¿Enamorado de un chico? Ben Drowned y Tú [Completa]

Capítulo 62

Dereck/____

Dos semanas después

Eyeless.- Maldita sea... — se cruzó de brazos y miró al techo. Yo seguía caminando de un lado a otro — ¡Ya! — se levantó, me agarró de los brazos y medio una cachetada — ¡Deja de dar tanta maldita vuelta, me tienes harto!

Yo.- ¡Es que no puedo seguir así! ¡Me odio! Odio como me veo.

Eyeless.- ¿Y qué importa? No puedes hacer nada. Además, no te ves mal, te ves linda.

Yo.- ¿Linda? ¿Este maldito color de cabello te parece lindo? — me agarré el cabello. Lo tenía más largo que nunca, me cubría toda la espalda. La mitad del cabello era roja y en las puntas se veía rosa.

Eyeless.- Sí.

Yo.- No aguanto más... Ya tuve suficiente con las malditas faldas, las veces que me obligó a usar tacones, maquillaje, dejarme así de largo el cabello. ¡Al rato va a querer que me opere para aumentarme el busto o algo!

Eyeless.- Lo sé, lo sé perfectamente, pero no puedes hacer nada. Estoy seguro que no lo querrás hacer enfadar — bufé. 

   Me separé de Eyeless y salí de la cabaña. Estaba harta de todo lo que estaba pasando. No sé ni cómo es que cambie tanto, como es que pasé de ser tan egoísta a preocuparme tanto por mis amigos. Es ridículo, jamás había sido así.

   Llegué a la CreepyHouse. No lo pensé dos veces y entré. No sé que clase de suerte tengo que siempre que llego deben estar casi todos abajo. Me miraron al abrir la puerta, me miraban raro, como si nadie me conociera, como si tuviera bichos en la cabeza o algo.

   No los culpo, en realidad yo habría hecho lo mismo en su lugar. Juro que si hace cuatro años me habrían dicho como sería en un futuro, me burlaría de ellos en la cara y decirles que estaban locos. 

   Yo no puedo reconocerme ni a mi misma. Ese cabello largo pintado, planchado. El maquillaje que usaba, los tacones, las medias, la falda, las playeras más ajustadas que haya usado en mi vida, la manera en la que me paraba, me sentaba, caminaba, como me expresaba. Nada de eso era yo, realmente era una total desconocida en ese cuerpo.

Ben.- ¿En serio te pintaste el cabello? — se acercó a mí y lo tocó — ¿Por qué?

Yo.- Es lindo, ¿no? — No, no lo es. Es horrible.

Ben.- Sí, pero... — se alejó un poco — No sé... Supongo que en cualquier otra persona me gustaría, pero en ti... Es raro, bastante.

Yo.- ¿Por qué? Pensé que ya te habías acostumbrado a verme así.

Jeff.- En primera, él casi no te ve. En segunda, lo dice porque en ti, eso se ve horrible. Cada vez te conviertes más en una barbie o algo así — se acercó —. Mira toda la cantidad de maquillaje que usas — me paso un dedo por la cara —. Los tacones tan altos que usas, las faldas más cortas que nada...

Yo.- Ya deberían haberse acostumbrado.

Toby.- Pues a mi me parece que te ves muy hermosa. Sí, es raro, pero te ves bien — todos lo miramos — ¿Qué?

Yo.- Gracias, Toby — le sonreí — Jeff, necesito hablar contigo —lo agarré del brazo y lo saqué de la casa.

Jeff.- ¿Qué te pasa? ¿Por que hiciste esto? — me agarró el cabello.

Yo.- Zalgo me obligó.

Jeff.- ¿De nuevo? ¿Hasta cuando te vas a dejar? Según tú, Zalgo lo que quería es que ya no siguieras órdenes de cualquiera, pero lo obedeces a él en todo lo que te pide. Te queda una semana para  ganar la confianza de los demás, ¿no? — asentí— Deberías de dejar de hacer tantas estupideces como esta.