En mis manos

Capítulo 1

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¿Quiénes son y qué significan para ti?
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El tacón de mis botas suena por los pasillos del colegio, es el primer día de clase y ya quiero que acabe. Me va bastante bien en cuanto a calificaciones, pero eso no le quita lo aburrido a este lugar.

Busco por la cafetería la cabellera pelirroja de Kate. Kate Pierce, mi amada mejor amiga que no entró a clase y me dejó sola en el último recreo.

—Emm, ¡Emmaline!

Hablando del rey de Roma.

Me doy vuelta para encontrarme con mi mejor amiga, ella está sonriendo.

—Hasta que apareces, Kate. —Frunce el ceño, desentendida—. No te vi en la última clase y recreo.

—Tuve que hacer unas cosas... ¿Viste a Liam? Me debe una tarea de matemática.

Hizo un gran cambio de tema y puedo notarlo, pero se la voy a dejar pasar esta vez porque me duele la cabeza y no quiero indagar nada.

—¡Hey. chicas! ¿Me buscaban? —El susodicho aparece abrazando a Kate de atrás y haciendo una de esas sonrisas de galán que se supone te matan, pero tanto mi amiga como yo ya estamos acostumbradas.

—Liam, no. No te buscábamos. Kate lo hacía. Y no grites tanto que me duele la cabeza —me quejo apretando mi cien.

No sé porqué me duele tanto, ayer no salí ni nada. El casi rubio rueda los ojos fingiendo irritación y yo le saco el dedo corazón. Sé lo que está pensando: que malhumorada eres, Emm.

Pero todos somos malhumorados cuando nos duele la cabeza. ¿Qué esperan? ¿Que ande con rositas y regalando sonrisas para todo el mundo?

Ugh, ni siquiera me dijeron nada y yo ya me estoy defendiendo mentalmente.

Pasamos lo que queda del recreo hablando de una apuesta de Matemática que hicieron Kate y Liam sobre la nota de un trabajo. Trabajo que no entregué, ahora que recuerdo.

—¿Qué límite de tiempo había para entregarlo? —le pregunto a mis amigos metiéndome en su conversación.

Mis amigos detienen su charla y me miran, alzando ambas cejas.

—Um, creo que ya no podes entregarlo pero no te preocupes, es solo una nota —dice Kate a mi lado y yo asiento.

Sinceramente no me interesa el trabajo, solo le pregunté para distraerme un poco de las inquietantes miradas hacia nosotros.

Siempre es lo mismo.

Los alumnos de esta preparatoria nos llaman <<El trío misterio>> y aunque no tengo mucha idea de porqué, supongo que es porque desde que nos conocemos somos casi inseparables y muy rara vez hablamos con alguien además de nosotros tres.

Además de que las personas no se acercan ni para coquetearnos. No es que esté presumiendo sobre nuestra atención pero no se puede ignorar lo obvio, he escuchado miles de veces a personas hablar sobre lo lindos y misteriosos que somos pero a esas frases siempre se les suma algún comentario como: