Dangerous -S.D.L-

26

Las cosas habían sido muy distintas el lunes que regresamos a clases. Yo tenía nada de ganas de aparecerme por la escuela, lo hice porque sabía que ahí estaria Samuel para apoyarme.

Lleve a los niños a la escuela como era costumbre, la guardería hoy no había abierto y tuve que llevarme a Julieta conmigo, sabía que con los profesores del día de hoy no tendría problema acerca de llevarme unas horas a Julieta, ademas, me mantendría distraída de no ver a David y soltarme a llorar o darle un puñetazo.

—pero si es la zorrita número uno—mire a mis espaldas topandome con Daniela, enarque una ceja y ella se rio—sabia que saldrías embarazada pero esto ya es el colmo ¿No?

—tranquilamente puedo dejar a la niña 5 segundos en el suelo, los suficientes para partirte esa cara de puta que te cargas—rodo los ojos y camino dentro, tenía mucho sin verla atacandome, ya hasta la extrañaba.

—¿Y la niña?—pregunto Mangel cuando la vio en mis brazos

—la guardería no abrio hoy, Frank estaba ocupado así que decidí traerla—Julieta estaba bastante tranquila, jugueteo un rato con Mangel hasta que entramos a la clase, David no había aparecido aún, lo que agradecía para no tener que hacer incómodo el momento.

La clase de Samuel estaba tranquila, Julieta lo veía y sonreía y Samuel de vez en cuando le respondía.

—entonces, Freud decía que...hola—se agachó un momento y tomo a Julieta en brazos, mire a mi costado notando que la niña había desaparecido—me parece que ella le pertenece

—gracias profesor—dije tomándola de regreso, la escena se hizo más incómoda cuando Julieta no quería despegarse de Samuel, después de un esfuerzo ella cedió, le di algo para que se entretuviera y él siguió con su clase.

—poco faltó para que Julieta le dijera papi—negue viendo a mis amigos mientras salíamos a las canchas, dado que Julieta estaba un poco incómoda las siguientes clases, decidí no entrar y entretenerla un rato. Los chicos me hicieron compañía al menos estas horas.

—y no dudo que si se lo diga—ellos rieron y vimos a lo lejos llegar a la pareja—pense que habían terminado el sábado.

—luego de que te fuiste, Jade regreso por él y simplemente estuvieron ahí en resto de la fiesta—asenti y cuando llegaron con nosotros ni siquiera me tomé la molestia de verlos, no quería hacerlo

—buenas colegas—dijo Jade animosa, yo miraba correr a Julieta así que no conteste

—hey, ¿que pasa?—dijo Alex, sentía como las miradas se posaron sobre mi así que me giré y alce las cejas en forma de saludo.

—¿No vas a saludarnos?—dijo David y enarque una ceja.

—creo que llevaré a Julieta a casa, no quiero que se sigan saltando las clases—dije y tome a la niña, no dije nada más mientras me alejaba de aquel lugar. Luego de un par de metros sentí que tomaban mi mochila y me giré molesta, topandome con una Jade confundida.

—¿Algo paso en la fiesta?—negue y trate de caminar pero nuevamente me lo impidio—Leonore contestame

—Jade basta, tengo que irme, hablamos luego

—¿Porque eres tan cobarde?—me detuve y la mire

—¿Cobarde yo? No te confundas Jade, que seas mi amiga no significa que me vas a hablar como se te pegue la gana

—¿Ahora sí somos amigas?—enarque una ceja, me acerque un poco y luego me arrepentí, solo rodé los ojos y me giré haciendo caso omiso—porque no aceptas que nada en tu vida está bien

Me frene en seco, la mire y espere a que continuara, no tambien podía jugar ese juego

—quiero que sigas, anda, hazlo—dije y ella se paró derecha, nuestros amigos se iba acercando poco a poco.

—tu padre un borracho, tu madre una cualquiera, tienes un novio muerto, uno que no te mereces y cuidas a tus hermanos por las estupideces de tus padres. No eres feliz Leonore, no tienes porque llevarnos a todos entre los pies por eso.

—Jade—escuche decir a Bea y negué, terminaríamos mal, yo lo sabía, pero no me iba a quedar callada

—¿Yo no soy feliz? Y tú si, sabiendo que tu novio no te quiere y vives engañada a qué él te va a querer—ella abrió los ojos, negó y rodé los ojos—yo me voy

—solo estás celosa—me reí negando, la mire y ella fruncía el ceño—porque él ya no está detrás de ti

—¿Se lo dices tú o se lo digo yo gilipollas?—dije viéndolo, él solo se giró ante la mirada de su novia. El resto de mis amigos parecieron hacerse de la vista gorda y alejarse también. Yo simplemente de fui del lugar, pronto sentí un empujón a mi espalda, bastante fuerte y por el mismo impulso caí de frente, abrace a Julieta para evitar el impacto y mi mejilla termino dando en el piso del pasillo.

Me quedé un poco aturdida al principio, mire hacia mis amigos y Jade estaba frente a mi, su respiración agitada pero en su mirada se notaba terror. Los chicos me veían como esperando una reacción mía pero lo único que hice fue ver a la niña que se había quedado quieta, como reprimiendo el llanto.

—Leo...—me levanté con ayuda de Mangel no dije nada y me acerque despacio a Jade—yo...lo siento—y creo que todos sabían lo que iba a pasar. La cachetada hizo eco en el pasillo. Su rostro se volteo ante en golpe y no dijo nada más.

Me di la vuelta y sin mas me fui de la escuela, pedí un taxi a la casa, ambas en silencio escuchando el sonido del auto en movimiento. Pague en cuanto llegue a casa y nos sentamos en la sala. Julieta no había siquiera soltado una lágrima cuando caímos.

—hey peque—me miró y sonrió, mi vida podría ser una mierda, pero evitaba que la de ellos lo fuera. Que lo dijera quien lo dijera
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Se está poniendo muy intenso estooo.

La historia va para largo y me gustaría que lo siguieran apoyando. Las cosas van a dar un giro o eso creo, quien sabe. Les amooo

~Mauren