Cap. 26 -. ¿Terminamos?

851 129 17
                                    

Los meses restantes pasaron pero entre más transcurría el tiempo las cosas cambiaban un poco más, realmente la forma en la que habíamos tomado todo este asunto de la separación no había sido la mejor, Serena se sentía trizte todo el tiempo y aunque yo trataba de aliviar la tensión no lo lograba, discutíamos por cosas sin sentido y las constantes críticas y malicia de Mina la hacían dudar de que nuestra relación tenía un futuro, ya no sabria si podría con todo esto, amo a Serena pero no soporto ver todo el daño que esto nos está haciendo.

El día llegó... Aunque no quería aceptarlo así era... Me iría de su lado y aunque admitía que todo esto no me agradaba tenía que aprender a sobrellevar la idea de que en poco tiempo la soledad se sentiría a flor de piel, Serena apenas y logro levantar su cuerpo de la cama, se sento en el borde y miro en dirección a mi ventana, ahí estaba acomodando lo que quedaba de mis valijas, una punzada aguda le hizo descomponer la cara en una mueca de dolor y agonía que sin duda alguna era el sentimiento más doloroso que jamás había experimentado, solto un suspiro hondo y pesadamente se puso de pie coloco sus pantuflas y se dio una ducha tibia que le reanimara, lavo sus dientes, peinó su largo y rubio cabello con una definitiva agonía en su mirar, se vistió con un overol blanco y una blusa color rosa, sus convers blancos y perfumo sus muñecas con aquel dulce aroma que tanto me gustaba.

Bajo las escaleras casi sin ganas, su padre se acercó sorpresivamente y le miró al rostro acariciando sus mejillas, su mirada era diferente, estaba llena de comprensión y tristeza y eso le tomo por sorpresa no pudo negarlo y tampoco seguir ocultando porqué se evidenciaba a simple vista la trizte realidad.

-¿Hija, podemos hablar? -pregunto en un murmullo.

-. Si, claro papá dime... -respondio tímida.

-. El señor Kenji camino a la sala y se sentó en el sofá desabotonando su saco. -sientate cariño... -pidio amable señalando el sofá a su lado.

-. ¿Pasa algo? -pregunto temerosa tomando asiento como Kenji le pidió.

-. Cariño, eh guardado silencio por mucho tiempo viendo como cada día que pasa tu semblante se oscurece más y más... -su voz sonaba entrecortada. -se... Qué amas a Darién pero la vida sigue aunque él se valla a estudiar lejos, si su amor es fuerte siempre podrá superar cualquier dificultad, tienes que dejar de sentir que el mundo y la vida no valen nada si no estás con él... Tienes muchas cosas que hacer cariño, tanto camino por recorrer y te veo realmente deprimida.

!Auch¡ Eso sí que dolió, parecía que su padre no estaba nada contento con el rumbo que todo esto estaba tomando y para ser sincero a mi tampoco me agradaba, !maldición¡ La puta vida parecía que ahora sí estaba poniendo en jaque todo por lo que antes luchamos, sin embargo estaba convencido de que podríamos solucionarlo.

-. Serena bajo la mirada. -papá se que probablemente no lo comprendas pero lo amo, el estar lejos de él es algo que no me agrada, la distancia constantemente termina por acabar con las relaciones y temo que eso pase entre nosotros...

-. No quiero que bases toda tu felicidad en él, si Darién es tu destino volverá a ti tarde o temprano pero la vida sigue, así que por favor valora un poco más tu existencia. -las palabras de Serena molestaron a su padre pues su corazón se partía al ver que la vida de su hija giraba en torno a mi solamente se puso de pie y salió de la habitación.

-. Serena te busca Darién cariño... -aviso Ikuko entrando a la sala observando el rostro descompuesto de Serena.

Ella se puso de pie en un salto y corrió hacia la puerta, al verme se acercó arrojándose a mis brazos intentando contener las lágrimas que amenazaban con salir de sus cuencas, la mire tiernamente acariciando su mejilla con mis dedos, intente sonreír para ella y hacerla sentir mejor, sabía que por dentro todo se estaba derrumbando a nuestro alrededor, había olvidado como ser positivo, como llevar nuestra relación hacia el futuro, hasta yo estaba perdiendo la fe por el miedo que me daba que todo cambiará entre nosotros por la distancia tan grande que habria.

-. ¿Quieres caminar conmigo? -pregunte tomando su mano.

-. Claro, ¿Pasa algo? -pregunto al notar mi rostro serio.

-. Disimule con una sonrisa. -No, solo... Quiero caminar un poco antes de ir al aeropuerto.

-. Si, claro vamos entonces.

Caminamos en silencio por un rato, la verdad es que no sabía que decir o que hacer para lograr que todo esto fuera más llevadero, llegamos a una banca en un pequeño parque cerca de casa, la invite a sentarse y yo junto a ella, encorve mi espalda y recargue mis codos sobre mis rodillas acariciando mis nudillos en silencio.

-. Darién, ¿ Pasa algo? -pregunto acariciando mi espalda.

-. Serena yo... No sé si estar juntos será lo mejor... -apenas y pude decir esas frases que me rompían el alma.

-. ¿Qué? -pregunto poniéndose de pie frente a mi. -¿Estás terminando conmigo? -exclamo con voz quebrada.

-. No, pero no me gusta ver cómo estás por todo esto, yo... Eh tratado de hacer más llevadero todo el asunto de estar separados pero sinceramente no puedo y me duele ver que siempre estás triste...

-. ¿Y como esperas que este? -pregunta con severidad -te irás muy lejos y no podré verte, acaso eso no te molesta? -pregunta al borde de la histeria.

-. Me pongo de pie bruscamente parándome frente a ella. -me duele Serena y me molesta más de lo que puedes imaginar pero es para mejorar, algún día quiero que seas mi esposa y quiero darte todo lo que mereces, quiero que tú igual hagas realidad tus sueños, no quiero que sólo dejes de sonreir que tu vida no tenga sentido solo por no estar aquí. -me acerco a ella y la tomo de las manos. -te amo con todo el corazón yo solo...

-. !Solo nada¡ Ya sé adónde va todo esto y si es lo que quieres está bien... !Es mejor terminar¡ -grita soltando bruscamente el agarre de mis manos.

-. ¿Qué? Serena yo no... -intente decir algo.

-. !No¡ Nada... Ya no quiero escuchar más, por lo que veo tu quieres que haga como si todo estuviera bien... -sus lágrimas resbalaban por sus mejillas -si es lo que deseas lo haré pero esta vez sin ti, !vete y espero que tu vida este llena de mucha felicidad sin mi¡ -sin darme cuenta y antes de reaccionar Serena salió corriendo dejándome tan confundido.

¿Acaso es esto lo mejor? ¿Acaso ah terminado el amor? No puede ser así, no puedo permitirlo, corro detrás de ella buscando solucionar todo esto, pero al llegar a la calle no la veo, corro a su casa y al llegar toco ancioso la puerta esperando que sea ella quien me habrá, pero lo hace Kenji con la mirada dura y molesta.

-. Lo siento... Necesito hablar con Serena -pido tratando de recuperar el aliento.

-. ¿Qué fue lo que pasó? Mi hija llegó llorando y se encerró en su habitación, no quiero que la hagas sufrir más.

-. No es lo que cree señor Kenji, solo hablábamos pero ella se fue sin que pudiera decir nada más...

-. Darién todo esto es muy duro para mi y para ella también, por favor lo que haya pasado la lastimo, creo... Qué por el bien de los dos es mejor separarse, ella sufre demaciado y sinceramente no es algo que a mi como su padre me agrade -sentencio de manera sería.

-. Lo sé señor Kenji pero...

-. Pero nada... Si ustedes son el uno para el otro tarde o temprano estarán juntos de nuevo, la distancia les hará daño si no saben como lidear con ella, tal vez sea lo correcto, lo siento hijo... -que podía decir, tal vez tenía razón.

Tal vez la distancia terminaría por acabar con nuestro amor, tal vez como él me ah dicho debemos dejar las cosas al tiempo, aunque se que me arrepentiré y que esto dolerá como nada en el mundo no puedo permitir que ella sienta todo este dolor por siempre...

¿Queridas monnies que les pareció el capítulo?

¿Quien creen que tenga la razón Serena o Darién?

No olviden dejar su ⭐ en el capítulo.

Besos

Aposte al AMOR.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora