Muéstrate Realmente - TaeJin

♦29♦

Ambos no reaccionaban en el momento que estaban en el taxi yendo al departamento de Jin. Y más en la posición que estaban, el mayor recostado en el hombro de Taehyung, y este pasaba su brazo alrededor de sus hombros anchos. Ninguno de los dos estaba incómodo. Se sentía la tranquilidad en ellos, aunque no dijeran ninguna palabra desde que salieron de la Universidad.

Taehyung fue quien pago, sorprendiendo un poco al mayor. Al bajar ambos se dirigieron en silencio a la puerta del ascensor. Hasta el piso en el que vivía el mayor. No entendían muy bien que harían allí, luego de lo sucedido. El menor veía la necesidad de acompañarlo luego de aquel quiebre que tuvo.

—Gracias por acompañarme... quieres algo de tomar?

Preguntó viendo al menor recorrer su hogar con la mirada hasta que afirmó con una muy leve sonrisa. Así dirigiéndose a la cocina por agua.

—Por fin estoy aquí... aunque no de la manera que imaginé

Susurró Tae antes de que SeokJin llegara con el vaso de agua para entregar. Agradeciendo con una pequeña reverencia.

—Te puedo pedir algo Tae?

Se le notaba nervioso, pero necesitaba preguntarle antes de que la curiosidad lo coma.

—Adelante

—Te puedes quedar conmigo un rato? Por favor...

No se esperaba que fuera a pedirle aquello. Por lo que estaba tardando en contestar a su pregunta, pero sabía que al momento de escucharlo decir eso era un rotundo sí. Él también lo necesitaba.

—Claro, me quedaré un rato más

Le sonrió de manera sincera y más notoria, acabando con los nervios de Jin al momento. Y como propuesta para pasar ese tiempo, se acomodaron a ver una película en la sala, aunque el espacio no fuera tan grande, un sillón y una tele, junto al comedor y de paso la cocina no estaba mal. Acogedor pero agradable sensación.

Poniendo atención a la película, o al menos eso parecía ser, ambos chicos poco a poco fueron acomodándose como lo habían hecho en el taxi. Esta vez Taehyung apoyo su cabeza encima de la de Jin, cerrando un momento los ojos. Tratando de recordar esas escenas que vivió con él antes de convertirse en eso, pero apenas eran recuerdos nublados que se iban aclarando poco a poco sin necesidad de esforzarse al punto de dolerle la cabeza.

Necesitaba que todo tomara su tiempo de recuperar sus recuerdos. Lo que si no olvidó fue a SeokJin, nunca actuó como si no lo conociera, simplemente estaba evitando lo que sería las consecuencias luego. Pero ahora veía que no podía evitarlo nuevamente, él era parte de Jin y el mayor también sería parte de su vida, tanto pasada como futura.

Al momento de ver el rostro de SeokJin se dio cuenta de que este se había quedado dormido, por lo tanto, creo que era el momento de irse y dejar descansar al mayor luego de un largo día. Sin moverlo tanto para no despertarlo, lo cargo en sus brazos y buscó la habitación así dejarlo en la cama mucho más cómodo.

Tapando con la sabana hasta su torso, lo observó unos segundos antes de salir de su cuarto. Sin darse cuenta chocó con la mesa al lado de la cama, cayendo un cuadro boca abajo. Volvió a dejarlo como estaba, intentó ver con detenimiento que imagen yacía, pero con la luz apagada era difícil de verlo. Hasta que Jin se movió buscando comodidad, lo que alertó y salió de la habitación lo más rápido y silencioso que pudo.

Dio un profundo suspiro en cuanto ya se encontraba en el ascensor directamente para salir del edificio, hoy no tenía trabajo, por lo que no tenía nada que hacer y volver a su casa no era una opción en ese momento, tampoco reunir a su grupo. Esta vez visitaría ese lugar secreto que había dejado de concurrir hace un tiempo, no llevaba la cuenta. Era hora de ver a su flor favorita.

La caminata servía para sus pensamientos, esta vez no los evadía, tampoco a esa voz de su cabeza que decía que ese chico no era él. No era Taehyung.

"Recuerda quién eres"

"Recuerda quien es el enemigo"

"Recuerda que es lo bueno y lo malo"

"Recuérdate, recuerda quien es Kim Taehyung"

Le decía la voz en su cabeza, a veces era una tortura escuchar esa voz, aunque quisiera hacerle caso, luego se negaba en escucharlo.

Al llegar al jardín su vista fue directo al cielo, pintados de un anaranjado y rosado que pronto desaparecerían. Entre los árboles daba un hermoso paisaje con aquellos colores, pero su color favorito estaba en ese jardín esa flor azul que resaltaba de las demás, seguía viva y fuerte. Se sentó cerca para admirarla. Posando sus brazos encima de sus rodillas una leve sonrisa se asomó en su rostro.

—Floreciendo en este jardín de soledad... hay una flor que se parece a ti

Susurró tocando los pétalos de aquella bella flor azul.

—Quería dártelo... después de quitarme esta mascara tonta

Ocultó su rostro entre sus brazos y piernas sintiendo un nudo en la garganta y aguantando las ganas de llorar.

—Pero yo sé, que nunca podría hacer eso... debo esconderme, porque soy espantoso...

Terminó por romperse y los sollozos eran lo único que se escuchaban en todo el lugar. Sin nadie alrededor, o al menos eso pensaba él. Porque si nadie más lo veía llorar, nadie lo vería vulnerable ante cualquier peligro, tenía miedo de lo que pudiera pasar.

Y aquellos ojos almendrados que lo observan se encargaría de regresar a este Taehyung a todos los demás, porque no solo las personas que querían a Taehyung lo necesitaban, también el mismo se necesitaba regresar de nuevo.