Never Again [Editando]

Capítulo 73

Este capítulo contiene escenas +18

Montana, Estados Unidos.

     —¡Bienvenidos a Treehouse Retreat!— exclamó un hombre cuando todos estuvieron fuera de los coches con sus valijas en mano.

     Habían abandonado California luego de una semana allá. Visitaron la ciudad, antes de decir tomar un avión a California. Estaban en una comunidad de casas del árbol. Eran increíbles, y estaban en medio de la naturaleza. Tenían todo tipo de actividades para realizar al aire libre, incluyendo sedentarismo, y salto en bongi.

     —Que lugar tan bonito— dijo Liliana mientras miraba la vista del balcón —. Es como sacado de una historia.

     —Si, es una vista muy bonita— en ese momento escucho el grito de Isabel.

     —¡Llegaste, llegaste!— salto sobre Dylan —¡Que bueno que llegaste! ¡Tr extrañe!

     —¡Oye, Isabel, fue solo una semana!— grito Oliver con diversión, ella se volteo y le sacó el dedo medio.

     —Mete tu nariz, en tus propios asuntos— respondió ella —. ¿Vamos a la cascada?

     —En media hora, deja que Dylan se instale con Elian.

     Montana los recibió con un clima cálido. Y es que el verano en la ciudad era más caluroso, que donde estaban alrededor de árboles. Liliana tomó un bolso con algunas cosas para ir al lago. Habían quedado con todos, mientras los auultos se quedaban los niñas.

     Oliver le extendió los brazos cuando la miro llegar, estaba entre dos árboles. Ella sonrió y negó levemente dejó la mochila en las escaleras, llegó hasta el y se recostó en el árbol. Lo miró con diversión, mientras que el la miraba con los ojos casi cerrados. Terminó de acercarse a ella y la abrazo. Una mano en la cintura y la otra en la cabeza.

     —¡Aww! Están tan enamorados— se burlo Owen tomándole una fotografía —¡Aww! Nos iremos en dos meses a Francia.

     —¡Déjalos!— reclamo Vanessa mirando a los lados —¿Donde están los demás?

     —Se suponen que ya vienen— respondió Oliver sacando su celular para mirar la hora —. Si no vienen en cinco minutos nos vamos son ellos.

     En ese momento un Elian agarrado de la mano de su novia se acercaba a ellos. Mientras que un Dylan corría con Isabel subida sobre su espalda. Owen sacó su cámara y les todo una fotografía en cuanto llegaron al escalón del garage donde están las bicicletas.

     —Otra, otra— dijo Isabel bajandose de la espalda de su novio.

      Luego de dos fotos Owen los obligó a sacar las bicicletas. Todas eran dobles, así que solo eran tres. Siguieron las señales que había en el camino. Y escucharon el agua caer, todos detuvieron las bicicletas cuando tuvieron delante de ellos la cascada, era perfecta. Había mesas para comer y sillos por el lado el lugar. Estaba totalmente vacío, no había visitantes. Dejaron las bicicletas en donde correspondían y tomaron se acercaron.

     —Es perfecto— susurro Vanessa mirando con atención —. Joder, se respira paz.

     —Ya quiero meterme— dijo Isabel caminando al muelle —. El agua está deliciosa— dijo en cuanto sus pies tocaron el agua —. Voy a entrar.