Sábado 20 de abril.
Cuando no tenía grandes tareas que hacer ni planes hechos con anterioridad, Scott solía pasar el fin de semana en casa. Se adueñaba de la sala y se pasaba el día viendo películas o series enteras, como cualquier chico de su edad.
Scott estaba próximo a graduarse de la preparatoria, dentro de poco tendría que hacer solicitudes para varias universidades, dentro de poco ya no tendría tanto tiempo para relajarse como le gustaba, por eso aprovechaba sus últimos meses.
Ese fin de semana iba a hacer lo mismo, tenía planeado arreglar un poco su cuarto y luego pasar el resto de su día en el sofá comiendo botanas y viendo algunas películas de terror de serie B. Amaba lo pésimas que eran esas películas. Él ya tenía su plan perfectamente establecido y cuando el reloj marcó la 01:15 pm, se echó en el sofá con un bol lleno de palomitas y papas, estaba por comenzar su asombroso fin de semana cuando alguien tocó el timbre y tuvo que levantarse a atender.
Se arrepentía de haberlo hecho.
-Scott, vamos, no te estoy pidiendo nada de otro mundo -.
-Claro que sí, me pides que abandone mi hermoso y perfecto mundo para ir a un planeta totalmente desconocido -.
-¿Es enserio? -.
Lang se cruzó de brazos y desvió la mirada.
Hope suspiró y se cruzó de piernas sobre el sofá. Sabía que convencer al terco de su primo no iba a ser fácil, pero tampoco se iba a rendir tan fácil.
Scott por su parte estaba en una postura de negación total, listo para luchar contra cualquier táctica que su prima pudiera usar para intentar convencerlo.
-¿Tienes algo mejor que hacer? - le cuestionó ella.
-Por supuesto, ya tengo todo mi día planeado y por cierto, está lleno de diversión -.
-¿Ah sí? ¿viendo...? - revisó las cajas de películas en la mesa de estar - ...Pirañaconda? ¿Birdemic? ¿es enserio, Scott? -.
-¡Son ridículamente geniales! -.
-Espera ¿por qué tienes esto en DVD? - si había algo que le sorprendiera más que su gusto por esas películas, era el hecho de que las compraba en lugar de verlas por internet.
-Conozco un lugar donde te dan 5 por 20 dolores -.
Hope lo miró con mucha extrañeza pero se dio cuenta que se estaba desviando del punto, así que dejó las películas de lado y miró seria al castaño.
-¿Enserio prefieres quedarte en casa viendo eso en lugar de acompañarme? -.
-Lo prefiero mil veces más, sabes que detesto las fiestas -.
En efecto, Hope estaba allí para convencerlo de ir a una fiesta con ella, cosa que no pasaría jamás.
-Antes no te desagradaban -.
-Antes era un mocoso ingenuo y estúpido de 15 años - le recordó poniéndose cada vez más de pésimo humor.
-Scott... -.
-Sabes que estarán allí, Hope, todos ellos -.
-Lo sé - bajó la mirada sintiendo vergüenza de sí misma por intentar convencerlo a pesar de conocer sus negativas a ir.
A Scott no le gustaban las fiestas porque siempre, en todas y cada una de ellas, iban los jugadores del equipo. Las fiestas son algo infaltable en la agenda de los chicos populares, parecía haber una competencia entre ellos para ver quién iba a más fiestas, por lo que ninguno se perdía ni una sola y él no tenía ganas de encontrarse con ellos. Fuera de eso, no tenía nada en contra de ellas, no le molestaba el ruido ni la gran cantidad de gente, ni siquiera le molestaba el alcohol.
ESTÁS LEYENDO
Primera Plana - Star-Ant - Marvel
FanfictionScott Lang, fotógrafo del diario escolar, es encomendado a realizar un artículo sobre el equipo de fútbol junto con su mejor amiga. Scott detesta a todos en el equipo de fútbol por asuntos del pasado y le resulta fastidioso el nuevo trabajo. Peter Q...