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Pov. Taehyung.

—¿Y entonces qué les pasa? Estás muy raro últimamente. Los dos están raros.

Le quité la bolsa para que dejara de rebuscar y me prestara atención.

—Mira, no quiero meterme en sus cosas. Habla con Emily —Me soltó a bocajarro.

—Hablo con Emily constantemente —le recordé.

—¡YOONGI! —gritó Hoseok desde abajo—. ¡VEN A SALUDAR!

Él gimió.

—Mira, Tae, me encuentro en una posición muy incómoda y no quiero volver a mentirte otra vez. Así que habla con Emily. De verdad, habla con ella.

—¿Por qué diced que no quieres volver a mentirme? ¿me mentiste?

YoonGi nunca me había parecido el típico mentiroso.

—No exactamente —me tomó la mano y se echó hacia delante—. Lo siento mucho. Tú habla con Emily.

Se levantó y se dirigió hacia Minhyunk.

Yo no sabía qué me dolía más:el hecho de que mi mejor amigo me hubiera ocultado algo o verlo tonteando con un tipo.

Al llegar a casa de Emily, subí los peldaños de la entrada, abrumado por el peso de la revelación con que me aguardaba al otro lado de la puerta fuera cual fuese.

—¡Hola! —Ella me saludó con el beso de costumbre.

—¡Hola! —Intenté regresarle la sonrisa, pero advertí que algo iba mal. No me sentía cómodo. Puede que la sensación me rondara hacía un tiempo, pero era la primera vez que reparaba en ella.

Y, por lo visto, a Emily le pasó lo mismo.

—¿Va todo bien? —me preguntó ladeando la cabeza, como si buscara la respuesta en mi expresión.

—En realidad, no —Reconocí—. Creo que tenemos que hablar.

—Oh —Emily no parecía sorprendida. Me llevó al sofá de la sala—. ¿Qué pasa?

—Eres tú la que debería decírmelo.

Guardó silencio un momento.

—No sé de qué estás hablando.

Sin embargo, a juzgar por aquel silencio, sabía muy bien a qué me refería.

—Hoy vi a YoonGi.

Al oír el nombre de YoonGi la sonrisa de Emily se esfumó.

—¿Y qué tiene que ver YoonGi en esto? —adoptó un tono brusco de repente.

—Dice que tú y yo tenemos que hablar. No me dijo de qué se trata, pero me dio a entender que algo no va bien. Ojalá me lo hubiera contado. Lo único que sé es que, por lo visto, YoonGi intenta portarse como un buen amigo.

—Ya, vaya amigo— replicó Emily con frialdad.

Sentí el impulso de salir en defensa de YoonGi, que había sido el mejor amigo de Emily desde la infancia. Odiaba la idea de que algo se interpusiera en su amistad. Y de que ese algo fuera yo.

Intenté sonsacarla.

—¿Por qué tengo la sensación de que esto no guarda relación con nada que YoonGi haya hecho sino con algo que sabe?

Emily no supo qué responder. Entonces comprendí que había dado en el clavo.

—Dime la verdad —Le pedí en tono apagado.

En aquel instante supe que Emily y yo habíamos terminado. Era imposible que todo aquello se debiera a algún tipo de malententido y que, una vez aclarado, las cosas volvieran a su lugar. Si se trataba de algo tan importante como para que YoonGi me engañara, no podía ser nada bueno.

Emily me escudriñó unos instantes. El labio inferior le empezó a temblar. El instinto me dijo que la consolara. La cabeza me advirtió que estaba presenciando una actuación. No me moví.

—Lo siento mucho —Se tapó la cara con las manos—. Lo siento mucho.

Se acercó a mí. Yo permanecí inmóvil. No pensaba rodearla con los brazos para confortarla, no si ella era incapaz de hacer lo único que le había pedido:decir la verdad.

—¿Qué paso?

Emily se irguió y empezó a enjuagarse las lágrimas.

—Yo...

Durante unos instantes, pensé que no hablaría. Que se lo tendría que sacar a YoonGi.

Emily debió de advertir que no conseguiría conmoverme.

—Ya sabes que últimamente he estado viendo a Kai. Todo comenzó en Año Nuevo, pero entonces tú no estabas aquí, así que no le di importancia. Luego me di cuenta de que quería saber su lo que había entre Kai y yo era real, ¿saber? Pero no quería renunciar a nuestra relación y me sentía confusa y no sabía qué hacer y ahora seguro que me odias.

Se detuvo para respirar, lo cual me proporcionó el tiempo que necesitaba para procesar lo que estaba oyendo. Había pasado algo en Año Nuevo. Aunque Emily me había asegurado lo contrario. Y, si no recordaba mal, fue por aquel entonces cuando YoonGi empezó a ponerse raro cada vez que le mencionaba a Emily.

Así que YoonGi estaba al tanto de lo sucedido y me lo había ocultado.

Sabía que debería estar furioso con la que era mi novia desde hacía casi ocho meses. En cambio, sólo me senría decepcionado con YoonGi. Se había visto obligado a escoger entre Emily y yo. Y había escogido a la mentirosa de Emily.

Me levanté.

—Gracias por decirme la verdad al fin

Ni siquiera esperé respuesta. Crucé la puerta y al instante supe con quién debía hablar. Lo lógico habría sido enojarme con YoonGi por dejarme en la ignorancia, pero me preocupaba más la posibilidad de perderlo.

Lo que empezó siento una caminata se convirtió pronto en un trote ligero. Jamás había corrido peligro de perder a un amigo tras romper con una chica. Esta vez, sin embargo, las cosas eran distintas. YoonGi conocía a Emily de toda la vida. No iba a pedirle que se pusiera de mi lado, pero una parte de mí sabía que tendría que elegir de todos modos. A mí no me importaba que conservara la amistad con Emily, pero no creía que éste fuera tan generoso.

Aunqur YoonGi debería haberme informado de lo que pasaba, en el fondo no lo culpaba. Seguro que había actuado así por lealtad hacia Emily. Por que YoonGi es un buen amigo. Es de fiar. Sin embargo, precisamente por su gran sentido de lealtad, temía que se pusiera de parte de mi ex.











Eza emily:v

Perdón por las faltas de ortografía.

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Emilyfhantom

Yoongo... ¿y si mejor somos amigos? || Taegi|EN EDICIONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora