Muéstrate Realmente - TaeJin

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Unos cuantos días pasaron, en los que estuve ausente en la Universidad hasta recuperarme por completo, no falte al trabajo, tampoco debía explicar nada acerca de mi rostro ya que prefería evadir el tema, como siempre lo hacía, así que ellos ya no preguntaban, aunque tampoco sospechaban sobre si estaba metido en una clase de grupo con malos tratos. Mina una que otra vez se había acercado a mí a darme su apoyo si algo andaba mal y que podía confiar en ella, al igual que Lay, pero fue muy escaso lo que les conté sobre mi padrastro. Solo que recibí golpes si no llegaba a obedecer, pero eso se acabó y por fin pude liberarme con ellos.

En el descanso Lay y Mina me abrazaron fuerte, al descubrir lo que he pasado en mi casa y el resto de mi vida adolescente e igualmente un poco de mi infancia, pues no recordaba del todo, solo tenía escenas borrosas y malas que preferiría no volver a experimentar.

Lo que más me preocupaba estos días era lo que había pasado con ese tipo, si en una de esas nos estaría siguiendo u observando a donde me podría dirigir o tal vez encontrar a mi madre, con lo cual cada vez que salía le mencionaba que se cuide y ese atenta ante cualquier extraño comportamiento, pero eso no nos pasó en nada.

Hasta hace unos días en los que había regresado a la Universidad y SeokJin vino rápido hacia a mí, con preguntas del cómo estaba, hasta del que me había pasado, aun no estaba preparado para contarle todo, no tenía del todo confianza con él, pero eso de apoco va fluyendo cada que nos acompaña a mí y Yoongi a comer o pasar tiempo en el receso.

La policía había llegado, comentando que estaba buscándonos para informar acerca de ese hombre al que había golpeado con toda la ira que me había invadido ese día. Aquel hombre estaba en el hospital, yacía internado desde el día en que escape con mi madre, al parecer casi muere por las graves fracturas que tenía tanto en el pecho como en su cabeza. Tomo declaración de mi madre y mía, ahora sabíamos que ese maldito iría a la cárcel una vez pueda caminar solo y este estable.

Suspiraba de alivio al saber aquello, quizá al fin empezaba lo bueno para mí, ya no faltaría tanto a clases y concentrarme mejor en los estudios para terminar y lograr tener un mejor trabajo.

— Taehyung, tienes tiempo en la tarde? quería saber si te gustaría ir a tomar algo

Ese era Jin, estaba algo ¿Nervioso? Tal vez imaginaba cosas, aun mi helado en vaso que compramos los tres estaba a medio comer, y eso que es uno de mis postres favoritos.

— Si... porque no, después del trabajo, salgo a las siete

Le sonreí mientras él igual devolvía la sonrisa, el único con cara seria en la mesa era Yoongi, como si el helado en su boca fuera un cliché que lo mastica si parar.

— Al menos ya no tendré que verles las caras a los demás inútiles pasando por aquí, pasaré las vacaciones durmiendo hasta donde se me dé la gana

El más bajo de los tres comentó, pues esta era la última semana en la que cursábamos, luego llegarían las vacaciones los cuales tenía pensado ir con mi madre a otro lugar para vacacionar.

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— Es un idiota, ahora no podrá pagarnos lo que nos debe

— Tranquilo, antes de que lo lleven le haremos una visita, de alguna manera tenemos que cobrar todo ese dinero, se pasó del limité y ese cobarde nos ha estado evadiendo, pero ahora que sabemos su ubicación así que iremos tú, yo y otro de mis hombres ¿quedó claro?

Habló un hombre de los cinco reunidos en la habitación, con luz tenue, fumando y jugando a las cartas lejos de los demás que estaban en el casino, es donde mayormente ellos se reunían a hacer tratos ya que el jefe de aquellos hombres de negro y con algunos tatuajes, trabajaba allí.

Tras una última partida perdida por cuatro de los presentes tiraron las cartas con enojo en la mesa y terminaron su cigarro para lanzarlo al piso, era hora de salir a terminar algunos trabajos pendientes.

La música y varios bullicios de gente jugando, gritando cuando ganaban y tomando, entre otras que reían pasaron aquellos cinco hombres con traje, bien peinados, y ante los demás como un grupo temible dándole paso hasta la salida del lugar. Siendo fin de semana el lugar se llenaba más de la cuenta, teniendo todo tipo de personas, ya sea a los guardias echando a alguien, alguna pelea ocasionada por acuso de trampa en algún juego.

— Ya esté el auto listo

— Bien, averigua cuando es que va a salir, no podemos arriesgarnos a ir ahora, ese idiota no tiene a nadie que lo vea

El más bajo de todos allí presentes afuera hizo una reverencia y se retiró del lugar dejando al grupo para que suba al auto.

— El jefe te habló de algo?

— Se deshará de ese inútil bueno para nada, creo que más se dedica a traer problemas, aunque haya sido bueno en manejar armas no nos sirve ahora