Sala de Espera

Capítulo 25 Lo mío

Hoy el día comienza difícil con unos pacientes de Alejandro, unos son más impertinentes que otros, gracias a Dios hay uno más llevaderos. Me mandan a una enfermera para que me ayude por la cantidad de pacientes y doctores que viene hoy, se llama Carolina y aun que es un poco tosca con los pacientes y tiene un carácter casi que amargada, conmigo se muestra amigable, pero los pacientes prefieren hablar conmigo, que con ella. Ella me cuenta de su experiencia aquí en el hospital mientras buscamos historias y las hacemos, ella se va con el ginecólogo para que yo siga buscando historia, yo ya sé dónde están cada una y a ella se le ha olvidado, yo diría que también está un poco incomoda porque hay unos pacientes que me traen café, pero son pacientes que ya los conozco, son de Alejandro. El cual debe de estar muy ocupado por que hoy no me ha escrito, tal vez es para no fastidiarme, por que como nos vamos a ver dentro de un rato. He logrado bajar un poco la cantidad de historias por buscar cuando llega un chico moreno, alto con un arreglo de flores de dos pisos unido por un pedestal forrado por hojas decorativas del arreglo, el piso de arriba está lleno de rosas rojas y 3 rosas blancas formando un corazón, el piso de abajo es una caja con flores decorativas, con 4 rosas rojas y una blanca.

-La enfermera Estela - pregunta el muchacho de aproximadamente 18 años. Me levanto de la silla, con la boca abierta y sin poder decir nada por unos segundos, estoy confundida.

-Soy yo -digo cuando me recupero mi voz antes del que el muchacho se desespere más.

-Esto es para ti -me dice el chico- ¿dónde te lo coloco?- me pregunta.

-Hemmm... será aquí- digo señalando adentro del star uno de los archivadores- sobre el- digo y cuando el chico se mueve veo detrás de él, en la distancia a Andreina y otras enfermeras, están viendo lo que estamos haciendo el muchacho y yo, el me da un papel para firmar y luego se retira sin decirme quien mando estas flores. Aunque no tiene tarjeta me imagino quien me las pudo mandar, tienen que ser de Alejandro, pienso observándolas. En eso llega Carolina con Andreina.

-¿Y ese arreglo tan bello?- pregunta Carolina.

-No sé, no trajo tarjeta- digo tratando de sonar despreocupada y rogando que no se me note el color rojo de mis mejillas.

-Debes tener un doctor loquito por ti- continua ella.

-Aunque hay un doctor por aquí que siempre hace eso de regalar arreglo de flores- dice Andreina colocándole su veneno a la oración.

-¿Si? no sabía, este es el primer arreglo que me regalan desde que estoy trabajando aquí, así que no sabría decirte si es uno de eso... ¿qué decía la tarjeta del tuyo?- le digo como si no pudiera sentir su mala intención.

-¿El mío? No yo siempre te he dicho que no me presto a eso juegos con los doctores- dice Andreina moviendo en donde está.

-Hummm como este no trajo tarjeta no sé si es un doctor quién me lo manda - le recuerdo.

-Está muy bonito- continua Andreina diciendo con sarcasmo- me imagino que no te molesta si me tomo una foto con el ¿verdad? Tómamela Carol- le dice sin esperar mi repuesta y le entrega el teléfono a su amiga.

-No hay problema- le contesto mientras que un alboroto llama nuestra atención, es Alejandro llegando, como siempre con su remolino de pacientes alrededor. Se detiene al observar donde estoy, saluda con la mano y sigue a su consultorio; desde aquí puedo ver los cafés que lleva en la mano, me imagino que paso de una vez a su consultorio para disimular ante mis compañera.

-Para ver como quedaron las fotos- dice Andreina mientras le quita el teléfono a Carolina y lo revisa- me veo bien, voy a colocar una en mi estado- dice explorando su teléfono y yo comienzo a recoger las historia del doctor- bueno, voy con el doctor, en realidad viene fue por el- la miro tratando de esconder mi curiosidad pero creo que no lo logro porque Andreina termina diciendo- es que necesito una indicaciones para un paciente que nos dejó ayer - da explicaciones que nunca se pidieron. Se retira y va hasta el consultorio.