Capítulo 22

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Baile inolvidable.
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Apenas entramos al gran salón donde va a ser el baile todas las miradas se posan sobre nosotros. Tiene sentido, somos diez personas y seis de ellas no vienen al instituto, por ende no las conocen. La música suena alto y como la fiesta empezó hace un rato ya está más o menos llena y con gente bailando o tomando ponche, un baile normal, de no ser porque en cualquier momento licántropos se pondrán a pelear contra cazadores, claro que los humanos no se enterarán.

-¿Por qué no me dijiste que tu hermano estaba tan bueno?-pego un respingo cuando siento la voz de Kate a mi lado. Me parece tan gracioso que ella siempre se olvide que podemos escucharla aunque la música esté altísima.

-Es mi hermano mellizo, Kate, tendrías que haberlo supuesto ya-bromeo y la pelirroja gira los ojos, ya acostumbrada a mis bromas egocéntricas-. Igualmente tiene novia y probablemente esté escuchando esto, así que aléjate.-me río por la cara de vergüenza que pone mi amiga. Luego rueda los ojos nuevamente y suspira.

-Ella también es linda, no tengo problemas con...-niego inmediatamente y Kate se calla. Bufa-Si que los licántropos son territoriales.

-Ni te imaginas.-murmuro-Ven, vamos a bailar.-le digo para cambiar de tema y disfrutar la única parte realmente buena del baile.

-Emmy, no te alejes mucho.-advierte Zack a mi lado.

-Sí, papá.-le digo sarcásticamente yéndome con Kate de la mano. Puedo escuchar como el pelirrojo se ríe.

Mi amiga y yo empezamos a bailar al son de la música, haciendo ese típico movimiento de caderas de cuando aún no nos acostumbramos al ritmo, como todas las chicas están haciendo ahora en este baile. Nos mantenemos en movimiento hasta que el Dj cambia a una canción en español, una de esas naciones latinas que realmente están muy buenas.

-¡Deberían poner de moda este baile aquí!-exclama mi amiga meneándose bastante sensualmente hasta bajar casi al suelo. Me río e intento copiarle el movimiento, en numerosas ocasiones Kate me ha intentado enseñar este baile pero creo que no me sale muy bien, a ella sí porque nunca ha sido de escuchar canciones de nuestro país, además la familia de su madre es de Latinoamérica.

Comienzo a bailar meneándome y barajando hasta donde puedo, pasando mis mis manos por mi cabello, luego mi cuello, mis pechos, mi cintura y cuando voy a bajar a mi cadera, ya siento una mano allí. Y a alguien detrás mío. Estoy apunto de empujarlo hasta que huelo su olor y escucho su voz.

Mi corazón se detiene.

-¿Qué te parece si bailas así conmigo?-el susurro de Ethan hace que su aliento golpee en mi oreja y me produzca escalofríos. Puedo sentir mis mejillas calientes. Uf, hace calor por aquí de pronto. No me quiero dar vuelta porque seguro estoy roja como un tomate. Busco a Kate y la encuentro en otra esquina bailando con Alexa, ambas me sonríen levantan sus pulgares, buenas amigas, eh.

Tomo todo el aire que mis pulmones me permiten y me doy la vuelta. Grave error. Mi cara queda a unos milímetros de la suya y eso solo aumenta mi nerviosismo, ¿Quién eres y qué hiciste con la Emmaline que conozco? Ethan sonríe y acerca su rostro un poco más tomándome de la cintura, elevo mis brazos hasta quedar rodeando su cuello.

Puedo sentir mi corazón latir a una velocidad desconocida, pero el suyo no se queda atrás. Sonrío al darme cuenta que no soy la única afectada por el contacto y me acerco más a él, tentándolo. Sí, esta es la Emmaline que conozco.

En mis manosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora