Aposte al AMOR.

Cap. 13 -. Junto a ti

A pesar de todo lo que Darien me había hecho yo no podía odiarlo lo necesitaba a mi lado es mi mejor amigo, siempre lo he amado en secreto porque mi corazón no sabía lo que sentía hasta mucho después muchos, muchos años después. Es extraño pero no lo odio, me duele... todo lo que ha pasado me ha hecho darme cuenta de lo mucho que he dejado pasar el tiempo, aún puedo sentir la textura de sus labios sobre los míos y aunque parece que siempre estoy escapando no es así, no escapó de él, escapó de mí misma porque temo que entregué mi corazón a una persona qué tal vez no sabe lo que quiere en realidad y es un tormento, sólo quisiera borrar todo este sentimiento de duda que hay en mi mente y aunque parece qué le he dado una nueva oportunidad a Seiya no es así; es simplemente que respeto el valor que ha tenido al venir a mí.

Serena escribía en su diario mientras yo sentía mi piel arder por el dolor y la impotencia de no poder acercarme a ella, la amo tanto que duele, qué punza, que rompe... la amo tanto que no soy yo mismo, me siento desfallecer por no tenerla a mi lado fui un ciego y no pude darme cuenta de la increíble chica que por muchos años había llenado todo el espacio en mi corazón; creí enamorarme de alguien más, de un espejismo que a lo lejos se aparecía todas las mañanas, Mina no era más que una chica linda que se había cruzado en mi camino cuando en realidad siempre tuve a la mujer a quien realmente quería a un lado sonriendo, regalandome cada día una mirada de sus bellos ojos azules, siempre estuvo conmigo y ahora siento que la estoy perdiendo.

Me acerco a mi ventana intentó ver por la suya pero como todos los días su cortina sigue cerrada, me vuelvo con el corazón hecho trizas ¿cómo puedo hablar con ella? en qué momento debo acercarme, ya no lo sé; estoy perdiendo las esperanzas, estoy perdiendo el corazón en el intento... me equivoqué y lo reconozco y no quiero perderla, es la mejor amiga que he tenido y siempre quiero estar con ella, quiero recuperar todo el tiempo perdido todo el tiempo que ignoré los sentimientos en mi corazón ya no quiero extrañarla sólo quiero recuperarla tomarla en mis brazos y decirle al oído lo mucho que la amo, quiero ver el atardecer sentado a su lado, caminar por las calles tomado de su mano y no dejarla jamás no perderla jamás.

Lunes... de nuevo otra vez a la escuela me voy con la esperanza de que tal vez hoy pueda resolver las cosas, la vi salir de casa llevaba el mismo uniforme obviamente esta vez no era yo quien la llevaría, pero estaba feliz porque volvía a mí, tal vez esto lleve tiempo pero debo aprender a dar pequeños pasos que me conduzcan de nuevo a ella.

-Hola preciosa ¿como amaneciste hoy? -Seiya se acerca a Serena y ella lo mira con la cara llena de duda un poco confundida por la forma en la que le hablo pues no había dado su autorización para que él se expresará así con ella.

-. ¿Perdón? el hecho de que ayer habláramos y tal vez intentara perdonar lo que me hiciste no quiere decir que tengas el derecho de venir y hablarme así, créeme que todo el terreno que habías ganado lo tienes perdido, sigues siendo el mismo idiota de siempre eso no va a cambiar nunca y hoy sólo quiero estar en paz. -veo con júbilo la mirada dura de Seiya en su rostro mientras Serena se aleja y mientras ella camina él golpea con el pie la llanta de su coche, sonrío para mis adentros porque ahora sé que tampoco él ha ganado.

La veo pararse frente a la entrada y mirar con un poco de resistencia a todos los chicos que pasan a su lado, chicos que sonríen burlonamente por lo que ha pasado se oculta detrás de sus libros y baja la mirada triste pero se arma de valor como lo ha hecho siempre, levanta el rostro y entra con orgullo, aún así camina directo al aula sin mirar a nadie más sin hablar con nadie más; en breves momentos se que quiere desaparecer sé que quiere borrarse del mundo inclusive ser invisible pero es una chica valiente atraviesa los pasillos llenos de chicos que se burlan de ella y lo que más le duele es lo que a continuación sucede.

-. Vaya, valla, valla miren a quién tenemos aquí; pensé que ya no ibas a regresar después de que hubieras sido solamente la carne fresca que se puso en venta, dime quién ganó Seiya o Darién, me das pena, pobrecilla ¿creíste que cualquiera de ellos dos te tomaría en serio? por favor sólo eres una nerd, jamás un chico como Seiya se fijaría en ti él es popular somos de otra clase diferente y muy pronto Darién se unirá a esa clase diferente, pobrecilla eso es lo malo de ser una don nadie. -las palabras de Mina le calan en lo más bajo, le duele y le lastima la forma en la que la menosprecia y aunque no le importa siente odio y aunque no quiere hacerle caso sus frases se graban en su mente como tatuaje en la piel.

-. Serena levanta la mirada y sonríe, Mina no sabe el por qué lo hace pero Serena mirándola de los pies ala cabeza sabe perfectamente que ella vale más que cualquier chico popular que quiera humillarla. -sabes; me das tanta pena tienes que hacer sentir mal a todo aquel que es diferente a ti sólo porque no te quieres ni a ti misma, pero sabes... yo voy a graduarme con honores y seré la mejor de la clase iré a una universidad prestigiosa de la cual me graduare con honores igual, tendré un trabajo que me encantará y sé que a su tiempo llegará un hombre que me amará, pero tú querida vas a tener que vivir con el peso de tu ineptitud todo el tiempo, lo siento porque creo que terminarás en algún barsucho limpiando mesas recibiendo dólares de hombres que sólo te querrán por tu belleza y no se van a enamorar de ti, porque quién podría enamorarse de una mujer sin corazón, sin alma sin belleza interior, lo lamento pero tus palabras no me afectan, con permiso.

Mina no dijo nada Serena le había callado la boca, ella era fuerte, independiente, una chica que sabía defenderse y aunque suspiro y exhaló sintió un gran alivio en su corazón porque lo aceptará o no todo lo que ella había dicho era verdad, el amor no es una cara bonita, no son ropa bonita, el amor es más profundo, el amor es entregarse plenamente y eso Serena lo hacía completamente con las personas que amaba, Mina destrozo un papel que tenía en sus manos y la miró con odio, se dijo a sí misma que a cualquier lugar la destruiría que nadie podía hablarle así.

Quería entrar a la escuela y cuando me disponía a hacerlo Seiya se puso frente a mí de manera retadora sabía que quería terminar lo que habíamos empezado, estaba dispuesto, quería romperle la cara, decirle lo poco hombre que había sido se puso frente a mí apreté mis puños y estaba listo para romperle la cara pero Mina se puso frente a mí me abrazó y me besó sin esperarlo Seiya sonrío sarcásticamente.

-. Llegará el momento en el que tengamos que ajustar cuentas, pero te voy a decir algo no voy a perder a esa chica.

Lo vi alejarse mientras Mina seguía colgada de mí cuello la tomé de los brazos y la aleje bruscamente, ella me miró algo extrañada intentado comprender lo que había pasado o porque yo la trataba así parecía que cuanto más mal la tratara ella más se aferraba, estaba realmente confundida o muy mal... debía tener un grave daño psicológico para querer a una persona que la alejaba, en ese momento senti lástima por ella, en ese momento me di cuenta de lo insegura que siempre había sido, Serena tenía razón yo valía más que cualquiera de los chicos populares.

-. ¿Qué demonios te sucede? ¿no me vas a decir que realmente sientes algo por esa chica? ¿acaso no ves lo que tienes frente a ti? Serena no es nada comparada conmigo, tú puedes tenerme; a mi... a la chica más popular de la escuela tienes que dejar de ser un perrito faldero detrás de ella y alzar la vista ver lo que tienes frente a ti y aprovechar cada segundo que estés a mi lado. -no dije nada más Mina me tomo del rostro y coquetamente me plantó un beso en la comisura de los labios sonrió y se alejó caminando mientras movía las caderas al vaivén de sus cabellos.

Entré al aula de clases esperando encontrarme con Serena y efectivamente ahí estaba sentada en primera fila escribiendo algo en su libreta con la cabeza baja, no me miraba aún no se percataba que yo estaba frente a ella, de alguna forma creo que sintió mi presencia pero no fue capaz de mirarme a los ojos y aunque a mí también me dolía preferí dejarla sola, camine hacia la silla de atrás y quise sentarme pero me di cuenta de su incomodidad así que cambie con Steve, así pasaron las clases nos sentíamos un par de adolescentes y que lo éramos, pero no éramos capaces de admitir que debíamos estár juntos, que nos queríamos independientemente de todo... al final las clases terminaron, la seguí hasta su coche la tome del brazo y suplicante le pedí que me diera la oportunidad de explicarle las cosas, ella sólo sonrío de una forma que nunca había visto, se soltó amablemente de mi agarré, subió a su auto y se fue sin darme la oportunidad nuevamente de decirle todo lo que quería... pero una idea se me ocurrió y sé que funcionará.