El pelirrojo de gafas estaba ansioso por la llegada del día lunes. Comenzaría el semestre académico tanto para él como para Umiko. Si bien no tenía el alta del todo, tenía permitido asistir a clases siempre y cuando no realizase esfuerzos físicos mayores y mantuviera los cuidados necesarios para que su herida sane por completo.Desde aquel día que de una extraña manera le confesó a Umiko lo que sentía por ella las cosas eran extrañas. Ella seguía atendiendo con esmero para retribuir todas las atenciones que Eren tenía con ella, pero las platicas ahora eran incómodas y muy breves. Ella evitaba el contacto visual de cualquier forma y Eren se culpaba de ello.
Aunque no pareciera, la joven con el mar en los ojos era vergonzosa y no sabía siquiera controlar sus propios sentimientos. Ella se crió a la par con sus hermanos, en un ambiente algo machista, no podía mostrar debilidad de ninguna forma y reconocer que los sentimientos de Eren eran correspondidos para ella era mostrar debilidad. En el fondo, quería abrazarlo y admitir que era inmensamente feliz de saber que le gustaba a él, y por el otro, sentía terror de verse frágil ante los demás.
El pelirrojo optó por no presionarla, y seguir con su amistad como siempre. La joven de ojos azules, hizo igual.
Eren ordenaba su bolso para mañana, un par de cuadernos universitarios, su laptop, un estuche con bolígrafos. Se preguntaba si la chica de la habitación de junto estaría haciendo lo mismo, más no era capaz de ir a preguntar.
"Umiko-chan necesita su espacio..."
En la otra habitación, Umiko platicaba vía Skype con Unice, su mejor amiga.
- Bueno, ¿Tus hermanos te pegaban en la cabeza de chiquita? - preguntó molesta Unice al oír toda la historia de boca de Umiko
- Oye, no seas así... Yo no vine a la ciudad a buscar novio. Vine a estudiar y a ser la mejor policía de la familia Zenshiro ¿Sabes cuántas mujeres siguieron el linaje militar? ¡Dos! Y eso es contándome a mí... - se defendió la ojiazul.
- Umiko... Aceptar los sentimientos de un buen chico no significa que debas renunciar a tus sueños ¿A qué le tienes miedo? -
- No entiendes Unice, mira, sólo respeta mi decisión ¿Si? Yo respeto tu relación con Ash -
- Bien, pero después no quiero estar limpiando tus lágrimas de estúpida cuando Eren encuentre a otra chica en la universidad... -
- ¿Qué? -
- ¡Obvio! Es agradable, es lindo. Es cuestión de tiempo que conozca más chicas en la universidad y aparezca con una chica que sí sepa apreciarlo y no tenga excusas pendejas para rechazarlo. ¡Ponte v*rga! ¡Ni te atrevas a reclamar después! ¡A la primera que te vea llorando por pendeja te voy a golpear! - reprochaba Unice a través del monitor sacudiendo los brazos molesta.
Ash: - ¿A quién hay que matar, conejita? - pudo oír Umiko la voz de Ash a distancia.
- ¡A una tonta cobarde! - respondió molesta Unice poco más gritando.
- ¿Ash estuvo ahí todo el tiempo? ¡Demonios Unice! ¡Era secreto! - reclamó la ojiazul.
- Descuida, estaba en la sala viendo caricaturas con Ashley. Recién entró a la cocina y sólo me escuchó regañandote - respondió Unice a la vez que Ash se asomaba por el hombro de esta para comprobar sus sospechas de que estaba discutiendo con su prima.
- ¿Ahora que hizo el huracán Umiko? - preguntó burlón Ash.
- ¡Tú no te metas! - exigió molesta la ojiazul.
- La niña dice que no vino a buscar novio, vino a estudiar. Y yo le estoy diciendo que después no quiero que ande llorando por perder tan buen chico como Eren - comentó molesta Unice. La chica sabía que su mejor amiga estaba enamorada de Eren, y encontraba tan estúpido que por su orgullo rechace su amor que no tuvo problemas en "acusarla" con Ash.
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Sentido de pertenencia II: Proteger
FanficContinuación de la primera obra "Sentido de Pertenencia". Un universo donde los personajes son humanos y viven la historia después de la pesadilla de Neo (U1146). Para entender cómo comienza la trama, sí o sí deben leer la primera parte de la saga...