Recuerdos de Amor 《Kim Namjoon #2》Completa✔

Capitulo 30

Pasado:

—Bien hecho—exclama—Ahora lo tenemos, Namjoon. ¡Lo tenemos!

<<No sabes lo mucho que he deseado esto.

Escucharlo desde el celular y diciendo aquello, me da un toque de satisfacción. Su alegría trata de contagiarme pero solo logra que sonría levemente.  La realidad es otra y una que debe cambiar.

— ¿Crees que pue...

—No me lo preguntes—inquiere y sonrío— Anda, ve por tu chica. Y espero, espero de todo corazón, se solucione todo.

<<Aun hay tiempo, Namjoon. No te desanimes.

Sus ánimos me levantan. Respiro hondo y trato de ser positivo.

—Yo también espero eso—comento con sinceridad—Pero si no se da, quizás...

—No seas idiota, Namjoon—inquiere riéndose y rio también— ¿tan rápido te desanimas? Solo ten fe... no es como si se hubiera ido ¿no? Aún hay tiempo.

Si, lo hay.

—Menos mal no se ha ido. Creo que si lo hiciera, todo se perdería —inquiero con tristeza ante esa posibilidad pero la descarto rápido—bueno, te dejo. Tengo que recuperar una estrella.

Y no cualquier estrella, Mi estrella

— ¿una qué?

—Olvídalo. Ella y yo lo sabemos.

Rie

—Está bien, está bien. Te deseo suerte.

Con un suspiro cuelgo y no mentiré que hay ilusiones en mí.

Ya estoy yendo por ti... ¿seguirás siendo mi estrella?

.....

Sun-hee me llamó.

Mejor dicho, me citó prácticamente en su antiguo departamento.

¿pero porque en la madrugada?

No lo se pero tuve que ir. Tuve que hacerlo para no dejar sospechas. Tenias que seguir.

— ¿y por que la reunión?—inquiero observando este lugar que me trae recuerdos.—¿A que se debe esto?

—No luces tan mal como dijo tu padre—dice caminando de lado a lado— ¿y esa cambio de actitud? ¿qué sucede?

Me encojo de hombros y bufo—hay que sonreírle a la vida ¿no?—inquiero cansado de todo esto.—No voy a estar siempre lamentandome por todo lo que me hicieron ¿no?

Ella me examina cuidadosamente hasta que niega.

— ¿Crees que soy estúpida?

— ¿tengo que responder esa pregunta?--cuestiono burlon.

Ella se queda mirándome fijamente.  Sus ojo no parpadean mientras  veo su mandíbula apretarse. Antes de que hable o diga algo, ella me interrumpe.

—Sabía que había algo más... lo sabía. ¡MALDITA SEA! —inquiere molesta y acercándose a la puerta—Él los tiene.

Todo dentro de mí se alerta cuando veo a quien se refiere con eso.

¿Qué es esto? ¿porque El está aquí de repente?