-Narra Alexa
14:36
Aún seguíamos en la cama después de haber tenido sexo, se estaba tan bien con el...Pero estábamos en España y yo quería conocer todos los lugares posibles así que tenía claro que no me iba a quedar tumbada en la cama.Alexa: Mateo -digo dándole golpecitos en la cara- Vamos a dar un paseo
Mateo: que pereza Alexa
Alexa: ¿vas a quedarte todo el dia en la cama?
Mateo: era mi primera vez, he acabado reventado -ríe-
Alexa: venga no seas tonto, me ducho y nos vamos
Mateo: uy como mandas eh, así no se puede -me alborota el pelo-
Alexa: no me toques el pelo estupido -le doy una bofetada suave- venga vete vistiéndote -le doy un pico y me levanto de la cama-Fui directa a la ducha y encendí el agua, la cual estuve como 5 minutos para ponerla en la temperatura perfecta, ni muy fría ni muy caliente.
Cuando ya consigo la que quiero dejo que el agua caiga sobre mi cuerpo mientras me pongo a pensar.
No se si soy la única, pero en la ducha a parte de cantar me pongo a recapacitar en todo lo que esta pasando en estos días e incluso me imagino cosas que probablemente jamas pasarán.Después de 30 minutos, si tardo demasiado en ducharme, apago el agua y cojo la toalla para envolver mi cuerpo en el.
Me desenredo el pelo, maquillo un poco y me visto:Mateo: que guapa estás
Alexa: yo siempre -río-
Mateo: más creída no podías ser, ¿no?
Alexa: y tu más feo tampoco, ¿no? -le sacó la lengua en forma de burla-Salimos del hotel y nos pusimos en busca de un restaurante para poder comer allí. A las 16:00 habíamos quedado con sus amigos y la verdad que íbamos un poco pillados de tiempo.
Iba sonriente hasta que noto que alguien me agarra y la expresión de mi cara cambia a sorpresa.
Mateo me había agarrado de la mano, y aunque os pueda parecer una tontería el nunca me había hecho, pero ahora que se lo que se siente quiero que me lo haga todos los días.Mateo: ¿aquí te parece bien? -dice parándose en frente de un restaurante-
Alexa: si, aquí mismoEntramos y nos pusimos en una mesa que quedaba justo al lado de la ventana y podíamos ver unas gran vistas.
A los pocos minutos llega un camareroCamarero: ¿que desean? -dice mirándome fijamente-
Alexa: yo quiero unos espaguetis a la carbonara
Mateo: pues yo... -se quedó pensativo- patatas y huevo frito
Camarero: perfecto -me volvió a mirar y recogió nuestras cartas acariciándome levemente la mano para después retirarse-
Alexa: ¿que te pasa? -dije al ver que Mateo me estaba mirando con rabia-
Mateo: ¿a caso no has visto como te ha mirado? es que me levanto y le parto la caraEspera, ¿que estaba pasando? Mateo no era así, no no no. El Mateo que yo conocí nunca pegaría a nadie y menos por una chica.
¿Tanto había cambiado?