Yoongo... ¿y si mejor somos amigos? || Taegi|EN EDICION

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Pov. Min YoonGi

Fue una tortura. La peor tortura del mundo.

No podía ni respirar la noche que Tae se marchó de mi casa para ir a ver a Emily. Clavé la mirada en el teléfono, convencido de que estaba a punto de descubrir la versión de Taehyung que me quedaba por conocer, con el corazón partido.

Sonó el celular, pero era Emily.

—Por favor —Me suplicó—. Sé que cometí un error pero, si la verdad sale a la luz. Tae será el único perjudicado. Tú no quieres que sufra, ¿verdad?.

No, no quería, pero no era yo el que le había puesto el cuerno.

—Te prometo que nunca volveré a hacer nada parecido y, si lo hago, te doy permiso para que no vuelvas a hablarme nunca en la vida. De todos modos, no lo harías —Casi podía oír su pulso acelerado—. Me gusta mucho Taehyung y no quiero que me corte conmigo, por favor, YoonGi.

No me gusta guardar secretos. Los secretos acaban por lastimar a todos los implicados.

Ella siguió suplicando.

Eres mi mejor amigo. Y si no puedo confiar en mi mejor amigo, ¿En quién voy a confiar?

Apuesto a que Tae pensaba lo mismo.

—Te conozco de toda la vida y hemos pasado muchisímas cosaa juntos. ¿Me perdonas, porfavor, para que pueda perdonarme a mi misma?

Aquello me tocó la fibra sensible. No había pensado en lo mal que la estaba pasndo Emily, en lo dura que debíq de resultar la situación para ella también. Por más que se lo hubiera buscado.

—Por favor, YoonGi. Te lo suplico. Si estuviera allí contigo, me arrastraría por el suelo. Si es lo que quieres, me planto allí en dos minitos y te lo pido de rodillas.

Me sentía dividido. ¿Podía aceptar su palabra de que aquello nunca volvería a suceder? Sabía que la verdad destrozaría a Taehyung.

A lo mejor, pensé, es preferible fingir que no ha pasado nada.

—Está bien —Repuse en voz baja.

Se hizo un silencio al oteo lado.

—¿De verdad? Oh, Dios mío, YoonGi. ¡Graciasgraciasgracias! Los compensaré por esto, lo juro. A los dos.

—Por favor, trata bien a Tae. Se lo merece.

—¡Lo haré! ¡Te lo primeto! ¡Te quiero!

Debería haber experimentado alivio cuando la llamada finalizó, pero sólo sentía miedo. Por más que quisiera borrar aquella horrible noche de mi pensamiento, sabía que algunos recuerdos son más persistentes que otros.

Sobre todo, los recuerdos dolorosos.

Me había mentido a mí mismo muchas veces a lo largo de los años. Y mi mentira favorita era "Todo irá bien"

Si, todo irá bien.

Vas a crecer sin mamá, pero todo irá bien.

Te despertarás cada mañana y comprenderas que no tuviste una pesadilla, que sucedió realmente. Pero todo irás bien.

Tendrás que guardar un secreto que podría destruir la relación con tus dos mejores amigos, pero todo irá bien.

En el fondo, mentir se me daba fatal.

En cambio, me había vuelto un experto en el arte de disimular. Evitaba encontrarme con Emily o Taehyung al mismo tiempo. Evitaba hablat de su relación con cualquiera de los dos. Evitaba cualquier tema de conversación relacionado  con fiestas, kai, mi dormitorio, traumas, etc.

Lo conseguí durante tres meses enteros. Tres meses sin concederme permiso a mí mismo para ser totalmente sincero.

Tres meses vigilando cada una de mis palabras cada uno de mis movimientos. Tres meses de completa y absoluta tortura.

Cuando la nieve se fundió y los primeros rayos del sol empezaron a asomar entre las nubes, pensé que quizá havia el verano ya lo habría superado. A principios de abril, vi abrirse una flor mientras caminaba hacia la cafetería de la escuela. La consideré un buen presagio.

Hoseok me llamó por gestos desde nuestra mesa de siempre.

-Aduvina a quién me encontré ayer.

—¿A quién?.

Saqué mi lonchera con el almuerzo:zanahorias y hummus casero.

—A Minhyunk

Movió las cejas con expresión traviesa.

—¿Minhyunk?

Suspiró

—Minhyunk Monoban, de tu fiesta de Año Nuevo.

Oh. Casi había olvídado que aquella noche habían sucedido más cosas.

-Sí. Y parecía muy interesado en saber qué tal te va últimamente.

—¿Y?

— "¿Y?" Responde —Comentó Hoseok sin dirigirse a nadie en paetucular.

-Oh, los siento. ¿Preguntó por mí? ¿Debería empezae a redactar la lista de invitados a la boda?

—Ahora bromea.

—Sí, bromea.

Hoseok de echó hacia adelante y me robó un poco de hummus.

Pensaba que te agradaría saber que un chavo muy lindo se interesa por ti. Y a lo mejor le conté que el viernes asistiremos a la competencia de atletísmo.

—Vamod porque Tae quiefe echar un vistazo.

—Claro, y mientras Taehyung echa un vistazo al equipo del que le gustaría formar parte, tú puedes querer un sujeto perteneciente al último eslabón de la cadena alimentaria de la secundaria de un chico guapo como tú?.

—No quería decir eso —no sabía qué quería decir exactamente.

-yo sólo digo que pregruntó por ti y que le comenté que acudiremos a la carrera del viernes. No tienes mas importancia.

—Ya —Era yo el que le estaba dando importancia

—Si, no tiene más importancia —Hoseok me dedicó esa sonrisa suya que usaba para informarme de que dstaba a punto de solrarme uno de sus típicos comentarios, sarcasticos —Y ahora, ¿Te importaría explicarme por qué te pusiste como un jitomate?

Regresé ayer no actualice por que tenia sueño flojera.

Espero que descanse bonitos Los quiero.

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