Two boys for me.

8. Autocontrol

Creo que no me equivoque, esta definitivamente ha sido una buena noche.

Caminamos por la cuidad, fuimos a un restaurante, luego a un bar, Landon no dejo que tomara ni una gota de alcohol y él tampoco lo hizo, Lex y Max se fueron y no los volvimos a ver, razón por la cual salimos del bar y fuimos a un parque que quedaba justo al frente, hablamos un rato y justo ahora nos estamos besando.

—Espera, espera—dice Landon alejando su boca de la mia, no entiendo porque—¿Él chico de la pierna lastimada no es tu novio? Porque si es así créeme que me siento muy mal, no soy ese tipo de chico Elle—dice y puedo notar la preocupación en su rostro.

—No es mi novio, es mi hermano—digo porque se que decir que es simplemente mi amigo le queda corto y no quiero dar explicaciones, aunque ahora que lo pienso que carajos acabo de decir.

—¿Te besas con tu hermano?—pregunta sorprendido.

—Genéticamente no es mi hermano—digo en un tono que espero no haya sonado desesperado, pero me estoy besando con Landon, con Landon mi crush el universitario.

—¿Puedo volver a besarte?—pregunta con una sonrisa dejando esta conversación detrás, asiento.

Landon une nuestros labios, son movimientos lentos, porque como he repetido mil veces, es un chico bastante educado, una de sus manos va a mi cabello y otra a mi mejilla, su lengua pide permiso a la mía para jugar, la cual acepta sin dudar. Una de mis manos van a su rubio cabello, despeinándolo, se que no se deben dar besos en la primera cita pero me vale.

Mantengo mis ojos cerrados mientras me besa, él igual, debo admitir que es un muy buen besador, enciende áreas en mi que no deberían de estar encendidas. Él lleva todo el control del beso hasta ahora, que decido tomarlo yo. Deshago nuestra unión.

—Recuéstate del árbol—Le pido, él lo hace inmediatamente, tomo asiento en sus piernas, dejando mi parte íntima a la par con la suya, rozo mis labios en los suyos, hago este movimiento unas tres veces para luego cambiar los roces de lugar, a su cuello, ahora paso unas tres veces más mis labios por este lugar, pero no estancándome en el mismo lugar, hago pequeños movimientos, ahora dejo besos desde su cuello a sus labios, dejo una pequeña lamida en su labio inferior, que lo hace emitir un pequeño gemido. Lo que sin duda alguna me hace querer llegar al siguiente nivel.

Bajo lentamente mis manos por su cuerpo, tratando de tocar todo lo que puedo, hasta llegar a los botones de su pantalón, juego un rato con ellos y con su gran erección por encima de la tela, mis besos bajan a su cuello, abro los ojos para mirar los suyos fijamente, sus ojos marrones con pupilas totalmente dilatadas se encuentran observándome, de la manera en la que un cazador observa su presa, todo esto antes de abalanzarse sobre mi, obvio con cuidado de no lastimarme y tomar él el control del beso, ahora yo encontrándome recostada del césped en vez de él del árbol, me besa de una manera más intensa que al principio, lame mis labios, pero no de la forma lenta en la que yo lo hice anteriormente, una de sus manos se encuentra en mi muslo, lo que me recuerda lo que estaba haciendo antes de que Landon me convirtiera en su presa, como puedo llevo mis manos a su entrepierna e introduzco mi mano bajo su ropa interior, siento su duro miembro en mis manos, el gime y su agarre en mi muslo aumenta, comienza a subir su mano lentamente hasta quedar frente a la barrera de mi ropa interior la cual se encuentra totalmente mojada, él juega con ella mientras me besa mi cuello, yo por mi parte masajeo su miembro y así entre toques, gemidos y besos que van desde mi clavícula a mi boca y sus dedos introduciéndose en mi intimidad a una velocidad intercalada, alcanzo mi orgasmo, esa sensación de liberación que no me da ni el yoga, me llena por completo, estoy tan dentro de mi nube de placer que no me doy cuenta de que Landon también ha alcanzado la suya, hasta que escucho un gemido y siento el líquido caliente recorrer mi mano, lo toco por última vez antes de sacar mi mano, él hace lo mismo y se acuesta en el césped a mi lado.