Alejandro tuvo que dejarme sola estos dos días muy a su pesar, asegura que para mañana cuando regresé su hermano lo primero que van hacer es buscar un apartamento para mudarse a la ciudad y tenerme mucho más cerca.
Hermano el cual una vez me envió flores para ayudar a mi pronta recuperación del golpe que recibí. Debe ser algo de familia porque Alejandro desde ese día también lo ha estado haciendo.
Andreina sea portado excesivamente amable conmigo, debe ser que siente pena por mi "supuesto intento de asalto" que recibí, por el cual tengo este golpe en la cabeza. Ella es de carácter difícil, hay que saberla llevar pero ha estado tranquila.
Llegan pacientes para las distintas consultas y a los de Alejandro, les informo que eso es con Andreina con la que tienen que hablar.
-No, tranquila encárgate tu de sus... paciente y desastre- me dice con un tono cómplice- además sus pacientes son odiosos- me dice bajando la voz y me guiña un ojo- voy a voy a buscar estas historias- señala las facturas.
Cuando logró salir de la impresión que me causó el cambio de opinión de Andreina, comienzo a recoger las facturas ¿por qué ese cambio de posición? Si ella cuando llego aseguró que Alejandro solo trabajaba bien y ordenado con ella. Ella quería trabajar con el... no entiendo. De verdad a cambiado mucho.
-Ok...- digo dudosa, aunque no se si me escuchó- buenos días, pacientes del dr Lares, por aquí, por favor- digo para separarlo de los otros pacientes y su vez, clasificarlos por: consulta, reposo y emergencia.
-Que bueno que tu nos atiendes, encanto- me dice una de las pacientes de Alejandro, es una señora de unos 50 años aproximadamente- al otra enfermera es medio pesadita- dice bajando la voz, para que solo yo la escuché.
-Todas no somos iguales- digo en forma cómplice.
Comparto con Adrenalina los detalles que me traen los pacientes y doctores, trato de retribuir lo amable que es.
-Y... ¿que piensas del doctor Lares?- me pregunta inclinando se un poco hacia mí.
-¿Que pienso sobre que exactamente?- me inclino también.
-Somos amigas, puedes hablar con confianza, cuéntame... ¿te gusta? ¿Tu y el...?- comienza a preguntar ¿por qué lo hace?
-¿Que te hace pensar eso? ¿Como crees que el y yo...?- me propongo sobresaltada.
-No has respondido mi pregunta- dice también reclinada sobre su silla.
Pienso en Alejandro y soy capaz hasta de oler su perfume
-Te voy a enseñar como se responde, preguntame a mí y prometo responder con toda la verdad- dice levantando su mano derecha.
-Tu y A... - iba a decir Ale, pero no sería correcto- no, quise decir, tu y... - comienzo a decir pero nos interrumpen.
-Buen día, señoritas- levanto mi rostro para mirar a quien nos interrumpe y es Ale.
-Doctor, buen día- digo sorprendida.
-Buenos días- Andreina gira su rostro -¿qué nos trajiste?- pregunta con esa familiaridad que tanto odio, pero tengo que respirar son celos tontos.
-Hola ¿como estas? Yo, bien - responde con su toque de ironía que tanto me gusta - Traje café - muestra los 3 vasos de café.
-¿Llegue a tiempo para la repartición?- aparece atrás de Ale el ginecólogo.
-Hey! Colega, no esperaba coincidir contigo- le responde ale a modo de disculpas.
-No importa - dice riendo - me retrase un poco - dice acariciando su cabello corto- Este retraso sirvió para que hablamos ¿en tu consultorio o el mío?- le habla a Ale.
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Sala de Espera
RomanceEstela es una chica, recien graduada de enfermera , viuda y con 1 hija. Su vida siempre se visto envuelta en relaciones tóxica y dolorosas, además de no poder evitar despertar envidias, pasiones en su ambiente laboral. No entiende ¿Qué le pueden env...