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Un pelirrojo se acercaba a Taehyung, era uno de sus amigos en los cuales salía a divertirse no solo molestando a los demás. No todos con los que se juntaba Taehyung era por decirlo, que solo robaban o molestaban por diversión, sino también estaban metidos en otra cosa, uno de ellos era el chico pelirrojo.

—Hoseok! Amigo llegaste, mierda ya hacía falta tu presencia para alegrar a esta junta de descerebrados

Comentó el pelinegro, siendo considerado hace una semana uno de los líderes del grupo, mejor escrito a quien seguían y hacían caso a sus órdenes, pues Tae tenía un aire de ser un buen líder, en cada cosa que se proponía hacer los demás se sumaban.

—Estaba esperando a alguien, hice una buena venta, en la noche podemos divertirnos con alcohol señores

Con una gran sonrisa en el rostro se sentó uniéndose a los demás, sabían las supuestas ventas de las que hablaba Hoseok, y cada uno de los presentes no abría la boca o terminaría mal porque ellos también estaban metidos en ello.

—Bien cállense todos, hoy tengo que trabajar así que cuando termine me esperar en el lugar de siempre, llevare unas cuantas botellas

Taehyung levantó una ceja sonriendo ladino, cada semana al menos tenía que presentarse ante su jefe una o dos veces, no por trabajo, aunque a veces podía ser, solo estar junto a sus compañeros incluido Hun, ya que ellos dos eran los principales empleados del jefe, y cada que tenía una reunión con alguna otra persona importante, eran los encargados de servir a los invitados, aunque tuvieran sirvientes para ellos, era una reunión privada de la cual los demás que estaban en aquella gran casa no debían saber.

Yoongi esta vez iba a seguir a su mejor amigo, la última vez que lo intento estuvo muy cerca de llegar, pero lo perdió de vista luego de que el auto al que perseguía pasara realmente rápido el semáforo, y él se quedó esperando a que cambiará, pero para ese tiempo ya no podría encontrarlo entre tantos autos y varias posibilidades de que hayan dado vuelta en alguna calle.

Jin estaba guardado las cosas en su mochila, de lejos podía ver a Taehyung todo de negro, con sus supuestos amigos, el pálido ni siquiera se había acercado a contarle lo que estaba pasando o al menos que podía hacer, estaba concentrado más en que hacía su mejor amigo. Y en cuanto tomó valor un día para hablarle a Taehyung este lo despreció con la mirada, no pudo decir palabra alguna porque el pelinegro ya se había marchado.

—Yo te puedo ayudar con Taehyung, parece que ese chico pálido te está dejando de lado

El mayor se sorprendió, mirando al chico pelirosa, más bajo que él. No se dio cuenta cuando se había acercado y en más que estaba pasando algo con Tae.

—Jimin... no sé cómo puedes ayudar en esto, creo que no debes meterte

Suspiro profundo llevando su mochila a su hombro, su vista fue nuevamente al pelinegro quien reía con su grupo, Yoongi no aparecía, no sabía dónde estaba y en cuanto le preguntaba cómo iba el asunto de Taehyung solo decía: Estoy trabajando en eso.

—Es intrigante, además, entre más ayuda mejor ¿no lo crees? Te he visto como lo miras, además de que desde que lo conozco de vista no es un mal chico, debió haber pasado algo extraño para que cambiará de esa manera, se veía en él ser alguien dispuesto a salir adelante con trabajo duro y no de esta manera

Jin lo pensó por un momento, quizá ayuda le vendría bien, él también quería averiguar qué fue lo que hizo cambiar a Tae y si Yoongi no lo estaba incluyendo era momento de buscar otra manera.

—Está bien, acepto, pero ¿cómo comenzamos?

Jimin sonrió emocionado, tomando la mano del mayor para llevárselo a conocer a su mejor amigo, quien también estaría involucrado en el plan, solo que SeokJin pensaba que Jimin sería quien solo lo ayudara. Lo que no se dieron cuenta es que la mirada de un pelinegro mostraba molestia, con el ceño fruncido, luego de mirar como ese chico rosadito tomaba la mano de Jin, decidió ignorar esa molestia que sentía para por fin ir a sus aburridas clases. De alguna manera debía afirmar que estaba asistiendo y solo se presentaba porque el profesor pasaba lista.

El castaño se extrañó cuando llegaron al patio de la Universidad, no había muchas personas excepto a uno de sus compañeros que se le hizo conocido, se dio cuenta entonces que se acercaban a él, mientras desde lejos veía que el chico parecía saber que iban a llegar allí.

—Jungkook! Aceptó por lo tanto ahora podemos empezar a investigar sobre el caso

El azabache sonrió con esa característica de parecer un lindo conejito por sus dientes, hizo una leve reverencia a SeokJin, no hablaban mucho pero estaba de acuerdo con Jimin en ayudar al mayor, no se lo veían con nadie, eso que era alguien que llamaba la atención, solo le sonreía a los demás en cuando los saludaban, eso había notado Jungkook en uno de las tantas situaciones que su mejor amigo, de nombre Jimin, quiso por simple curiosidad de averiguar quién podría ser realmente Kim SeokJin y por qué estaba solo si era realmente guapo, cosa que le molestó, pero lo dejo pasar.

—Bien, creo que ya sabes mi nombre Jin, nos ahorramos presentaciones y empecemos atar los cabos sueltos

Los tres se sentaron, Jimin sabía que Jungkook podría descifrar e investigar muchas cosas, la forma en que pensaba para buscar la solución o causa de un problema lo sorprendía, era muy inteligente. Por lo cual el menor del nuevo trio de amigos empezó a indagar al mayor anotando en mente y también en una libreta las respuestas, y en cuanto a ello empezaba a surgir algunas suposiciones, pero para ello también necesitaba averiguar algunas cosas sobre Taehyung antes y después del cambió a chico rebelde.

—Taehyung sigue escondiendo su verdadero yo, así que debemos encontrar quien pueda sacarlo de donde quiera que lo enterró

Jungkook miró a uno de los tantos amigos que se hacían llamar, en ese grupito de tontos, pasaba con un pelirrojo en cual ahora el cercano al pelinegro líder de todos esos idiotas, tal vez suelten la lengua alguno sobre un dato interesante de Taehyung. 

Muéstrate Realmente - TaeJinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora