Uno.

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— De verdad te extraño hermanito. Deberías volver y estar con Erick. Conmigo. —

Chris había entrado hace unos minutos, quería contarle su día a Joel así que Erick salió de la habitación para dejarlos solos.

— ¿Sabes? No te había contado porque me da pena, pero hoy te diré.

Miró el rostro sin expresión alguna de Joel y suspiró con pesadumbre y a la vez con emoción por contarle lo que estaba pasando.

Sabía que si era verdad eso de que Joel lo escuchaba, seguro estaría feliz por él, pero también riendo y sonrojado internamente.

— Bueno, pues resulta que conocí a alguien. ¿Y sabes? Después de todo tenías razón. Me enamoré de un chico. —

Sonrió bobamente sin darse cuenta de que lo hacía. Pero en verdad aquél chico era hermoso y el simple hecho de pensar en él lo hacía volar.

— Su nombre es Richard. Creo que es algo, muy pero muy penoso, lo conocí de forma muy rara. ¿Quieres que te cuente? —

Espero una respuesta que sabía, no recibiría, así que continuó hablando.

— Sé que debí contarte esto antes pero, no estaba listo. Ahora te contaré. —

Rió un poco al acordarse de lo que sucedió con aquél chico antes de siquiera conocerse un poco.

— Hace ya tres meses que nos conocemos, nos gustamos ambos, nos querémos y no dudo que serémos una pareja hermosa. —

Pensó si continuar, porque de verdad le daba pena. A su hermano le gustaban los detalles de todo, pero contarle detalles de aquello sería extremadamente vergonzoso.

— Ya sabes, a veces a Erick se le da por ponerse celoso de que no me alejo de ti y "no tiene tiempo de estar contigo" —

Ese Erick era un exagerado.

— Pues el chiste es que decidí dejarlos pasar un rato juntos aunque sabía que Erick se pasaría la noche aquí. Así que me fuí a un bar cerca, creí que encontraría a una chica linda, pero al parecer a quien encontraron lindo fue a mí. —

Volvió a reír.

— Tomé unos tragos solo, ya que no había nadie que me agradara, luego me fuí a bailar. Un rato después sentí que alguien me tomaba la cintura, y al voltear lo ví a él. —

Su rostro reflejaba un enamoramiento gigantesco.

— Me quedé pasmado cuando ví sus bellos ojos, eso fue amor a primera vista. ¿Sabes? Siempre que veía películas donde todos bailaban música movida y una pareja bailaba como si fueran baladas o algo así, pensaba que eran estupideces porque te entra el ritmo y aparte nadie puede enamorarte más que la música. Pero soy estúpido, ahora sé que se puede. —

Ahora mismo recordó que cuando Joel conoció a Erick también hablaba sobre él de esa forma, con cara de estúpido.

Sus recuerdos molestando a Joel porque se había enamorado de un chico y a su pequeño hermano diciéndole "por burlarte tú vas a hacer peores cosas que yo cuando te enamores de un chico" y él negándolo y nuevamente riéndose de su hermano, todo eso lo hacía sonreír tontamente, pensando en que su hermano tenía razón. Nadie escoge de quien te debes enamorar, ni siquiera tú mismo. Es el corazón quien lo hace.

— Entonces bailamos lentamente toda la noche, mientras todos a nuestro alrededor perreaban. Lo mejor de eso, fue que aunque estábamos completamente ebrios lo recordamos todo, pero también fue malo. Sí, muy malo, después de bailar pedimos un taxi y fuimos a su departamento, él me tomó.
Qué pena decirte esto, pero tuvimos sexo antes de conocernos bien.
Si quieres detalles de cómo me tomó, y de quién es la pasiva tienes que despertar. Cuando despiertes responderé todas tus dudas. —

Mi florecilla || Joerick, Erickdiel.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora