Never Again [Editando]

Capítulo 46

     La fiesta se está desenvolvimiento a su alrededor, y aún así todos en las mesa estaban sentados sin decir una palabra. Sólo mirándose entre ellos. Los chicos habían saludado a nuevo miembro que tendría una pequeña estadía en Seattle.

     Liliana por su lado solo le dio un pequeño abrazo incómodo. Ella sabia que quería a Guillermo, era su mejor amigo, y no quería herirlo. Y la situación en la que estaban, era una clara forma de herir a cualquier persona que amara a alguien.

     —¡Incómodo!— dijo Matt causando que Thalía le golpeara el brazo.

     —Cierra la boca, Matt— dijo ella entre dientes, y miró a Liliana.

     —¿Cuando llegaste?— pregunto Liliana con una sonrisa un poco forzada.

     —Hoy en la mañana— respondió Guillermo con la mirada fija en ella.

     —Entiendo— ella asintió —. ¿Por el equipo supongo?— cuestiono Lily con cuidado.

     —Bueno, en parte, pero vine más por ti— Oliver se tenso en su sitio causando que Liliana colocará la mano en su pierna para tranquilizarlo.

     —¿Christina, podemos hablar?— le preguntó a su amiga con una sonrisa angelical —Ahora mismo.

     —¡Oh, no! Yo se lo dije— miro a la gemelas —. Yo no tengo nada que ver con esta sorpresa— aseguró la aludida —. Pregúntale a las gemelas.

     —Creo que las tres tenemos que hablar, y es ya— les dijo colocándose de pie —. Ustedes dos, solo no se maten— les advirtió a Oliver y a Gui quienes se miraban como dos perros cuando están a punto de pelear.

     Las tres caminaron hasta el rincón menos usado de la casa de brujas. Justo donde la música no se escuchaba tan fuerte.

     —¿Quien creyó que era buena idea?— les cuestiono de inmediato.

     —Esa fui yo— susurro April levantando la mano —. Y lo siento, Lily, ¿esta bien? Es solo que siempre los idealice juntos, y de un momento a otro tú estabas con Oliver. No pensé que esto se complicaría.

     —Les voy a preguntar algo. ¿Yo tengo en la frente un papel que diga 'me gustan los problemas'?— ellas negaron —. Es que estoy casi segura que lo tengo.

     —Lo siento— se volvió a disculpar April con la cabeza gacha —. Es que él me pidió ayuda.

     —Solo no vuelvan a meterse jamás en esto— las apunto con su dedo índice y una mano en la cintura —. Porque ya tenía suficientes problemas con Oliver, y ustedes me crearon uno más con Guillermo.

     Liliana se dio media vuelta y camino de vuelta sobre sus tacones y camino a la mesa dejando a las tres amigas solas.

     —Te lo dije— susurro Abril blanqueado los ojos —. Pero parece que tú nunca entiendes las cosas.

     —Cierra la boca, Abril— dijo su hermana blanqueado los ojos.

     —No tuviste que meter tu nariz aquí, April— se lamenro Christina en un bufido —. Liliana siempre a visto a Guillermo como un amigo, y eso lo sabemos todos.