『Si estuvieras en...』

instagram

Fuiste la primera miembro en tener un Instagram y siempre subías fotos casi profesionales de los demás tomadas por ti.

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Caminabas junto a Hoshi y Wonwoo aventurándose por las calles de L.A. Estaban ahí para grabar Don´t wanna cry pero justamente les habían dado el día libre para poder pasear por ahí.

Estabas más feliz que nunca pues justo antes de venir de Corea el CEO te había dado permiso para
algo asombroso: tener tu propio Instagram. Cada vez que veías un hermoso paisaje o una imagen
muy linda, sabías que podías fotografiarla y postearla en tu cuenta. Siendo la mayoría fotos de los chicos.

En ese momento te habías quedado embobada viendo un grafiti pintado en una pared hasta que corriendo la mirada hasta encontrarme con unas alas pintadas sobre la pared de concreto. Estas eran blancas con toques de dorado, de inmediato supiste que querías unas fotos de ahí.

—Oppas —los llamaste pues iban unos cuantos metros delante de ti, cuando giraron para verte los
llamaste con la mano—. Vengan, rápido.

Obviamente ignoraron la palabra “rápido” y caminaron hacia ti con la misma velocidad que antes, incluso un poco más lento para hacerte exasperar un poco. Tú en cambio aprovechaste su tardanza para sacar tu nuevo celular —el otro lo rompió Jun “jugando”— y entraste directo a la cámara. Ventaja de los IPhone, su cámara es bellísima.

— ¿Qué sucede? Oh, alas —preguntó Hoshi pero de inmediato se dio cuenta de la pintura frente a ti.

— ¿Nos tomarás fotos?

— ¿Qué comes que adivinas? Vamos, ponte ahí —señalaste enfocando con el celular, buscando el mejor ángulo para la foto.

—Soy tu oppa, háblame con respeto.

—Por favor oppa, póngase ahí frente a las alas para fotografiarlo, si me permite —dijiste con sarcasmo haciendo que Hoshi soltara una pequeña risa.

Diez minutos después ya estaban caminando de nuevo mientras tú subías las tres fotos que habían
tomado, una de cada uno pero antes de subirlas decidiste tomarte una selfie con la gorra negra con aros metálicos que Wonwoo te había comprado hace un rato.

Luego de subirlas seguiste tomando fotos para subir después y para enseñarlas a los chicos cuando volvieran al hotel. Desde selfies con los chicos, hasta fotos de ellos mismos sin que ellos lo notaran, incluso fotos de los sitios más comunes para la gente en Los Ángeles como los puestos de ropa pero a tu parecer se veían bastante geniales para fotografiarlos.