¿Enamorado de un chico? Ben Drowned y Tú [Completa]

Capítulo 68

Dereck

Comencé a caminar junto con Lanna. En verdad no tenía idea de como iniciar, si presentarme o preguntar sobre ella.

Yo.- Bueno... ¿Y qué quieres saber?

Lanna.- Primero quiero saber sobre ti.

Yo.- Me llamo ____, aunque casi toda mi vida me han llamado Dereck. Soy hija de Dave, por lo que soy mitad humano mitad demonio, a los dieciocho años empecé a estar involucrada en todo este mundo... ¿Algo más que quieras saber?

Lanna.- ¿Por qué quisieras tener toda la responsabilidad de tener tus aliados y todo eso? Soy bastante observadora, ¿sabes? A Slenderman no le va muy bien controlando a los que tiene o tenía de su lado.

Yo.- Estoy segura que si estuviera en tu lugar haría la misma pregunta... Pero bueno... Siempre fui alguien muy retraída, sólo tuve una amiga casi toda mi vida hasta que conocí a Ben. Hasta entonces no me importaba nadie. Al conocerlos comencé a preocuparme por algunos de ellos, fueron las primeras personas que de verdad me importaban, a los pocos que de verdad podía llamar amigos. Estoy tomando toda está tonta responsabilidad por ellos.

Lanna.- Y si tanto los quieres... ¿por qué los traicionaste?

Yo.- Por lo mismo, pensaba que podría serles más útil, que podría ayudarlos... ¿Eso es todo?

Lanna.- Sobre ti, supongo que sí. Ahora, ¿por qué crees que debería estar de tu lado?

Yo.- Porque te conviene más — dije obvia — Yo no te manipularé como Slenderman, no te pondré ninguna marca, no te voy a tratar como porquería.

Lanna.- ¿Por qué deberías confiar en ti? No te conozco, las pocas veces que te llegue a ver nunca me hablaste, sólo cuando llegue. Conozco más a Slenderman.

Yo.- No, no te confundas. En verdad nadie conoce a Slenderman, sólo hace creer que lo conocen.  Y te voy a ser muy sincera, no me caes bien... Eres muy extrovertida para mi gusto, quieres saberlo todo, intentas hacerte la graciosa con todo. Sabes perfectamente que no soy hija del diablo, pero lo sigues diciendo porque te diste cuenta que la primera vez le hizo gracia a los demás. También soy observadora.

Lanna.- Si no te caigo bien, ¿por qué debería estar contigo? 

Yo.- Porque son cosas distintas. Podríamos decir que todo esto es trabajo, los sentimientos quedan totalmente fuera de esto. 

Lanna.- Quizás si me conocieras mejor te caería bien... — habló como si le diera igual lo que le acababa de decir.

Yo.- Puedo hacerlo, tenemos mucho tiempo aún. ¿Qué hacías antes de que te involucraran en todo esto?

Lanna.- Pues tenía una vida común y corriente. Iba a la escuela, en vacaciones tenía trabajos, salía con mis amigos.

Yo.- ¿Cómo era tu vida en la escuela?

Lanna.- Genial. Estaba en el grupo de populares, ¿sabes? Siempre he tenido la suerte de estar con ellas, son mis mejores amigas.

Yo.- Antes de que sigas... Sé cuando mientes. Sé que me estás mintiendo.

Lanna.- No te estoy mintiendo.

Yo.- Es estúpido que lo niegues. Puedo saber si lo que dices es cierto o no manipulandote. No puedes mentirme — me miró a los ojos. Noté que tomó aire lentamente y bajó la cabeza.

Lanna.- Jamás pertenecí a ningún grupo. En los que estaba siempre terminaba peleando con las personas y dejaban de hablarme. Prácticamente toda mi vida la he pasado en mi habitación encerrada jugando videojuegos, viendo videos, haciendo nada. Hace varios meses nos mudamos y estaba decidida a que las cosas serían diferentes. Fingí ser más atrevida, alegre... La verdad es que no lo soy, siempre he sido alguien fría con los demás, reservada... Al menos mientras conozco a las personas.