2

72 9 0
                                    

-¡Leo, Mauricio me esta molestado!-dijo Poncho y mire a ambos mientras intentaba hacer que Julieta se dejara de mover

-¡O se calman o no los llevo de compras nunca más!-dije y ambos se detuvieron. Hoy despues del colegio me fui a hacer la despensa, ayer en las carreras habia ganado algo de dinero y podria comprar un par de cosas sin problema.

-¿Puedo subir al carrito?-dijo Luz tomandolo, asenti poniendo a Julieta en el portable y camine sacando la lista junto a mis hermanos.

-escuchen. Primero tomaremos lo que dice aqui, luego si sobra les puedo comprar algo-entre todos se apresuraron a tomar lo que veian de la lista, teniendo un ejercito en mis manos era genial ir de compras.

-¿Podemos comprar unos dulces?-dijo Poncho tomandolos, asenti mientras caminabamos al cajero, en la fila mientras leia una revista me percate que alguien me observaba, si no lo conociera y no fuera mi maestro...ya lo habria ligado.

-¿Profesor Samuel?-dije al ver que me sonrio al acercarse

-hola Leo, deja los formalismos para la escuela-le sonrei y miro a los niños-¿Tus hijos?

-¿Que?¡No! Son mis hermanos. Chicos él es un...

-viejo amigo-corrigio Samuel antes que dijera algo

-claro...ellos son Mauricio, Alfonso, Luz y Julieta-dije y todos saludaron. Platicamos un rato mientras saliamos del super, al llegar al cruce de la calle note que venia en su auto

-¿Gustas que les de un aventon?-ofrecio amablemente.

-no hace falta-dije pero los niños hicieron caras de molestia

-¡Oh claro que quiere. Pido la ventana!-dijo Poncho a lo que solo oculte mi cara de vergüenza. Me ayudo a poner las compras en el maletero y sin mas nos montamos los 6 en su flamante auto.

-¿De donde conoces a Leo?-pregunto Mauri viendo a Samuel-¿De las carreras con Frank?

-¿Carreras?-dijo viéndome a lo que pellizque discretamente a mi hermano-No sabia que corrias Leo

-no lo hago a menudo-dije viendo a la pequeña Julieta que veia entretenida el paisaje. Los niños se entretenian preguntando cosas mientras que yo le daba indicaciones de donde nos dejara. Al frenar frente a casa puse a todos a cargar bolsas y guardar mientras me despedia de Samuel

-son simpaticos-dijo al ver como entraban con las bolsas mientras yo aun sostenia a la mas pequeña

-unos demonios-se rio y me miro-gracias por traernos, no todos los profesores hacen eso

-soy poco convencional-dijo y asenti. Me acerque a despedirme de 2 besos y senti la piel erizarse al contacto con él.-te vere mañana en clases

-seguro-dije sonriendole. Subio a su auto y sin mas que un agitar de manos arranco hasta su destino.

-vaya, vaya. Una guarrilla igual que su madre-escuche a mis espaldas, mire a Francisco, mi padre con su botella en la mano.

-¿Cuanto llevas viendo?-dije y le dio un ultimo trago, arrojandola despues lejos de la calle

-un par de minutos. A la casa-inmediatamente tome a Julieta y corri hasta donde estaban los chicos que al verme se asustaron

-¿Que pasa?-dijo Mauri tomando a Julieta, al ver a papa detras solo tomo a sus hermanos y se fue a encerrar a su habitacion.

-¿Asi que te gusta andar de fácil?-dijo mientras quitaba su cinturon y sonreia.

-yo no soy mi madre-y una bofetada fue mi respuesta, luego un par de golpes con la hebilla en mi espalda y unos mas por intentar defenderne fueron lo que obtuve. Siempre mis dias eran asi.

   《》《》《》《》《》《》《》《》《》
-¿Segura estaras bien?-dijo Mau viendome y asenti poniendo un par de lentes ocultando mi ojo morado

-no les digas nada-asintio mientras los chicos terminaban de desayunar.

-hoy los llevo yo-dijo Gabriela, la esposa de mi padre y le sonrei un poco. No teniamos mucho cariño hacia la otra, pero ambas cargabamos un dolor de muelas: Francisco

-de acuerdo. Portense bien, Frank pasa por ustedes-dije y me despedi de todos tomando mis cosas para ir a la escuela

-Leo llegas tarde-escuche cuando abri la puerta, asenti y me dejo pasar igualmente, camine hasta mi asiento y evite ver a mis amigos.

-¿Todo bien querida?-dijo Bea y asenti suspirando mientras sacaba el libro. La clase se me fue bastante lenta, no puse atencion la mayor parte del tiempo y casi me mandaban a detención.

-¿Podemos hablar?-dijo Mangel detras de mi. Me levante y salimos hacia el pasillo donde habia menos gente. Alzo las gafas y nego molesto-¡¿Hasta cuando mas vas a soportar estar con él?!

-sabes que yo sola no puedo mantener a mis hermanos, a penas me alcanza con lo que gano y lo de Gabriela mas lo que le quita de la cartera

-¿Y dejaras que te siga golpeando?-dijo y le quite la mano de mis lentes

-mientras no le pegue a mis hermanos, si-nego y me cruce de brazos-no puedo hacer mas Mangel. Con su dinero practicamente mantengo a los niños

-¿Y eso justifica que te pegue?-dijo y negue-Leo es por tu bien.

-¿Y que hago?¿Me largo como mi madre?¿Me suicido? ¿Me prostituyo? ¡Dime que hago Mangel!-un carraspeo me interrumpio detras y suspire.

-¿Todo bien jovenes?-miramos al profesor Samuel y suspiramos-al salón andando. Leo espera aqui.

Mangel entro al salon sin mas y Samuel me vio un poco preocupado.

-¿Todo bien Leonore?-me cruce de brazos

-no es nada profesor ¿Puedo entrar al salon?-dije poniéndome a la defensiva

-claro, vamos-me dejo entrar primero y comenzo su clase, como él habia dicho en el supermercado, era un profesor poco convencional, pues nos enseñaba a los filosofos de manera que lo entendieramos a tiempos modernos.-como recordaran, todos los maestros le dejan un proyecto final para fines de entretenerlos, en esta ocasion sera para su calificacion-el ruido en forma de desacuerdo no se hizo esperar-esta vez sera simple, me escribiran un ensayo de al menos 100 paginas acerca de ustedes, sus sentimientos y como se complementan con la filosofia. Veran que sera pan comido

-ese hombre nos matara un dia-asenti ante la exclamacion de Jade. El timbre se escucho anunciando el fin de la clase. Algunos se levantaron mientras Samuel guardaba sus cosas.

-Leonore, venga conmigo-dijo el profesor y suspire siguiendolo hacia uno de los pasillos

-¿Puedo ayudarle en algo?-dije metiendo las manos en los bolsillos de mi chaqueta. Momento que aprovecho para quitar las gafas y notar mi ojo morado, no se habia cubierto por el maquillaje, pero aun asi no era normal tenerlo medio cerrado

-¿Asi que a esto se referia el joven Miguel?-le quite los lentes y los puse en su lugar

-usted no tiene derecho a opinar nada respecto a esto, tuve una pelea, es todo-nego y rasco su nuca-¿Era eso lo que iba a decirme para largarme?

-me han asignado como su tutor temporal, tenia entendido que su antiguo profesor de Filosofia lo era y sinceramente no quiero que repruebe.

-¿Y que haremos?-dije ahora interesada en esto, necesitaba terminar de estudiar.

-tomaremos clases uno o dos dias despues de la escuela, trabajaremos en horas libres y al final la evaluare yo mismo. Tambien sugeriría algunas visitas al psicologo...

-no estoy loca, me conformo con las clases. Y si es todo debo entrar a mis siguientes clases. Buen dia-le corte el rollo dandome la vuelta regresando al pasillo de mi salon. Tenia el corazon acelerado pero no sabia por que. Un dia hablabamos super normal y al otro no toleraba que se metiera en mi vida, algo tipico en mi. Habia aprendido a no confiar en casi nadie, porque al final te terminan dejando, como lo hizo Ruben y otras muchas personas.

》》》》》》》》》》》》》

Dangerous -S.D.L-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora