Fruncí el ceño. ¿Dónde me encontraba? Estaba en un suelo mojado, había agua pero no mucha. No podía ver mucho, estaba todo oscuro, solo había negro. Escuché unos pasos resonando en todo el lugar hasta que pararon a mi lado. Alguien tomó mi mentón e hice que lo mirara. Mía. Me sonrió. No era una sonrisa que me diera muy buena espina.
-Hola, Lyla.-Mi corazón se saltó un latido. Ella estaba de cuclillas.
-¿Cómo..?
-No preguntes cómo lo sé.- se volvió a incorporar. Realmente es muy bonita, no me sorprende que Drogo se haya fijado en ella. Lástima que es una perra.
-¿Dónde estamos?- estaba muy confundida. Miró a su alrededor.
-Dentro de ti. Más específicamente en tu mente.-Fruncí el ceño.
-¿Estoy soñando?
-Algo así. En verdad realmente estás hablando conmigo. Yo me metí aquí.
-¿Qué buscas?- Me quise poner de pie pero mi cuerpo no reaccionó.
-Solo vine a darte un mensaje de mi superior.-una demoníaca sonrisa se extendió en su perfilado rostro.
-¿Mensaje?- Estaba muy confundida.
-Vimos un gran potencial en ti, Riley.-Esta vez no utilizó el nombre que me pusieron mis padres. Se arrodilló a mi lado, acunó mi rostro y me miró con fascinación.-Podríamos hacer grandes cosas juntas. Únete a nosotros. Es lo mejor para todos.-acarició mis mejillas.
-¿Realmente crees que traicionaría a mis amigos para unirme a ustedes?-¿Por quién me tomaba?
-No los traicionarías, estarías haciéndoles un favor. Solo los estás metiendo en muchos problemas al involucrarlos en esto. Únete a nosotros y prometemos no meternos con tus amigos y ayudaremos a liberar a tus padres.-elevé mis cejas en sorpresa.-Sí, lo sé todo.
-¿Cómo sé que cumplirán su palabra? Tienen a Drogo y a Sarah atrapados. ¿Qué me confirma que no harán lo mismo con ellos?
-Liberamos a Drogo y a Sarah.-Me sonrió.
-¿Por qué debería creerte?
-Solo tienes la opción de creerme. Nicolae, Lorie y Peter desaparecieron con ellos. No sabemos dónde están. Puedes estar segura de que no les haremos nada. Bueno, eso sólo lo decides tú, está en tus manos. ¿Qué dices?-liberé mi rostro de su agarre. Me miraba con mucha fascinación, como si yo fuera un diamante que acaba de encontrar.
-No puedo hacerlo... no sé si pueda confiar en ti.-volvió a colocar una mano en mi mejilla.
-Tú confías en muchos en los que no deberías. ¿Por qué eso cambia conmigo?-fruncí el ceño confundida. ¿A qué se refería?-Te dejaré pensarlo. Volveré, tenlo por hecho.-al liberarme una de sus uñas dejó un rasguño en mi labio. Puse una mueca al sentir sangre resbalar por mi labio inferior. Lamí mi labio y sentí el sabor de la sangre. Se puso de pie.
-No, espera. Quiero respuestas.-Me sonrió desde su altura.
-Ya las tendrás.
-¡No, espera!- chasqueó los dedos y de repente abrí los ojos y me incorporé, con la respiración acelerada.
-Hey...- escuché una voz dulce y luego unos brazos a mi alrededor.-¿Te encuentras bien? Solo fue una pesadilla.-Zoe intentó calmarme. Toqué mi labio al sentir el sabor de la sangre. Solo era un mensaje que me dejó Mía: no fue un sueño.-Oh, déjame ver eso.-Me dio un pañuelo y lo presionó en mi labio.
-Estoy bien, gracias.- le sonreí.
-¿Todo bien?-Asentí y sonreí para calmarle. Mía estaba loca si creía que iba a traicionarlos. Ellos lo son todo para mí. Pero por otro lado, si no lo hago, ellos podrían hacerles algo. ¿Qué hago?-Los demás nos están esperando. ¿Vienes?-Asentí y me puse de pie. Oh, creo que no se los había mencionado. Nos encontramos en algún lugar del mundo con una tribu que se parecen a los humanos, pero no lo son. Al principio quisieron atacarnos pero les hicimos saber que veníamos en paz. Nos dieron alojo y pasamos la noche aquí. Salimos de la carpa en la que estaba durmiendo y reí al ver la escena. Estaban los chicos en pantalones, sin camiseta, con plumas en la cabeza y la cara pintada con líneas y símbolos, imitando una danza extraña con unos niños de aquí, mientras que otros usaban a Ricky como si fuera un caballo.
-¡Ven a bailar!-Me dijo Jean.
-No gracias, no estoy a la altura de ustedes.-sonreí burlonamente. Hasta Jack y Mika estaban divirtiéndose.
-Aprendes rápido, tú puedes.- Dijo Mika tomando mi mano y llevándome a bailar. Reí por la sorpresa mientras él me hacía dar un par de vueltas. Luego me soltó y seguimos bailando. Realmente me vino bien. Despegarme un rato de la realidad y no pensar en nada por un momento. Los niños eran muy dulces y me enseñaban algunos de los movimientos.
Luego de ese gran momento nos reunimos con los demás para comer. Zoe sabía cómo hacer una especie de traductor con los poderes, es decir, nosotros hablábamos y ellos nos entendían y viceversa. No sé cómo lo hace pero funciona. Les expliqué que era vegetariana y fueron muy amables en darme algo que pudiera comer. Por otro lado, los demás estaban felices de al fin comer carne y no basura, como ellos habían dicho.
-¿Ya te encuentras mejor?- dije mirando a Mika.
-¿Qué?-Apunté en donde le habían disparado.-Oh, eso. No te preocupes. Cuando pasamos por los portales las heridas se curan. Estoy bien.-Me sonrió. Asentí más tranquila y seguí comiendo.-¿Tú estás bien?-Miré una segundo mi comida y luego suspiré.
-Eso creo.- frunció el ceño.
-¿Estas herida?- se sentó a mi lado y me miró con preocupación.
-No, no es eso. Es solo que...-que no sé qué hacer con lo que Mía me dijo y no puedo decidir. Traicionarlos y ponerlos a salvo o no traicionarlos y ponerlos en peligro.-...esto me tiene un poco estresada, nada más.- sonreí para calmarle. Pero él notó mi sonrisa falsa así que decidí cambiar de tema rápidamente.-Veo que te diviertes mucho aquí.
-Sí, fueron muy amables.-sonrió nuevamente.
-¿Eso que veo ahí es una sonrisa?-reí y él rodó los ojos aún sonriendo.
-¿Sabes? Tengo sentimientos.-dijo haciéndose el ofendido. Reímos.-Riley...- lo miré pero antes de que dijera palabra sentí que unos brazos me tomaban y me elevaban.
-¡Hey!- reí al ver a Jhon.
-¡La capturamos!-gritó hacia los niños y Jean, quienes comenzaron a hacer sonidos raros con la boca, como diciendo que tuvieron una victoria.
-¡Tráela!- ordenó Jean. No entendía muy bien qué hacían, solo les seguí el juego.
-Oh, nuestra querida Riley, por favor sé nuestra diosa. Te coronaremos con esta corona de flores.- dijo Jhon, dejándome en el suelo. Una niña que estaba allí se acercó a mí y me mostró la hermosa corona de flores hecha a mano por alguno de ellos. Le sonreí y me agaché para que pudiera colocármela. Ricky ladró contento. También me colocaron una capa y me pintaron la cara como ellos.
-¡Ya tenemos a nuestra diosa!-gritó Jean y todos comenzaron a hacer el sonido raro otra vez. Reí.
-Como su diosa, quiero hacerles una petición.- dije siguiéndoles el juego. Todos me miraron atentos.-¡Capturen a los señores Mika y Jack y a la señorita Zoe! ¡Tienen que ser parte de nosotros!
-¡Ya escucharon a nuestra diosa!- sonrió Jean.
-¡A la carga!- le siguió su gemelo. Todos se fueron corriendo menos la niña que me puso la corona.
-Te ves muy bonita.- le sonreí agradecida por su cumplido.-Seguro que a tu novio Mika le encantará.- borré levemente mi sonrisa, en señal de confusión. La niña sonrió y se fue con el resto. ¿Novio? ¿Mika? Suspiré y simplemente los seguí. Aunque Mika me confunda, Drogo tiene mi corazón.
Buenaaaas, al fin actualización jajajaj ¿Qué opinan de Mía? ¿Qué creen que decidirá Riley? ¡Comenten!
¡¡¡Los amo!!! 💜🖤💜🖤
Sami
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My no so Secret [Secuela de "¡My Secret!"]
FantasiPortales, revelaciones, amor, peleas, búsquedas... ¿realmente podré lograrlo? Para la comprensión de este libro hay que tener leída la primera parte "My Secret" ¡Disfruten!