a pensar que este chico tiene una obsesión con besarme, hey pero no me quejo.

Me muerdo el labio, y suspiro negando con la cabeza -¿Que te dijo Dani hoy? -Inquiero, segura de que ese idiota debe haberle preguntado por mi mientras me buscaba, no entiendo como alguien puede ser tan atolondrado como para no darse cuenta de que somos pareja.

-No me dijo nada -Rie un poco, apoyando su cabeza en el sofá, así que acerco mi cara a la suya un poco más.

-Tu me escuchas y yo te escucho ¿Mh?

Asiente con la cabeza -Nada, solo típicas tonterías suyas. Que si le gustas, que si te pediría salir -Beso sus labios interrumpiéndolo.

-Sabes, creo que debería hacer algo para que pare.

-Sin duda eso estaría muy bien -Asiente con la cabeza, y antes de dejarle hacer cualquier cosa saco mi móvil del bolsillo del pantalón, abriendo Instagram, elijo una foto de el observándome con los ojos llenos de amor, tomando mi mano. Cuando está suficientemente encuadrada para mi parecer, paso a escribir su descripción: Hola, vengo a presumir y demostrar lo perfecto que es mi novio. Y sin pensármelo mucho le etiqueto y la subo.

Vuelvo a guardar el móvil, me abalanzo sobre el, golpeado sus labios contra los míos, al instante el corresponde el beso, tomándome más fuerte de las caderas, estampando contra su cuerpo, aprisionándome y robándome toda cordura cuando entra en mi boca con autoridad y muerde mi labio inferior, jalando, y separándose un poco de mi, pero quedamos unidos por un hilo de saliva.

Vuelvo a jalarle con fuerza hacia mi, aferrándome a su cabello mientras nos fundimos nuevamente en un húmedo beso. Pero succiona una ultima vez mis labios con demasiada fuerza cuando se sobresalta por el sonido de su móvil.

Se levanta un poco, aguantando sobre el con una mano, pero me bajo de su regazo por voluntad propia, apoyando mi cabeza en su hombro. Cuando enciende la pantalla empieza a ver muchas, muchas notificaciones de gente que ni yo conozco -¿Que has echo nena?

Distancia [Victor Blade]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora