—eso es todo por el día de hoy jóvenes, pueden retirarse a sus casas—tome mi mochila y prácticamente todos salimos corriendo de ahí.
—¿A donde con tanta prisa?—dijo Mangel, las 4 nos miramos y sonreímos
—compras—respondimos felices. Ellos rodaron los ojos y siguieron caminando.
—¿Y a quien esperan?—dijo Alex mientras veía que todos se fueran. Pero fue interrumpido por Samuel llegando hacia mi.
—el auto esta en perfectas condiciones Leo, así lo quiero de vuelta—asenti sonriendo, intercambiamos de llaves, él se llevó mi moto y yo me iría en su coche para así pasar por su hermana.
—te veo en la noche—dije y asintió, no pudimos despedirnos de manera más íntima porque había aún alumnos merodeando.
—¿Y eso que te prestara ese precioso auto?—dijo Mangel admirando mientras caminabamos hasta el coche que estaba a una cuadra de la escuela.
—saldre a pasear con su hermana, para llevarme bien con su familia—ellos asintieron y se despidieron de nosotras, David ni siquiera se molestó en despedirse, se fue como si no nos conociera.
—David se ha vuelto un pesado—dijo Bea subiendo al coche. Eva le siguió pero Jade se quedó callada.
—tal vez si alguien diera un paso hacia él, dejaría de estar de amargado—dije mientras encendía el auto, ella se rió y nego
—él solo tiene ojos para ti—contesto y la ví por el retrovisor
—es porque no ha volteado a verte aun—apoyo Beatriz. Todas asentimos y Jade solo alzó los hombros—dejemos hoy a los chicos de lado, hoy disfrutaremos de las chicas solamente.
Gritamos y me dirigí hacia el lugar que me dijo Samuel recogiera a Mariana. Era un edificio en el cual me platicó, asistía a clases de francés los viernes. Llegue a estacionarme y esperar a verla. La recordaba vagamente pero ella sin duda tenía algo de Samuel. Cuando salió del edificio ella se acercó al auto y me sonrió.
—tu debes ser Leo—dijo y asentí, subió al auto y me saludo de dos besos—Mariana de Luque.
—Leonore. Ellas son mis amigas, Eva, Jade y Beatriz—saludaron a Mariana y encendí el auto yendo al centro comercial. Mariana platicaba con todas de gustos en general y la verdad era una chica sencilla y amable.
—los chicos dicen que en la noche estarán en las carreras—dijo Eva y Mariana nos miro
—¿Carreras de motos?—asentimos y sonrio—quiero ir
La miramos de arriba abajo y nos pareció que su atuendo no quedaría para ir a aquel lugar
—tenemos que comprarte otro tipo de ropa—propuso Jade. Las 5 nos dirigimos a tiendas de ropa algo más sencillas de lo que se veía Marina vestía. Encontramos un vestuario adecuado para que ella pasara desapercibida. Una blusa gris, pantalones negros rotos, un chaleco negro de cuero, botas negras y ella le agrego un poco de accesorios y estaba más que lista para ir en la noche.
Comimos en un restaurante simple, luego seguimos visitando tiendas en las cuales compramos algunas cosas variadas, entre las mías, una camisa para Samuel.
—ahora a buscarte un vestuario para el fin de semana—mire a Mariana y negué bebiendo de mi refresco.
—llevare algo que tengo por ahi—nego y me arrastró a una tienda, entre las 4 se dedicaron a buscar el atuendo perfecto para la fiesta del domingo.
En total me dieron 10 cambios de ropa, los cuales tuve que salir y mostrarlos para que estuvieras de acuerdo con ello. Ninguno les convenció y eso comenzó por estresarme un poco.
—chicas aprecio lo que hacen por mi pero la verdad ya no aguantaré otros 10 outfits mas—ellas negaron y buscaron por toda la tienda, yo pasé de ellas, me senté frustrada viendo la ropa. Una linda blusa blanca se asomó por entre las demás. La tome y la ví, lucía muy bonita, busque un espejo y la medi por encima
—tengo la falda perfecta para esto—hablo una señora detrás de mí. Era de edad avanzada, tenía cara maternal y sonreia amablemente—he visto que has estado buscando el atuendo ideal para tu evento
—es una pequeña reunión con la familia de...mi novio—dije y me sonrió, haciendo resaltar sus arrugas un poco más.
—sigueme—dijo caminando por un pasillo al lado del probador. Ahí había varias faldas de todo tipo y me entrego una de tubo negra—te hará verte formal pero no tanto.
—gracias—me regrese con ella detrás para probarme la ropa. Me lo ví puesto y sonreí. Sali para que la señora lo viera y ella también supo que era el elegido
—Jade dice que este vestido morado se te vería bien. Yo digo que el rosa y Mariana dice...¡Eso es perfecto!—hablo Bea llegando con más ropa. Se le unieron mis otras amigas y sonrieron emocionadas
—creo que llevaré esto—dije viendo a la señora, ella asintió contenta por la decisión. Regrese a cambiarme y salí a pagar lo que compre. Mariana aprovecho y también compro un vestido para ella y para Ruth. Luego de ahí pasamos a casa de Bea para arreglarnos y poder llevar a Mariana a las carreras.
—¿Y podré subirme a una?—pregunto mientras llegábamos a la calle. Dejé el coche y ví que ya estaba la moto estacionada.
—tu hermano me mata si te dejo hacerlo—dije y ella asintió. Las chicas habían congeniado muy bien con Mariana y parece ser que ya era parte del grupo.
—hola Samu—dijo ella solo verlo, él enarcó una ceja y se rió cuando la vio de arriba abajo
—¿Y ese cambio? Tú eres todo rosa y brillantina.
—a doc con la situacion—dijo ella y Samuel asintió. Me acerque ahora yo y me sonrió.
—¿Qué tal la pasaron?—sonrei y se acercó a dejar un beso pequeño
—las compras siguen sin ser lo mio—se río y me abrazo
—tienes que dejarme salir con ella más seguido—dijo Mariana—me la paso bomba con ella y sus amigas
—dalo por hecho—dijo Eva sonriendo. La verdad me sentía un tanto rara por la situación, tenía mucho sin ser así de feliz. Tenía amigos extraordinarios, me divertía en grande y sobre todo, una nueva oportunidad de amar.
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~Mauren
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Dangerous -S.D.L-
FanfictionLeonore Willson, una chica complicada si puede tomarse como descripcion, la vida no la ha tratado bien, pues a sus 18 años tiene que cuidar de sus hermanos menores: Mauricio de 15, Alfonso de 12, Luz de 8 y Julieta de 3. Tomando malos caminos y mal...