–También vengo aquí inconscientemente cuando quiero sentirme mejor.
Jongin alzó la mirada y encontró a Kyungsoo parado a unos pocos metros. Él había ido a leer un poco y cuidar del cerezo, lo hacía con bastante frecuencia. No sabía que para el príncipe era igual de importante.
–Eso me hace feliz– comentó el joven en voz inusualmente baja.
–Quería verte. Siempre quiero verte. Pero también quería informarte que mañana tendremos posibilidad de reunirnos de nuevo en mi tan querido pabellón. Las clases con los otros jóvenes maestros empezaran nuevamente y podremos leer y discutir al aire libre de nuevo.
–Pero majestad, ¿no es eso peligroso?
–Lo es. Pero se supone que con la condena y ejecución de mi hermano deberíamos estar a salvo desde ahora. Yo sé que no es así, pero no quiero que se piense que estamos al tanto y seguir escondiéndonos. Intentaré que nuestras vidas regresen a la normalidad.
Kyungsoo sabía que Jongin lo había llamado majestad por costumbre, lo hacía cuando están fuera en público para cuidar apariencias. De todas formas, le causó gracia escucharlo de esta manera.
–Muy inteligente, como siempre– le halagó finalmente Jongin. Se puso de pie y se acercó con lentitud al príncipe. –Me alegra saber que todavía quieres hablar conmigo y verme. Después de lastimarte tanto.
–Me lastimas ahora mismo con esas palabras– comentó el segundo príncipe.
–Lo lamento tanto– aseguró Jongin con verdadera sinceridad. –Es lo último que quiero hacer. Daría lo que fuera para aliviarte y evitarte cualquier tipo de dolor.
–Mírame directamente a los ojos y dime que serías feliz estando lejos de mí.
Jongin alzó la mirada, obedeciendo tímidamente la orden. Ahí estaban esos siempre grandes y expresivos clavados en su propio rostro. Y esos hermosos ojos estaban esperando una respuesta. Era tan doloroso, era tan desesperante y era completamente frustrante. Lo peor de todo es que empezaba a acostumbrarse a esos espantosos sentimientos. Eso lo dañaba en lo más profundo de su ser. Estaba seguro de que no era saludable para ninguno.
–Sabes más que nadie que cualquier cosa que te aleje de mí me mata lentamente. También deberías saber que es lo que más me duele.
–Entonces, ¿por qué, Jongin?
–Te lo he dicho. En modo alguno esto es algo que he planeado o que he querido o que he planeado para que suceda. Al igual que tú, soy como una víctima de esta situación. ¿Sinceramente crees que haría esto para lastimarnos de manera voluntaria?
Kyungsoo no dejó de mirar a su pareja en ningún momento. Sabía que le era imposible ser objetivo con él, pero no tampoco podía identificar ningún rasgo de hipocresía. No estaba fingiendo, no estaba mintiendo. Pero lo que decía era absurdo de todas formas. El príncipe suspiró.
–Digamos que te creo, Jongin. Digamos que todas las cosas que me has contado y que me has confesado son ciertas. Si te creo y te entiendo, ¿igual me dejarías?
–Debes pensar que soy un idiota o que soy un descorazonado al que no le importa nada. Tal vez pensaría lo mismo en tu lugar, no te juzgo. Pero te juro que esto no depende de mí– Jongin hizo muchos esfuerzos para no acercarse y besarlo en ese mismo instante. –Esto realmente no depende de mí, te lo juro una y mil veces. Yo no te dejaría ni estando loco. Te llevaría conmigo a donde fuera. Terminé aquí de manera repentina y puedo ser llevado de vuelta de la misma manera. Todavía no tengo suficiente información o control sobre esto.
–Entonces podemos descubrirlo juntos. Estudiemos. Tú dijiste que las respuestas podrían estar en los manuscritos. Si es cierto que el astrónomo Lee sabe algo y logró descifrarlo, nosotros también podremos. ¡Hagamos el esfuerzo! Estoy dispuesto a ayudarte en lo que sea– Jongin negó la cabeza. –¿Cuál es el problema?
YOU ARE READING
Nos vemos en el futuro (Kaisoo)
FanficHay una nueva leyenda. Son doce de nuevo. La teoría del poder aparece. La fuerza roja llena los soles de oscuridad. ¿Qué le pasa a Jongin? ¿Dónde está? ¿Y si te quedas? Esta no es mi época. ¿Les gustó Overdose: Sobredosis de emociones? Bien, les...