Llevábamos unas dos horas caminando, si no es que más. Chrystal no llevaba su vehículo, dijo que ya no confiaba en nada que hubiera sido tocado por Tyra. Aun así, nos las arreglamos para llegar a la ciudad, o al menos a la primera parte en donde las calles eran silenciosas y los edificios no tenían tanta luz y no eran tan altos como los demás.
- El barrio pobre. –Explicó Chrystal en voz baja, como si temiera que alguien nos descubriera- Porque, como en todos los planetas, siempre tiene que haber uno. Aquí, a diferencia de Seigue, se paga con energía.
- ¿Energía? –Fruncí el ceño-
- Se utilizan también las monedas, claro, pero si llegas a un punto en el que la sociedad no te consideraba importante, te mandan a este lado de la ciudad, donde la energía es más débil. El Núcleo, como está exactamente en el centro de todo, es donde hay más energía. Más poder. –Hizo una pausa- La mayoría de la gente que vive aquí es egoísta, no comparte absolutamente nada, aunque también hay de las personas humildes, pero hay algo que tienen todos en común. Están en contra de las autoridades. Del gobierno.
Megan y yo no dijimos nada. Una vez más yo llevaba a Blazh entre brazos, solo que esta vez no se había quedado dormido, sino que jugaba con mi cabello. Temía que esto se volviera una costumbre ¿Qué haríamos con ese niño?
Como si Chrystal leyera mi mente, me miró y posteriormente a Blazh.
- ¿Lo llevarán a Seigue? –preguntó sin importar que Blazh estuviera ahí, escuchando-
Lo pensé. Después miré a Megan de reojo, ella se encontraba levemente alejada de nosotros, probablemente porque le había dicho que no se acercara tanto a mí.
- El ambiente de Seigue va a ser más pesado para él, tomando en cuenta que nació aquí, podría tener el mismo problema que Megan. O puede que no ¿Vale la pena arriesgarse?
Chrystal lo pensó un momento.
- Aunque él sea de tres razas diferentes, siempre hay una que domina a las demás. Megan, por ejemplo, es más humana que Guerrera, mientras que con Keyla pasa lo opuesto, por eso es más alta y más fuerte que Megan.
Esta última frunció el ceño. Chrystal la miró.
- Eres más fuerte que ella por el Prodigium, pero sin él, no lo eres. Tu cuerpo sigue siendo humano. –Se encogió de hombros- Bueno, quien sabe, siempre hay excepciones.
Megan asintió sin agregar nada y se distrajo viendo las calles y las casas de alrededor.
- ¿Y cuál es la raza dominante de Blazh? –rompí el silencio-
- No estoy segura. Realmente no puedes medir eso por medio de la sangre, sino que lo notas con el tiempo, en el comportamiento físico y psicológico y un poco en la apariencia, pero es mejor no dejarse llevar por esto último. Hay muchas cosas que tomar en cuenta que no podríamos verlo ahora. Todavía es muy joven. –Sus ojos viajaron alrededor, como si buscara algo, un peligro, tal vez- Si me preguntas a mí, yo diría que su raza dominante es la Eléctrica, es muy inteligente. Incluso más que muchos adultos.
- Bueno, entonces tendremos que arriesgarnos, podemos inyectarle lo mismo que tu padre le inyectó a Forrest. Así se acostumbrará al cambio de temperatura. –Lo pensé por un momento- ¿Qué hay de ti?
- ¿De mí?
- Naciste aquí y tu cuerpo es muy débil, tu misma lo dijiste, tienes que estar tomando un medicamento a diario ¿Crees sobrevivir en Seigue?
Suspiró
- ¿Cómo puedo saberlo? Mi cuerpo es impredecible, no puedo ingerir o inyectarme cualquier medicamento, y entre ellos está el que me ayudaría a sobrevivir allá. Sin embargo, hay que tomar en cuenta que soy cien por ciento Guerrera, debería ser capaz de sobrevivir allá.
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Perdido Entre Lágrimas
FantasyLibro #2 de Lágrimas Congeladas El planeta Seigue jamás había tenido que enfrentar sucesos tan extraños, y no hablo de guerras sino de algo que deja a todos totalmente confundidos, acontecimientos que solo llevan a una misma cosa: Eléctricos. El Su...