31. sorpresas

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Continuaron caminando mientras la pequeña metía conchas en el cubo que llevaba. Por fin, tras numerosos hallazgos por parte de Sunmi, llegó el momento de regresar. Yixing y Camile seguían tomados de la mano.

—¡Yixing tene la mano de mamá! —Yixing notó lo mucho que el lenguaje de la niña estaba mejorando—. ¡Yixing, tiene la mano de Sunmi tamién!

Yixing sonrió y cogió la pequeña mano en la suya. Teniendo a ambos lados aquellos dos seres que estaban cobrando tanta importancia en su vida, Yixing decidió que el paraíso no podía ser mejor.

Bueno, en realidad, la guinda sería tener a Camile en su cama todas las noches.

Cuando llegaron al prado cerca de la casa, Yixing murmuró: —Tenemos compañía.

¿Compañía? Camile alzó los ojos y pronto vio el familiar rostro de Jake, sonriente, en la terraza.

—¡Jake!

—Hola, ¿qué tal?

El abogado de pelo cano miró fijamente a Camile cuando se reunieron.

—No cabe duda de que tienes mucho mejor aspecto que el que tenías la última vez que te vi.

—Me siento mucho mejor —le aseguró ella—. Creo que incluso podría volver al trabajo.

—No, no puedes —dijo Yixing dejando a Sunmi en el suelo, y la niña se echó a correr en dirección a la cocina—. Ahora viene la época de mucho trabajo para mí y has prometido ayudarme. Además, el médico quiere que sigas guardando reposo, ¿o se te ha olvidado?

Luego, miró a Jake con dureza.

—Me dijiste que podías arreglártelas sin ella hasta que el niño naciese.

Jake alzó las dos manos y se echó a reír.

—Y puedo, no te preocupes. Cálmate Yixing, no he venido para llevármela. He venido porque necesito que firmes unos papeles respecto a la herencia y, de paso, quería saludar a Camile.

Ella sonrió y miró a Jake con cariño.

—Estoy muy bien. Bueno, si queréis hablar... no quiero molestaros.

—No te vayas, Camile, no se trata de nada que no puedas oír —contestó Jake indicando la mesa de cristal bajo una sombrilla a rayas amarillas y blancas—. Podemos hacer esto ahora mismo, Yixing. Luego, después de que nazca el niño, sólo te quedará por firmar un documento más en el que conste que el niño es tu legítimo heredero antes de que todas las propiedades vuelvan a tus manos.

Camile se quedó atónita al oír aquellas palabras.

¿Qué había querido decir Jake?

¿Qué tenía que ver el niño que iba a nacer con las propiedades de Yixing?

dreams - yixingWhere stories live. Discover now